PANAMÁ, Panamá.- La ampliación del Canal de Panamá requerirá emplear a 8 mil trabajadores durante los cinco años que durarán las obras de construcción que buscan permitir el tránsito de buques más grandes y con mayor carga.
"En la parte directa de la construcción se necesitarán unas 8 mil personas, pero hay otros trabajos alrededor de las obras", dijo el administrador de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), Alberto Alemán Zubieta, al adelantar detalles del proyecto de modernización.
El funcionario anticipó que la expansión de la vía interoceánica demorará siete años -incluidos los cinco años de construcción- si los panameños aprueban en un referendo el ambicioso plan que la ACP pretende presentar al país a más tardar en marzo próximo.
Confirmó que la empresa estatal afina los últimos estudios del proyecto para entregarlo al presidente Martín Torrijos y luego enviarlo a la Asamblea Nacional que convocará a la consulta popular donde la población ratificará o rechazará la iniciativa.
Una encuesta arrojó en diciembre pasado que el 57.9% de los panameños votaría en favor de la modernización de la vía que mueve el 4% del comercio mundial, mientras un 19.3% lo rechazaría y un 22.8% se declaró indeciso.
Según Alemán Zubieta, las obras más grandes implicarán la construcción de una nueva esclusa (elevador de barco), eje central del proyecto para permitir el tránsito de embarcaciones superiores a las actuales dimensiones de la zanja de 80 kilómetros de extensión.
Las tres esclusas en operación desde la apertura de la vía en 1914 limitan los barcos a un tamaño máximo de 32.3 metros de ancho y 294.1 de largo, mientras la tendencia de la industria naviera camina hacia buques con mayores capacidades.
El ejecutivo estimó que la construcción de las nuevas esclusas iniciarían entre 18 meses y dos años después de la eventual aprobación del referendo, aunque antes la ACP comenzaría otros trabajos de preparación como movimientos de tierras.
Adelantó que el primer paso luego de la ratificación del proyecto sería el inicio de cursos y entrenamientos a nivel nacional para capacitar a los trabajadores en las faenas que requerirá la ampliación.
Los cursos incluirían áreas como soldadura, dragados, perforaciones y voladuras de tierra, entre otros empleos técnicos relacionados con la operación de la ruta interoceánica.
"En Panamá tenemos la gente y la capacidad para enfrentar estas obras, no creo que faltará mano de obra local calificada porque reforzaremos aquella que se ha identificado que tenemos que reforzar para que no exista excusar de traer gente de afuera", dijo la fuente.
Alemán Zubieta precisó que los 8 mil puestos requeridos para la ampliación serán adicionales a las 10 mil personas que laboran en la ACP, entidad autónoma que asumió la administración del Canal en 1999 cuando Estados Unidos traspasó su control a Panamá.
Uno de los componentes por definir del proyecto de expansión es el costo y forma de financiamiento de la obra que estudios preliminares han ubicado hasta en 8 mil millones de dólares.
Después de 91 años de operación, el Canal enfrenta la necesidad de aumentar su tamaño ante la creciente demanda de la industria marítima que tiene a la ruta funcionando casi al 90% de su capacidad y con proyecciones de coparla en 2012.
La ACP ha estimado que presentará un proyecto definitivo al país durante el primer trimestre de este año después de más de 140 estudios durante cinco años a un costo de 42 millones de dólares para analizar las alternativas y viabilidad de la obra.
Una organización integrada por grupos nacionalistas rechazó este miércoles el plan de ampliación del Canal al advertir que el proyecto será poco rentable para el país por su escaso impacto sobre la economía y la generación de empleos.
Según el Frente Panamá Soberana, la expansión de la ruta comprometerá los actuales aportes del Canal a las arcas estatales que el año pasado sumaron 483.9 millones de dólares.
La vía figura como la principal fuente de divisas del país con ingresos en el año fiscal 2004-2005 por mil 209 millones de dólares.