El Código PBIP se implantó como respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, entrando en vigor el 1 de julio de 2004 con el propósito de proporcionar seguridad a los barcos de las instalaciones portuarias; no obstante, las medidas aplicadas para este fin han sido cuestionadas por los principales grupos de usuarios de las instalaciones portuarias por derivar en sobrecostos por contenedor, de aproximadamente US $10.
De igual forma, grupos empresariales, importadores y exportadores, han solicitado al gobierno federal la desaparición de este sobrecargo, ante la negativa de las autoridades marítimas y portuarias que argumentan es para recuperar la inversión por la implantación de dicho código.
Por parte de las embarcaciones mexicanas también ha sido motivo de polémica, ya que se pide incluso a aquellas que no realizan tráfico de altura, sino sólo de cabotaje en los puertos de México. Así, ante la necesidad de mayor seguridad en los puertos y buques, los navieros, la gente de mar y el gobierno compartirán objetivos comunes dándose a la tarea de instrumentar cabalmente el Código PBIP.
El Código PBIP se implantó como respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, entrando en vigor el 1 de julio de 2004 con el propósito de proporcionar seguridad a los barcos de las instalaciones portuarias; no obstante, las medidas aplicadas para este fin han sido cuestionadas por los principales grupos de usuarios de las instalaciones portuarias por derivar en sobrecostos por contenedor, de aproximadamente US $10.
De igual forma, grupos empresariales, importadores y exportadores, han solicitado al gobierno federal la desaparición de este sobrecargo, ante la negativa de las autoridades marítimas y portuarias que argumentan es para recuperar la inversión por la implantación de dicho código.
Por parte de las embarcaciones mexicanas también ha sido motivo de polémica, ya que se pide incluso a aquellas que no realizan tráfico de altura, sino sólo de cabotaje en los puertos de México. Así, ante la necesidad de mayor seguridad en los puertos y buques, los navieros, la gente de mar y el gobierno compartirán objetivos comunes dándose a la tarea de instrumentar cabalmente el Código PBIP.
El Código PBIP se implantó como respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, entrando en vigor el 1 de julio de 2004 con el propósito de proporcionar seguridad a los barcos de las instalaciones portuarias; no obstante, las medidas aplicadas para este fin han sido cuestionadas por los principales grupos de usuarios de las instalaciones portuarias por derivar en sobrecostos por contenedor, de aproximadamente US $10.
De igual forma, grupos empresariales, importadores y exportadores, han solicitado al gobierno federal la desaparición de este sobrecargo, ante la negativa de las autoridades marítimas y portuarias que argumentan es para recuperar la inversión por la implantación de dicho código.
Por parte de las embarcaciones mexicanas también ha sido motivo de polémica, ya que se pide incluso a aquellas que no realizan tráfico de altura, sino sólo de cabotaje en los puertos de México. Así, ante la necesidad de mayor seguridad en los puertos y buques, los navieros, la gente de mar y el gobierno compartirán objetivos comunes dándose a la tarea de instrumentar cabalmente el Código PBIP.
El Código PBIP se implantó como respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, entrando en vigor el 1 de julio de 2004 con el propósito de proporcionar seguridad a los barcos de las instalaciones portuarias; no obstante, las medidas aplicadas para este fin han sido cuestionadas por los principales grupos de usuarios de las instalaciones portuarias por derivar en sobrecostos por contenedor, de aproximadamente US $10.
De igual forma, grupos empresariales, importadores y exportadores, han solicitado al gobierno federal la desaparición de este sobrecargo, ante la negativa de las autoridades marítimas y portuarias que argumentan es para recuperar la inversión por la implantación de dicho código.
Por parte de las embarcaciones mexicanas también ha sido motivo de polémica, ya que se pide incluso a aquellas que no realizan tráfico de altura, sino sólo de cabotaje en los puertos de México. Así, ante la necesidad de mayor seguridad en los puertos y buques, los navieros, la gente de mar y el gobierno compartirán objetivos comunes dándose a la tarea de instrumentar cabalmente el Código PBIP.
