Las innovaciones en el sector automotriz y la transición hacia la electromovilidad representan un paso crucial hacia un futuro más sostenible y eficiente en términos energéticos. De acuerdo con la consultora Engen Capital, el autotransporte de carga es una industria que ha evolucionado positivamente durante la última década, creciendo 2.8% en 2023 y sus expectativas son positivas a mediano plazo. Esta posición ofrece una ventana de oportunidad para fomentar el crecimiento de la electrificación en este sector y así promover el avance de la electromovilidad, aunque la adopción de flotas eléctricas también plantea desafíos para la movilidad sostenible a gran escala.
Uno de los principales retos que enfrentan las grandes empresas al adoptar flotas eléctricas es contar con la adecuada infraestructura de carga. La infraestructura de carga para flotas eléctricas está en proceso de expansión, pero todavía no está tan desarrollada como la infraestructura para vehículos eléctricos particulares. Según un informe de BloombergNEF, se estima que, en 2020, aproximadamente el 10% de la infraestructura de carga estaba dedicada a flotas comerciales y de transporte de carga. En este sentido, la instalación de estaciones de carga requiere una planificación meticulosa para garantizar una cobertura adecuada que satisfaga las necesidades operativas de la flota sin comprometer la eficiencia.
Otro desafío crucial es la gestión de la autonomía y la eficiencia de los vehículos eléctricos. Aunque la tecnología de baterías ha avanzado significativamente, tan sólo durante el 2022 la inversión global en almacenamiento de energía en baterías alcanzó 20 mil millones de dólares y se estima que la capacidad instalada actual de almacenamiento de energía se multiplicará 15% para 2030. La autonomía sigue siendo una preocupación para muchas empresas, especialmente en sectores donde las rutas son largas o impredecibles. En casos como estos, la optimización de las rutas y la gestión inteligente de la energía son fundamentales para maximizar la eficiencia operativa de las flotillas.
Por otro lado, la adopción de flotas eléctricas también presenta una serie de oportunidades que deben destacarse. En primer lugar, la integración de flotillas eléctricas ofrece beneficios ambientales significativos al reducir las emisiones de carbono y mejorar la calidad del aire en entornos urbanos. De acuerdo con el Programa Transporte Sustentable (PTS), el transporte de mercancías genera 73% de las emisiones vehiculares de PM10 y PM2.5, así como el 48% de las emisiones de SO2 y el 45% de las emisiones de NOx; además del 9% de las emisiones nacionales de GEI. Sin embargo, según un informe de la Agencia Internacional de Energía (AIE), la adopción de vehículos eléctricos en el transporte de carga podría reducir las emisiones de CO2 en hasta un 1.5 gigatoneladas para 2050 a nivel mundial.
Además de sus beneficios ambientales, los vehículos eléctricos desempeñan un papel crucial en la mitigación de la contaminación acústica urbana. Según expertos en la materia, aproximadamente el 80% de la contaminación acústica en las principales urbes se atribuye al tráfico vehicular. Esta preocupante estadística se ve agravada por datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que señalan que la exposición prolongada a niveles elevados de ruido ambiental, como el generado por el tráfico, puede tener efectos perjudiciales para la salud, como hipertensión arterial, deterioro auditivo e incluso ataques cardíacos.
En este contexto, según análisis de expertos, los vehículos eléctricos, tanto individuales como flotillas, destacan por su notable discreción en comparación con los de combustión interna. Esta característica contribuye significativamente a la disminución de la contaminación acústica en entornos urbanos, promoviendo así una mejor calidad de vida para las comunidades circundantes a las rutas de transporte de carga. Este beneficio cobra especial relevancia en el caso de flotas de transporte nocturno o en zonas residenciales.
La electrificación de las flotas de transporte de carga no solo contribuye significativamente a mitigar el cambio climático y posiciona a las empresas como líderes en responsabilidad ambiental, sino que también ofrece ventajas económicas a largo plazo. Aunque la inversión inicial puede ser alta, los costos operativos de los vehículos eléctricos tienden a ser considerablemente más bajos que los de los vehículos de combustión interna. Según un análisis de la AIE, los vehículos eléctricos pueden tener costos de mantenimiento un entre 30 y 50% más bajos que los vehículos de combustión interna durante su vida útil. Esto se traduce en ahorros significativos gracias a la menor dependencia de los combustibles fósiles y a la mayor eficiencia energética.
Si bien la adopción de flotas eléctricas en grandes empresas presenta desafíos significativos, también ofrece una serie de oportunidades para impulsar la movilidad sostenible y promover la transición hacia un futuro energético más limpio y eficiente. Incluso, su implementación impulsa la innovación tecnológica y fomenta la colaboración entre diferentes sectores. Desde el desarrollo de nuevas tecnologías de baterías hasta la implementación de sistemas de gestión de flotas inteligentes, la electromovilidad está creando nuevas oportunidades de negocio y promoviendo la integración de soluciones energéticas avanzadas.
Hoy en día, la electromovilidad está transformando el transporte de carga y pasajeros hacia un modelo más sostenible y eficiente. La combinación de sistemas de gestión de energía avanzados, infraestructura de carga rápida y soluciones de conectividad abren un abanico de oportunidades para impulsar la adopción masiva de la movilidad eléctrica y acelerar la transición hacia un futuro más limpio y resiliente. Con una planificación estratégica adecuada y un compromiso firme con la innovación y la sostenibilidad, las empresas pueden liderar el camino hacia una nueva era de transporte más limpio y seguro. En este sentido, es crucial seguir fomentando la colaboración entre la industria, el gobierno y la academia para impulsar la innovación y garantizar un desarrollo sostenible en el sector del transporte.
Te invito a leer mi columna anterior: Innovaciones y tecnologías emergentes para la carga inteligente
*Javier Nova actualmente es líder de segmento en Hitachi Energy.
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