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Desde el viernes pasado y hasta ayer por la noche, las 154 empresas que prestan el servicio a Pemex Refinación tomaron la decisión de no prestar los servicios, derivado de que no se ajustaba la tarifa, entre otros elementos a los que se había comprometido la paraestatal.
Los elementos que permitieron que se movilizaran los equipos, es que además del incremento en referencia, Pemex Refinación acordó la firma de un contrato de tres años con opción a dos años; a ello se suma la actualización cada cuatro meses de la tarifa, con base en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).
En realidad sólo se está dando cumplimiento a lo que se comprometió Pemex desde diciembre, y que no se había dado, lo cual había afectado las finanzas de las empresas transportistas”, comentó Muñoz López.
Otros de los factores que se encontraban dentro de las peticiones de los transportistas, era el ajuste del factor de incertidumbre, esto es, del 0.2 al 0.5. Este elemento es la fórmula por lo cual las mermas que existen entre el momento de carga y la descarga, situación que se genera por las condiciones del ambiente, y que aun así eran cobradas al prestador del servicio.
También se analizarán las ventanas de carga y descarga, así como aplicar un costo por el traslado de vacío. En este último punto, los transportistas habían denunciado que en ocasiones los citan a cargar en una terminal, y cuando ya están en estas instalaciones, les asignan un nuevo destino, que hasta ayer no generaba ningún pago.
Desde ayer por la noche, los cuatro mil equipos de las 154 empresas transportistas se reactivaron para atender las necesidades de transporte de Pemex Refinación. Se estima que del millón y medio de barriles diarios de gasolinas que genera la paraestatal, de ellos, 240 mil se distribuyen vía las empresas de autotransporte.