Aunque este día en conferencia de prensa darán a conocer la fecha precisa en que habrán de movilizarse en las principales ciudades del país, Noé Paredes, vicepresidente de Canacar, adelantó a T21 que el objetivo de esta iniciativa es que el Gobierno Federal dé la importancia debida a esta actividad, además de cumplir con su papel garantizando la seguridad y ofreciendo servicios de calidad, no como actualmente se otorgan en el tema de autopistas.
Los puntos que presentará Canacar se centran en que se suspenda el pago del Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) hasta que no haya condiciones económicas para contribuir con esta tributación; en segundo lugar, detener los incrementos al diesel, principal insumo de esta actividad y que acumula un sobreprecio del 27% en función de su cotización de enero del 2008; así también solicitarán que se reduzcan los peajes en autopistas, que llegan a ser hasta 50% más caros que en países desarrollados; finalmente, el tema de inseguridad, que de acuerdo con el gremio ha tenido incrementos similares a los registros de los años de 1996 y 1997, los más altos de la historia.
Noé Paredes enfatizó que adicionalmente harán evidente que dentro de los programas del Gobierno para afrontar la crisis no se ha incluido aún a este sector, que tiene detenida cerca del 40% de su flota por la caída en el movimiento de mercancías, lo cual significa afectaciones a más de 1.2 millones de familias.
El directivo subrayó que no están pidiendo a las autoridades algún tipo de subsidio: “mucho menos limosna. Sólo queremos que entiendan que esta actividad ya tocó fondo, y es imperante que el Gobierno tenga sensibilidad de nuestras demandas”.
En cuanto a las movilizaciones, se tiene definido que un grupo de transportistas a bordo de sus unidades entreguen en las principales ciudades del país, los documentos en donde plasmen los puntos en que requieren, en el caso del Distrito Federal, la presentación se hará en la Secretaría (Ministerio) de Hacienda y Crédito Público.