A más de un mes del lamentable accidente en el que perdieron la vida cinco alumnos y un profesor de la máxima casa de estudios del país, y sin que se tenga el resultado del peritajefinal por parte de las autoridades competentes, el Comité de Seguridad Vial de la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP), mostró a T21 un análisis en el que se determinó que el vehículo de carga no fue sujeto de revisión físico – mecánica, y entre los mas importante destaca que el dolly no cumplía con las especificaciones de un fabricante legalmente establecido de estos equipos.
“De entrada podemos decir que ese vehículo no cumplía con las normas físico mecánicas y como no es un vehículo diferenciado la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) no le aplicó la normatividad”, dijo Leonardo Gómez, director general de la ANTP.
Sin poder afirmar que esto fue motivo del accidente, la información dejo ver que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), no tiene la manera verificar las condiciones físico-mecánicas de lo dollys que circulan en el país, pues según reveló Salvador Saavedra, vicepresidente del Sector de la Industria Automotriz de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), impulsor de la NOM 035 que regula los remolques, “la SCT se niega a darles placas a los dollys, por lo que no tiene que pasar por esa dependencia para ser verificados, solo lo hace en el caso de los remolques”, dijo.
En la NOM 035, que se emitió a finales del 2010, se menciona en el apartado 5.1.1.11 que la capacidad de arrastre del convertidor, y la resistencia a la ruptura de las cadenas de seguridad se verifican mediante la constancia emitida por el fabricante o importador. “Al emitirse la norma en el 2010, no había y no hay una autoridad que cuente con un laboratorio para emitir un dictamen sobre estos equipos, por lo que se decidió en el caso de los dollys, que el fabricante realice las pruebas y en caso de revisión, la SCT verifique mediante la constancia emitida por el fabricante o importador”, señaló Saavedra.
Coincide con la ANTP en que tan solo al ver la imagen del accidente en Toluca se aprecia el Dolly fue armado de los bastidores de camión, pues se observa “calabazo” en los ejes y un hueco, de donde se desprendió la lanza. No puedo afirmar que fue la causa del accidente, pero si que el vehículo no cumplía con las regulaciones”, puntualizó.
Miguel Elizalde, director general del autotransporte federal, dependencia de la SCT, reconoció la carencia de un padrón sobre dollys en circulación, “los dollys no se emplacan, sin embargo, sí se revisan sus condiciones físico-mecánicas, esa es un área de oportunidad para la norma, tal vez sea bueno emplacar los dollys”, dijo.
“La autoridad tuvo que aplicar la NOM 086 a todos los camiones para conocer las condiciones físico-mecánicas y no eliminar un artículo transitorio que vencía en julio del 2013”, puntualizó Leonardo Gómez.
A más de un mes del lamentable accidente en el que perdieron la vida cinco alumnos y un profesor de la máxima casa de estudios del país, y sin que se tenga el resultado del peritajefinal por parte de las autoridades competentes, el Comité de Seguridad Vial de la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP), mostró a T21 un análisis en el que se determinó que el vehículo de carga no fue sujeto de revisión físico – mecánica, y entre los mas importante destaca que el dolly no cumplía con las especificaciones de un fabricante legalmente establecido de estos equipos.
“De entrada podemos decir que ese vehículo no cumplía con las normas físico mecánicas y como no es un vehículo diferenciado la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) no le aplicó la normatividad”, dijo Leonardo Gómez, director general de la ANTP.
Sin poder afirmar que esto fue motivo del accidente, la información dejo ver que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), no tiene la manera verificar las condiciones físico-mecánicas de lo dollys que circulan en el país, pues según reveló Salvador Saavedra, vicepresidente del Sector de la Industria Automotriz de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), impulsor de la NOM 035 que regula los remolques, “la SCT se niega a darles placas a los dollys, por lo que no tiene que pasar por esa dependencia para ser verificados, solo lo hace en el caso de los remolques”, dijo.
En la NOM 035, que se emitió a finales del 2010, se menciona en el apartado 5.1.1.11 que la capacidad de arrastre del convertidor, y la resistencia a la ruptura de las cadenas de seguridad se verifican mediante la constancia emitida por el fabricante o importador. “Al emitirse la norma en el 2010, no había y no hay una autoridad que cuente con un laboratorio para emitir un dictamen sobre estos equipos, por lo que se decidió en el caso de los dollys, que el fabricante realice las pruebas y en caso de revisión, la SCT verifique mediante la constancia emitida por el fabricante o importador”, señaló Saavedra.
Coincide con la ANTP en que tan solo al ver la imagen del accidente en Toluca se aprecia el Dolly fue armado de los bastidores de camión, pues se observa “calabazo” en los ejes y un hueco, de donde se desprendió la lanza. No puedo afirmar que fue la causa del accidente, pero si que el vehículo no cumplía con las regulaciones”, puntualizó.
Miguel Elizalde, director general del autotransporte federal, dependencia de la SCT, reconoció la carencia de un padrón sobre dollys en circulación, “los dollys no se emplacan, sin embargo, sí se revisan sus condiciones físico-mecánicas, esa es un área de oportunidad para la norma, tal vez sea bueno emplacar los dollys”, dijo.
“La autoridad tuvo que aplicar la NOM 086 a todos los camiones para conocer las condiciones físico-mecánicas y no eliminar un artículo transitorio que vencía en julio del 2013”, puntualizó Leonardo Gómez.