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Al cierre del 2014 la flota del autotransporte de carga constaba de 728 mil 362 vehículos, de los cuales, 381 mil 250 corresponden a unidades motrices y 347 mil 112 son vehículos de arrastre.
En el caso la flota bajo la figura de arrendamiento, con base en los datos de la SCT se identifica que existen 34 mil 947 vehículos. De este volumen 10 mil 045 son unidades motrices, es decir, 2.6% de la flota registrada ante la dependencia, en tanto, que los semirremolques y remolques suman 24 mil 902 unidades que corresponden al 7.1% del registro.
En la perspectiva de Juan Pablo Loperena, Director General de TIP México, los esquemas como el arrendamiento puro cada son más empleados por las empresas, sobre todo en el caso de aquellas que aprovechan los esquemas fiscales, y que desde 2014 tienen la ventaja de hacer deducible los pagos por arrendamiento, a diferencia de la depreciación de las unidades en un plazo de cuatro años.
En otros mercados, los esquemas de arrendamiento como el leasing son un mecanismos de financiamiento y modernización de la flota, como en el caso de Swift Transportation, que del total de su flota cerca del 50% se encuentran bajo arrendamiento puro. Al primer trimestre del 2015, la flota de Swift fue de 19 mil 535 tractocamiones y casi 70 mil equipo de arrastre.
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