¡Bienvenidos a los Estados Unidos! Así recibieron el sábado pasado a empresarios y representantes de organismos empresariales los agentes del CBP de Laredo, Texas, en una gira de trabajo para conocer los servicios y la infraestructura del puente Colombia como parte de los trabajos que realiza el gobierno de Nuevo León para impulsar su crecimiento y expansión. Para muchos de ellos que asistían acompañando al cónsul de los Estados Unidos en Monterrey y autoridades de Nuevo León, fue la primera vez que pisaban territorio del vecino país del norte, sin que les pidieran visa a los casi 40 asistentes.
La gira fue controlada y coordinada por el consulado americano y el gobierno del estado de Nuevo León. Después de un recorrido por diversas infraestructuras en Laredo, Texas, la comitiva regresó a Colombia, Nuevo León, donde les esperaba la comida organizada por el gobierno del estado, antes de que regresaran a Monterrey.
El contraste mayor fue la bienvenida que les dieron los elementos de aduanas en México, a diferencia de la gente del CBP. El autobús de regreso a México, lo abordó un elemento militar de la Aduana, pidiéndole a los pasajeros que se bajaran para hacer una inspección de la unidad y revisar a cada uno de ellos en sus pertenencias. Después de pasar el inconveniente, los asistentes a la gira pasaron bajo la estructura del puente internacional, ahí junto al río Bravo, a disfrutar de un buen asado.
Gancho al hígado
La condición de la paridad cambiaria sigue afectando de forma importante a las empresas transportistas y logísticas que operan en el comercio exterior y que están muy expuestas en dólares. Otro tema importante es la recesión que ya se empieza a sentir en la economía de la Unión Americana, por lo que varios con operaciones binacionales ya padecen una “tormenta perfecta”.
De acuerdo con empresarios mexicanos que ya tienen operaciones en los Estados Unidos, el consumo se ha visto disminuido desde febrero, pero se recrudeció a partir de abril, y en consecuencia los negocios están sufriendo al grado de hacer recortes de personal para ajustar los presupuestos y hacer frente a los compromisos. Esta condición es como recibir un gancho al hígado, de esos que da Saúl Álvarez “El Canelo”.
Lo malo es que la previsión no es buena para lo que resta del año, pues un horizonte halagüeño se ve llegar hasta octubre.
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