Y es que el director de la mencionada organización, Arturo López Garza, señaló que de acuerdo a las estadísticas de Tránsito y Vialidad la mayor parte de los accidentes automovilísticos que se cometen, son ocasionados por unidades de procedencia extranjera o nacionalizados.
Reiteró que las colisiones son ocasionadas por quienes conducen ese tipo de autos “chocolates”, como resultado de que se encuentran en malas condiciones mecánicas, producto del uso que tuvieron durante casi 15 años en las diferentes partes de Estados Unidos.
La idea de la AMDA es que desde el momento en que los propietarios de autos americanos sujetos de regularización temporal a definitiva vayan por sus placas nacionales, las oficinas fiscales deben exigir que posean un seguro para el pago de daños a terceros, en caso de que participen en un accidente.
Para los propietarios de esas unidades, es más fácil abandonar los vehículos en caso de accidente que hacerse responsable de los daños ocasionados, “ya que les sale más barato volver a comprar una unidad en los Estados Unidos que pagar los daños ocasionados a otro vehículo”, estableció.
López Garza admitió que lugares como la Capital del Estado, han sufrido un incremento en la circulación del número de unidades, al grado de que casi un 50 por ciento son de fabricación nacional y el resto, de los llamados “chocolates”.
Lo más grave de todo, es que las estadísticas reflejan que quienes incurren en accidentes automovilísticos, son precisamente los propietarios de autos y camionetas nacionalizadas.
Citó que muchos de los conductores de esas unidades, además de no contar con licencias para conducir, jamás en su vida habían tenido un vehículo y por consecuencia, no tienen los conocimientos más elementales sobre lo que constituye las reglas de tránsito, de circulación y otros conceptos que deben ser tomados en cuenta para poder manera.