En esta ocasión una revolvedora de cemento se impactó contra dos autobuses y varios autos dejando 15 personas lesionadas, algunas de gravedad y cuantiosos daños materiales. En las noticias se lee: revolvedora se quedó sin frenos en la autopista…
Para quienes buscamos proponer acciones que redunden en una significativa reducción del número de accidentes viales que suceden en nuestro país y sus consecuencias, el contar con un video que muestra lo ocurrido es vital.
Por el lugar del accidente muchos pudimos ver poco tiempo después del suceso cómo el camión revolvedora transitaba antes del impacto por el carril izquierdo, rebasa a un autobús, y ante el tránsito detenido adelante antes de la Puerta Santa Fe, el conductor decide cambiar la dirección y dirigirse hacia la lateral; en su camino se encuentra con la parte trasera de otro autobús, impactándose con él y con las barreras de protección que están colocadas en esa salida.
En toda esa maniobra se observan las luces de freno encendidas, lo cual me da a entender que el conductor buscaba reducir la velocidad, mas ante un impacto inminente decide por dirigirse hacia donde las consecuencias serían menores.
Identifico tres causas para que un camión se quede sin frenos en un trayecto de bajada continua:
Balatas desgastadas más allá de lo recomendable por el fabricante o por la NOM-068, tambores con desgaste más allá del diámetro máximo permitido, con algo típico como resultado de un mal mantenimiento. Instalación de componentes de bajas especificaciones, resultado de una adquisición con el enfoque de “ahorrarse unos centavos” puede resultar en grandes gastos.
Un análisis a fondo de lo que quedó de los componentes mecánicos y de los sistemas neumáticos y auxiliares de frenado del camión, así como los datos almacenados en el sistema de control electrónico de su motor y, en caso de tenerlo, de los datos de su sistema de telemetría brindarán datos que permitirán tener una conclusión respecto de las causas del accidente y sus potenciales soluciones.
Ahora bien, en ese punto carretero los hechos de tránsito son muy frecuentes, principalmente en las horas pico, cuando miles de personas se trasladan de Santa Fe al Valle de México y por tanto la velocidad de tránsito en esa zona es muy baja y la acumulación de vehículos casi detenidos invade la zona de la autopista. Muchos accidentes son sin consecuencia de personas lesionadas, otros muchos son lamineros, mas no es extraño que se tengan accidentes con vehículos pesados y ya ha habido varios casos con consecuencias funestas.
Los accidentes continuarán en tanto las condiciones de la autopista no cambien. La posibilidad de fallas en otro vehículo pesado persistirá y en tanto la vía no sea segura el hecho de tránsito existirá. En más de una ocasión hemos hecho pública nuestra postura de que esa autopista, por su pendiente continua y por su tramo final llegando a un tramo con frecuente congestión de tránsito a la entrada de la ciudad, requiere de una RAMPA DE FRENADO unos cientos de metros antes de la salida donde ocurrió el percance, con señales que indiquen a los conductores la necesidad de verificar el funcionamiento de los frenos de sus vehículos y las señales de rampa de emergencia.
No veo la razón para que autoridades y concesionario de la autopista se sigan negando a la construcción de la RAMPA de FRENADO. Podría decir que el costo de los dos últimos grandes accidentes, el del pasado martes 8 de octubre y el del 7 de noviembre de 2018, pudiera superar el costo de construir esa rampa. Apelo a la cordura para que de una vez por todas se resuelva el riesgo de esa autopista.
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