![](https://t21.com.mx/wp-content/uploads/2023/08/caseta2021.jpg)
La meta 3.6 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) busca que para el año 2030 los decesos y lesiones graves por causa del tránsito se reduzcan al menos a la mitad, de ahí la expresión “HALF BY 30” que anunciamos durante el Foro Internacional del Transporte en Leipzig el 25 de mayo de 2018.
La meta 3.6 ha sido incluida dentro de los objetivos del proyecto de la Estrategia Nacional de Movilidad y Seguridad Vial (Enamov), con lo que se reafirma el gran objetivo que dio origen a la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial, no más muertes viales.
Durante el tercer foro de construcción del proyecto de Enamov se presentó una propuesta de indicadores que debieran ser incluidos en la estrategia, siendo uno de ellos el de la reducción de fallecimientos por causa de siniestros de tránsito en al menos 50 por ciento.
Este objetivo parece muy simple de medir, sin embargo, me queda la pregunta 50% de qué. Lo pregunto pues hoy día hay al menos tres series de datos de inseguridad vial que son reconocidas oficialmente, la base de datos de mortalidad general de Inegi (Instituto Nacional de Geografía y Estadística) en su serie de fallecimientos por causa del transporte, excluyendo el transporte aéreo, ferroviario, en animal, la base de datos de seguridad vial en vías urbanas y suburbanas y el anuario estadístico de seguridad vial del IMT.
A las tres fuentes antes referidas le agregamos una serie estadística a partir del procedimiento que seguía Conapra (Secretariado Técnico del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes) para determinar que en México fallecían alrededor de 24 mil personas cada año, cifra que utilizó ampliamente durante el lanzamiento del decenio de seguridad vial 2011 a 2020; este procedimiento ya no lo utiliza para sus reportes anuales, sino que sus cifras principales son tomadas de la mencionada base de datos de mortalidad general de Inegi. A continuación, se muestran las gráficas que resultan de las cifras de fallecimientos por causa de inseguridad vial que incluyen cada una de esas bases de datos:
A reserva de que cada serie de datos requiere de un análisis mucho más profundo, vale la pena mencionar cómo comparan en cada uno de los casos las cifras de 2011 con las de 2020, para darnos una idea del resultado que han tenido las acciones que las diferentes autoridades gubernamentales y de diversas ONG han tenido:
Observamos que en uno de los indicadores se logró superar la meta del decenio al lograr una reducción del 52% de los fallecimientos y en la forma de cálculo inicial de Conapra se logró estar muy cerca de la meta, -48% fue el registro logrado. Por otro lado, la estadística de mortalidad general nos indica que quedamos lejos de la meta con tan solo una reducción de 18.5% en términos absolutos, sin embargo, utilizando el índice respecto al total de la población, nos indica que nos quedamos a la mitad del camino con una reducción del 25 por ciento.
El año 2020 fue un año atípico por lo que sus cifras debieran ser tomadas con cautela. Somos de la opinión que esas cifras debieran ser ajustadas para la medición del logro así como para las proyecciones y establecimiento de objetivo rumbo al 2030, por lo que si se interpola la cifra de fallecimientos entre 2019 y 2021 para tener la cifra ajustada de 2020 de 15 mil 83 fallecimientos, por lo que la reducción que deberíamos tomar de base es del 12.1% de reducción de fatalidades entre 2011 y el ajustado 2020 y un índice de 120 fallecimientos / millón de habitantes, es decir una reducción de 19 por ciento.
La tendencia indica que si se siguen haciendo las cosas como hasta ahora, podemos esperar que para el año 2030 fallezcan en el país 12.1% menos personas que el 2021, es decir, que si en 2021 se reportan 15 mil 72 fallecimientos por causas de transporte terrestre en la base de datos de mortalidad general de Inegi, para 2030 se reportarían 13 mil 248 fallecidos.
Tomando en cuenta que la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial brinda nuevas facultades a las autoridades responsables de la seguridad vial, y que la Enamov está creada para lograr el objetivo de la ley, somos de la opinión que la cifra que debiera quedar plasmada en la estrategia es que para el cierre del año 2030 no debieran fallecer por causa de siniestro vial más de seis mil 624 personas, que es la mitad del número esperado para 2030 de acuerdo con la tendencia que hasta hoy existe con las acciones implementadas antes de la existencia de la Ley y la Enamov.
Con base en lo anterior planteamos a los integrantes del Sistema Nacional de Movilidad y Seguridad Vial a que establezcan un objetivo con cifras de fallecimientos mínimos a lograr para el año 2030, de tal forma que no sea subjetiva la interpretación de cumplimiento.
Puedes consultar la anterior colaboración de Salvador Saavedra: La Conamer, una burocracia de adorno
Salvador Saavedra es presidente de Tecnología para el Transporte SALS y socio director técnico de Entorno Industrial.
Comenta y conecta con Salvador Saavedra en Linkedin y en Twitter: @salvsaavedra
Comenta y síguenos en Twitter: @GrupoT21