Yvan Busom, gerente de Soporte Comercial en Mecalux, explica que el principal de los paradigmas, es que adquirir este tipo de soluciones es muy caro; pues no sólo se debe invertir en robots, sino en computadoras y software para su funcionamiento.
Al respecto Busom comenta que existen diferentes niveles de automatización para diversos tipos de empresas y necesidades, pues no forzosamente una empresa mediana debe adoptar las mismas soluciones que una empresa transnacional instalada en México.
Refiere que los niveles de automatización más altos se ven en Europa, debido a que los precios de mano de obra, seguridad social y los impuestos pesan más en los costos de infraestructura, que lo que pueden pesar en Estados Unidos (EU), entonces debido a la cercanía que tiene México con este país. Cuesta más trabajo justificar la automatización de las operaciones en nuestro país, porque muchas de las casas matrices en EU no lo han hecho.
Otro paradigma es la creencia de que en México la mano de obra es más barata, en comparación con otros países, y “sí lo es”, pero el ofrecer sueldos bajos a los trabajadores representa mayor rotación de personal, lo que a largo plazo resulta más caro para las empresas, menciona Busom.
Agrega que la implementación del WMS, es una de las soluciones y niveles más buscados por los 3PL, porque automatizar sus almacenes representaría menos flexibilidad en sus instalaciones, además de que el corto periodo de los contratos con las empresas no les permite invertir en la automatización de todos sus procesos, y recuperar la inversión.
“Este tipo de situaciones pueden ser bien libradas de reunir a tres, cuatro y hasta cinco clientes por almacén, pero la mayoría de las veces los clientes se cierran a esta opción, ignorando beneficios colaterales como también el ahorro en tarimas y transporte. Es más proclive que una empresa que no terceriza sus operaciones opte por los almacenes automatizados”.