Solamente se logró saber, de manera extraoficial, que este lunes, alrededor del mediodía, habrá una nueva ronda de pláticas o negociaciones entre las partes en conflicto, aunque no se precisó si se habrán de sentar frente a frente, teniendo como mediadores o interlocutores a funcionarios de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, o lo harán como en anteriores ocasiones, reunirse por separado, para cada quien plantear sus condiciones para levantar la huelga.
En información aparecida en Internet, está una entrevista que el diario Reforma le hizo al líder nacional minero Napoleón Gómez Urrutia, en donde claramente señala que la huelga en la Siderúrgica Lázaro Cárdenas Las Truchas (Sicartsa) no se levanta si no se cumplen los siete puntos a revisar del contrato colectivo de trabajo, incluyendo el nuevo estudio para determinar las condiciones legales de la planta de Apodaca, en Nuevo León, esto último no es negociable, aseguró Napoleón Gómez Urrutia, líder del gremio minero.
“La demanda del sindicato es clara: cumplimiento de los siete puntos del contrato colectivo y el nuevo estudio que determina la situación de la planta de Apodaca, Nuevo León; de no ser así, no se levanta la huelga. Aquí sabemos cuándo empezamos el paro, pero no sabemos cuándo lo acabaremos”, sentenció en esa entrevista Gómez Urrutia.
El líder minero ratificó que el tema de la planta de Apodaca, en Nuevo León, no es negociable y calificó de parcial el estudio en el que se basa la empresa para asegurar que no es materia de contrato colectivo de trabajo, pues en ese análisis no participó el gremio.
Por otro lado, Sicartsa sigue manteniendo su propuesta o paquete de incremento salarial y en prestaciones, cláusulas y bonos económicos que representan 4.2%; un aumento salarial directo de 6%, retroactivo al 1 de mayo de este año; ayuda social por única vez, por 6,500 pesos para cada sindicalista, equivalente a 9% y un bono por única vez a cada trabajador correspondiente a 2% del salario tabulado elevado al año.
Así, este lunes la huelga en Sicartsa llega a sus 29 días de estallada, en donde según lo afirmó desde un principio la empresa, está dejando de producir 5,000 toneladas de acero, que traducidas en pérdidas económicas, alcanzan ya los US $87 millones.