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Durante el primer cuatrimestre del 2023 fueron reportados tres mil 110 robos a transportistas, por fuero común, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), lo que representó un 8.9% más en comparación con el mismo periodo de 2022 cuando se suscitaron dos mil 854 delitos.
En opinión de Alejandro García Medina, director de producto AIS de la empresa AI27, el robo al autotransporte de carga es un problema endémico. “Esto siempre ha acompañado a la economía en México, sin embargo, con la llegada del nearshoring vamos a tener un incremento del volumen de la carga en el país y con ello se multiplicará la incidencia de casos. Lo que va en detrimento de nuestra capacidad como país de aprovechar la relocalización de las empresas y el crecimiento económico que supone esta oportunidad”, detalló García Medina.
Las cifras antes referidas develan que el problema de la inseguridad para el autotransporte de carga lejos de reducirse va en aumento, por ello muchas empresas han asumido que la tecnología, la inteligencia y la previsión son las herramientas que coadyuvarán a hacer frente a los crecientes índices de delincuencia en el autotransporte.
“Para recuperar las unidades lo importante es el trabajo de inteligencia”, aseguró el director de producto AIS.
Hoy existen herramientas que van más allá de un rastreo GPS para proteger las cargas y a los operadores, la tecnología ha logrado programar rutas con base en el riesgo de cada viaje y recomendaciones de itinerarios alternos, además de definir días y horarios para salir a la carretera, a este primer paso el director de producto AIS lo denominó prevención.
En un segundo lugar está el monitoreo, que AIS ha evolucionado con la ayuda de gemelos digitales, “el sistema va monitoreando las cargas no solamente con seres humanos expertos, sino con un gemelo digital al que llamamos Sofía, que se encarga de actualizar el modelo de riesgo, es decir, sabe qué tan riesgoso es cada viaje en cada minuto”, indicó García Medina.
Lo anterior ayuda a generar actualizaciones segundo a segundo y tener comunicación continua con los operadores para alertarlos de posibles riesgos en la ruta.
Finalmente, está la reacción, una vez que el gemelo digital de AIS detecta un incidente que no se logró prevenir, se activan las alertas y se pone en marcha el protocolo para la recuperación de las cargas con apoyo de las autoridades pertinentes.
Pero además de la tecnología el tiempo es crucial, “para un evento en una carretera los tiempos de reacción oscilan entre 20 y 30 minutos, en el caso de la ciudad la reacción debe ser más rápida, entre 10 a 15 minutos debido a que en la urbe es más fácil ocultar la mercancía”, compartió.
A la fecha AI27 monitorea más de tres mil viajes al día y ofrece una tasa de recuperación de las mercancías superior al 90% a las más de 250 empresas con las que colabora.