La entidad mantuvo la clasificación de las acciones en Primera Clase Nivel 2 e indicó que el Outlook de dichas clasificaciones es “Estable”.
Fitch indicó que “las clasificaciones otorgadas a CSAV se fundamentan en la consolidación que ha alcanzado la compañía dentro de la industria naviera mundial, en el nivel de optimización que ha logrado en su operación y en su holgada posición de liquidez junto a su política de endeudamiento conservadora”.
La clasificadora considera favorable el tamaño bursátil de la compañía, su elevada liquidez y el grado de dispersión de la propiedad, donde los controladores poseen cerca de 48% de las acciones. Asimismo, como elementos desfavorables y que restringen las clasificaciones, Fitch considera “la alta volatilidad que enfrentan las variables relevantes en esta industria y el relativamente estrecho margen operacional del sector en general”.
Las principales ventajes que ofrece CSAV son su consolidación en las rutas latinoamericanas y la adquisición de operaciones de tráficos desde y hacia Asia, a través de Norasia, lo que le ha permitido participar de la demanda por fletes de parte de China. Asimismo, su participación en el negocio logístico, donde destacan las adjudicaciones de concesiones de puertos.
En términos financieros, la empresa mantiene una deuda de US $323 millones, concentrada casi en su totalidad a largo plazo, mientras que el nivel de caja a marzo de 2005 llegó a US $661 millones.
Entre los peligros para CSAV está la volatilidad del mercado, “donde los fletes y los arriendos se ven constantemente presionados por la fuerte sensibilidad de la demanda por transporte de contenedores a la evolución de la actividad económica mundial y la lenta capacidad de reacción de la oferta ante los cambios en la demanda”.