Sin que destaque una magna obra por su nivel de importancia en transporte y logística, el programa considera la inversión de unos 100 mil millones de dólares, cifra que estará destinada a infraestructura y telecomunicaciones.
Aún sin que se dé a conocer el Plan Nacional de Infraestructura, se adelantaron algunas de las inversiones más importantes en materia de infraestructura que contempla el gobierno federal para este sexenio, entre las cuales destaca el tren México-Querétaro, que según el subsecretario de Transporte Carlos Almada, tendrá una inversión de 45 mil millones de pesos y un plan carretero que involucra una inversión de 386 mil millones de pesos y siete mil kilómetros adicionales de carreteras.
El tren México- Querétaro, por costo e impacto político, es la obra más importante, pero no fundamental en la operatividad del sistema de transporte y logística, pues actualmente hay una vasta infraestructura de transporte foráneo que atiende esta ruta, e incluso, aerolíneas como Aeromexico ya realizan vuelos entre estas ciudades. Más aún, la obra, según han dicho las autoridades, se encuentra en análisis de llevarse a cabo aprovechando la infraestructura actual del tren de carga.
El esperado aeropuerto alterno al de la ciudad de México, que incluso el mismo gobierno federal dio a conocer hace unos meses se encuentra al borde de la saturación, sigue en estudio. El mismo Almada dijo en la citada conferencia de prensa que “hacia fin de año tendremos mayor claridad sobre las opciones que resulten más viables y más convenientes para el país”.
Lo que causa incertidumbre en torno al tema es la falta de claridad de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, a cargo de Gerardo Ruiz Esparza, porque ni siquiera quiere a dar a conocer a la empresa o empresas encargadas de realizar dicho estudios, sobre todo cuando las opciones para un nuevo aeropuerto están sobre diagnosticadas. Ya se tienen estudios de MITRE, organización estadounidense experta en temas aeroportuarios, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) ya ha dado a conocer montos, lugar y requerimientos para la construcción de la obra, la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero) también se refirió a los niveles de saturación y también coincide con los anteriores organismos en que Texcoco es la mejor opción.
El asunto ahí es el tema político, el no querer calentar las aguas, para evitar desde ahora que saquen los machetes los habitantes de San Salvador Atenco, tal como lo hicieron cuando dio el anuncio Vicente Fox.
Por lo demás, cifras y más cifras: 386 mil millones de pesos para carreteras del país, entre las que destacan como las de mayor inversión la Atizapán-Atlacomulco, de 80 kilómetros y una inversión de siete mil millones de pesos y el proyecto de la carretera Tuxpan-Tampico, en Veracruz, que será de 159 kilómetros de longitud y una inversión estimada de seis mil 300 millones de pesos.
Según Raúl Murrieta Cummings, ahora sí en este año quedará completa la autopista Mazatlán-Durango y jura que se inaugurará el 17 de octubre, por ser día del Caminero. Aunque según algunas fuentes consultadas los túneles están a un 65% en avance de obra, falta pavimentación, iluminación y albañilería, entre otras, además de que el puente El Carrizo se encuentra a un 70% en su construcción, por lo cual se observa muy difícil cumplir con los tiempos, sin incrementar los costos de operación, esto es, solamente si se contrata un tercer turno.
En otra partida se contemplan 39 proyectos que tendrán una inversión aproximada de 191 mil millones de pesos, entre los que se encuentran 12 ferroviarios, de los cuales tres son de ferrocarriles de pasajeros. Seis proyectos de transporte urbano masivo y 19 proyectos de aeropuertos, que incluyen principalmente ampliaciones o modernizaciones y la conclusión de los aeropuertos de Creel, Chihuahua y de Palenque, Chiapas.
Por cierto, el tema de Mexicana sigue en el aire, sin respuesta por el gobierno federal sobre su futuro.
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