Estos complejos suman un área bruta rentable (ABA) de 2.6 millones de pies cuadrados y tienen un valor por 87.4 millones de dólares (mdd).
“Se espera cerrar la transacción a mediados de 2018, sujeto al cumplimiento de condiciones ordinarias de cierre”, dijo la fibra a través de un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores.
La empresa destacó que esta venta marca un hito en su programa de reciclaje de activos, que al cierre de la misma habrá vendido 44 propiedades no estratégicas por un monto equivalente a 117 mdd.
“Esta transacción mejora la composición de nuestro portafolio en general, así como las métricas financieras fundamentales, y contribuye sustancialmente a alcanzar nuestros objetivos de corto plazo de reciclaje de activos”, dijo Juan Monroy, director general de FIBRA Macquarie, citado en el comunicado.
Agregó que esperan que los recursos del programa de reciclaje de activos, junto con el AFFO retenido, sean posteriormente utilizados para financiar inversiones generadoras de valor incluyendo expansiones de bienes inmuebles.
De hecho, esta transacción incrementa la capacidad total de inversión de Fibra Macquarie a aproximadamente 300 mdd, compuesta por el crédito revolvente no utilizado y efectivo disponible.
Además, la firma espera que las oportunidades de inversión incluyan expansiones, desarrollos y recompras de certificados para su cancelación.
Tras la venta, espera obtener mayor eficiencia operativa, con un incremento estimado del margen del ingreso neto operativo impulsado por una mayor ocupación promedio y tasas de renta en el resto del portafolio.
El portafolio de la fibra consta de 271 propiedades industriales y 17 propiedades comerciales/oficinas ubicadas en 20 ciudades en 16 estados de la República Mexicana, al 31 de marzo de 2018.
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