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Si de algo no queda la menor duda, es que los colaboradores son y seguirán siendo el activo más valioso de una empresa. Tan es así, que el 48% de los altos directivos indica que uno de sus riesgos más apremiantes para el 2023 es atraer nuevo talento y conservar a los que ya tienen (KPMG).
Ante esta situación, las empresas deben esforzarse a diario en construir un entorno de trabajo que tenga un efecto positivo en todos los niveles del organigrama, pero especialmente en el de los gerentes de primera línea. Esto se debe a que no siempre se dimensiona su importancia a pesar de que esta porción de la fuerza laboral representa alrededor del 60% de la dirección de una empresa, pero puede llegar a supervisar directamente hasta el 80% de la plantilla (HBR).
Adicionalmente, el rol de los gerentes va mucho más allá que el de dar instrucciones a la fuerza operativa y supervisar el cumplimiento de las metas, igualmente tienen que estar atentos a las necesidades laborales y personales de sus compañeros, empatizando con sus preocupaciones, lo que puede llegar a ser muy desgastante. Es por eso que las empresas deben de tener especial atención a las necesidades laborales y personales ya que se puede considerar que son la columna vertebral de la empresa.
Teniendo esto en mente, los líderes deben de empezar por reflexionar en algunas estrategias para mejorar la experiencia laboral y el bienestar emocional de los gerentes y que puedan ejercer sus tareas de manera más eficiente, ayudar a las personas a su cargo a tener un mejor desempeño y finalmente a que estén más comprometidos con la empresa.
Para lograr esto, las empresas pueden eliminar las tareas desgastantes y rutinarias al apoyarse de las soluciones tecnológicas actuales que permiten realizar la programación de turnos de manera más eficiente para dar mayor visibilidad a los colaboradores sobre sus horarios y tiempos de descanso, además de poder intercambiar turnos o solicitar tiempo libre para un mejor balance de trabajo y vida.
Con esta innovación, la calidad de la experiencia laboral de los gerentes se incrementa considerablemente para que puedan enfocar su tiempo en inspirar a sus compañeros a la vez que mejoran en general la cultura laboral de la empresa.
Adicionalmente, esta tecnología es de gran utilidad para obtener y procesar datos fiables de la fuerza laboral para medir la productividad, detectar tendencias, o bien estar alertas a diferentes situaciones, como fugas de talento o ausentismo. Al tener estos analíticos antes de que los problemas se manifiesten, los mismos gerentes de primera línea pueden prepararse y adelantarse, reduciendo los niveles de estrés que las emergencias les llegan a ocasionar. Pero no solo eso, estas soluciones ayudan a identificar tanto deseos como aspiraciones u oportunidades de desarrollo de las personas, lo que permite crear planes de crecimiento personalizados que los motiven y les ayuden a sentirse escuchados y apreciados.
Estas mejoras para el día a día son muy efectivas para mejorar a corto plazo la experiencia laboral de los gerentes de primera línea, mas no deben de ser las únicas, ya que el verdadero reto es conservarlos a largo plazo. Una de las mejores formas de conseguirlo es invertir directamente en el desarrollo de nuevas habilidades laborales para que puedan seguir creciendo dentro de la empresa y tener cada vez más impacto en las estrategias generales de la empresa. Para esto, se pueden crear programas de formación adaptables a sus necesidades y ofrecerles acceso a recursos de apoyo para que el aprendizaje sea lo más eficiente posible y que vayan repercutiendo en la cultura general durablemente.
No hay que olvidar que los colaboradores son el activo más importante para la empresa tal y como lo dijo el empresario Richard Branson: “Los clientes no son lo primero, lo primero son los empleados. Si cuidas de tus empleados, ellos cuidarán de tus clientes”. Es por eso que los líderes de las empresas deben de empoderar a sus gerentes de primera línea para que no solo realicen su trabajo de la mejor manera, sino también para retenerlos y atraer a otros. Esta será la clave para poder prosperar ante el panorama actual y prosperar a futuro.
Con más de 32 años de experiencia en la industria de Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), Jaime Cardoso es ingeniero en Cibernética por la Universidad La Salle, con maestría en Administración por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y diplomado en Alta Dirección Comercial por la Asociación Internacional Virtual Educa (ASIVE). Tiene más de 10 años como director de Mercadotecnia para Latinoamérica en UKG, proveedor líder de soluciones de RRHH, nóminas y gestión de personal para todas las personas.
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