El Código PBIP se implantó como respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, entrando en vigor el 1 de julio de 2004 con el propósito de proporcionar seguridad a los barcos de las instalaciones portuarias; no obstante, las medidas aplicadas para este fin han sido cuestionadas por los principales grupos de usuarios de las instalaciones portuarias por derivar en sobrecostos por contenedor, de aproximadamente US $10.
De igual forma, grupos empresariales, importadores y exportadores, han solicitado al gobierno federal la desaparición de este sobrecargo, ante la negativa de las autoridades marítimas y portuarias que argumentan es para recuperar la inversión por la implantación de dicho código.
Por parte de las embarcaciones mexicanas también ha sido motivo de polémica, ya que se pide incluso a aquellas que no realizan tráfico de altura, sino sólo de cabotaje en los puertos de México. Así, ante la necesidad de mayor seguridad en los puertos y buques, los navieros, la gente de mar y el gobierno compartirán objetivos comunes dándose a la tarea de instrumentar cabalmente el Código PBIP.
El Código PBIP se implantó como respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, entrando en vigor el 1 de julio de 2004 con el propósito de proporcionar seguridad a los barcos de las instalaciones portuarias; no obstante, las medidas aplicadas para este fin han sido cuestionadas por los principales grupos de usuarios de las instalaciones portuarias por derivar en sobrecostos por contenedor, de aproximadamente US $10.
De igual forma, grupos empresariales, importadores y exportadores, han solicitado al gobierno federal la desaparición de este sobrecargo, ante la negativa de las autoridades marítimas y portuarias que argumentan es para recuperar la inversión por la implantación de dicho código.
Por parte de las embarcaciones mexicanas también ha sido motivo de polémica, ya que se pide incluso a aquellas que no realizan tráfico de altura, sino sólo de cabotaje en los puertos de México. Así, ante la necesidad de mayor seguridad en los puertos y buques, los navieros, la gente de mar y el gobierno compartirán objetivos comunes dándose a la tarea de instrumentar cabalmente el Código PBIP.
El Código PBIP se implantó como respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, entrando en vigor el 1 de julio de 2004 con el propósito de proporcionar seguridad a los barcos de las instalaciones portuarias; no obstante, las medidas aplicadas para este fin han sido cuestionadas por los principales grupos de usuarios de las instalaciones portuarias por derivar en sobrecostos por contenedor, de aproximadamente US $10.
De igual forma, grupos empresariales, importadores y exportadores, han solicitado al gobierno federal la desaparición de este sobrecargo, ante la negativa de las autoridades marítimas y portuarias que argumentan es para recuperar la inversión por la implantación de dicho código.
Por parte de las embarcaciones mexicanas también ha sido motivo de polémica, ya que se pide incluso a aquellas que no realizan tráfico de altura, sino sólo de cabotaje en los puertos de México. Así, ante la necesidad de mayor seguridad en los puertos y buques, los navieros, la gente de mar y el gobierno compartirán objetivos comunes dándose a la tarea de instrumentar cabalmente el Código PBIP.
El Código PBIP se implantó como respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, entrando en vigor el 1 de julio de 2004 con el propósito de proporcionar seguridad a los barcos de las instalaciones portuarias; no obstante, las medidas aplicadas para este fin han sido cuestionadas por los principales grupos de usuarios de las instalaciones portuarias por derivar en sobrecostos por contenedor, de aproximadamente US $10.
De igual forma, grupos empresariales, importadores y exportadores, han solicitado al gobierno federal la desaparición de este sobrecargo, ante la negativa de las autoridades marítimas y portuarias que argumentan es para recuperar la inversión por la implantación de dicho código.
Por parte de las embarcaciones mexicanas también ha sido motivo de polémica, ya que se pide incluso a aquellas que no realizan tráfico de altura, sino sólo de cabotaje en los puertos de México. Así, ante la necesidad de mayor seguridad en los puertos y buques, los navieros, la gente de mar y el gobierno compartirán objetivos comunes dándose a la tarea de instrumentar cabalmente el Código PBIP.