“Es un proceso que lleva tiempo, pero se están desarrollando las capacidades para llegar a este paso”, dijo a T21.
De tal manera que el gobierno federal busca atraer a un mayor número de empresas para que se instalen en México y desarrollen la tecnología necesaria. En este sentido, al cierre de este año se habrán ejecutado proyectos de inversión por un total de 950 millones de dólares (mdd).
Solís dijo que la instalación de una planta de Bombardier en el estado de Querétaro, en 2006, para fabricar fuselajes de exportación hacia Canadá, ha atraído la atención de otras empresas aeroespaciales para instalarse en México.
El más reciente de ellos es el del grupo francés Messier Services Ameritas, que invirtió 20 mdd en su planta de Querétaro.
Hasta el momento hay 150 compañías de este sector que exportan más de 500 millones de dólares y generan 18 mil empleos en 14 estados de la República, principalmente en Baja California, Sonora, Chihuahua, Jalisco y Querétaro.
“Estas empresas fabrican fuselajes, colas y estabilizadores; el siguiente paso consiste en manufacturar cabinas, puertas y alas, para luego estar en posibilidad de armar un avión completo”, señaló Solís.
Por otra parte, autoridades e instituciones educativas trabajan en elevar el nivel de los profesionistas para mejorar los procesos de calidad en la fabricación de componentes.
De tal modo, a finales de octubre instituciones privadas crearán un consejo de capacitación en materia aeroespacial para elevar los niveles de capacitación.