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Durante años las empresas de autotransporte han experimentado complejidades para solventar sus operaciones, el flujo de capital es un tema que causa dolores de cabeza a buena parte de las compañías dedicadas al movimiento de mercancías.
Por su vocación, el autotransporte de carga es un negocio de alta intensidad de capital de trabajo, la razón es que las empresas deben tener recursos disponibles 60 días antes de cobrar sus servicios. Esto para poder operar sus unidades, hablamos de inversiones en combustible, mantenimiento, sueldos, casetas, viáticos, etc. esta es una práctica que ha sido parte del negocio por muchos años.
Algunos especialistas señalan que aproximadamente un 2% de las empresas de autotransporte mexicanas tiene la liquidez y la posición financiera para hacer frente a las condiciones de operación actuales y hacer crecer sus negocios.
“Si bien a la fecha existen alternativas para fondear la actividad, algunas de ellas son ineficientes, insuficientes y poco alcanzables para los pequeños y medianos empresarios del autotransporte, debido a la complejidad de procesos para darse de alta y utilizar los servicios. Es cierto, muchas empresas de autotransporte en México no tienen la educación financiera y tecnológica que se requiere para hacer frente a la dinámica del sector”, compartió en entrevista Jaime Tabachnik, cofundador y CEO de Solvento.
En opinión de Tabachnik ante la demanda de autotransporte y de operadores, que se ha ido incrementando y que tomará mucho mayor impulso por el nearshoring, las empresas usuarias tratarán de crear relaciones de lealtad con sus socios de negocio. “La vía para lograrlo es que tengan acceso a liquidez y que su flujo de efectivo dentro de toda la cadena de valor se dé, de forma eficiente”, expuso.
Otro punto crucial para que el dinero fluya es la digitalización, para el cofundador y CEO de Solvento, esta es la clave para hacer que la industria prospere y que los transportistas mexicanos aprovechen las oportunidades que trae la relocalización de las empresas en territorio nacional.
“Una de las razones fundamentales del porqué el flujo de dinero es lento es por el tema de las pruebas de entrega, en México muchas empresas continúan solicitando pruebas de entrega físicas, siguen exigiendo a los transportistas que regresen un documento físico al origen, y hasta que no lo hacen no van a poder iniciar su proceso de cobranza. Hoy existe la tecnología para poder validar una entrega sin necesidad del papel, y es algo que queremos impulsar en Solvento, la digitalización de las pruebas de entrega para validar las entregas inmediatamente y en ese momento inicie el plazo de pago y se acelere el flujo del dinero”, detalló Tabachnik.
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