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Gabriel Delgado, recién elegido presidente de Camin y propietario del astillero Marecsa, comentó a T21 que se planteará una serie de modificaciones legislativas que se requieren para impulsar la industria, “al mismo tiempo estamos trabajando en saber quiénes somos en toda la industria, cuántos somos, integrarnos y captar a todo ese universo de más de 500 empresas que existen”.
Si no capitalizamos esa necesidad de Pemex en un proyecto de largo plazo, entonces estaríamos mal nosotros como astilleros. Mucha de la culpa la hemos tenido nosotros como industria, porque estábamos muy dispersos.
Afirmó que sería lamentable que Pemex decidiera construir los más de 20 remolcadores requeridos, y que diez se armaran en el extranjero y solo la otra mitad en México, cuando los astilleros nacionales tienen la capacidad de construir la totalidad de esas embarcaciones.
“Necesitamos hacer labor con Pemex y levantar la mano para decir que podemos hacerlos: aquí estoy, yo quiero y yo puedo”.
Gabriel Delgado confirmó que en México hay la capacidad para construir la flota menor que requiere Pemex y otras entidades, por lo que consideró que las 25 embarcaciones que requiere la paraestatal en una primera fase, se pueden quedar en nuestro país.
El presidente de Camin precisó que de inmediato se fijarán los planes de trabajo para buscar cuanto antes una reunión, ya como organización del sector, con el director de Pemex, Juan José Suárez Coppel.