El decreto publicado por la Secretaría de Economía si bien determina que los vehículos que se importen deberán cumplir con las condiciones técnicas del país de procedencia, no especifica la metodología para realizar las revisiones físico mecánicas, amén de que falta infraestructura para efectuar las mismas, consideró Armando Soto, director general de la consultora Kaso & Asociados.
A pesar de que el presidente Felipe Calderón anunció en octubre pasado que a través de una norma técnica o administrativa, se impediría la importación de vehículos que pusieran en riesgo la seguridad o el ambiente en el país, lo cual no se logró del todo, pues el decreto deja huecos que podrían aprovecharse para introducir en el país vehículos "chatarra", como son las unidades siniestradas en donde falta el ordenamiento jurídico o infraestructura para impedirlo, refirió en un comunicado la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En el caso de los vehículos pesados, durante 2008 se manejó la posibilidad de que los camiones que se importen cumplieran con la norma de emisión en motores a diesel vigente desde julio pasado, NOM-044, lo que obligaría que incorporaran motores EPA-04 en vez de EPA-98; sin embargo, esto no ha sido concretado hasta ahora.
De acuerdo con algunos agentes aduanales en la frontera norte de México, también es necesario que se publiquen a la brevedad posible las reglas de operación que acompañan al decreto de importación, que puedan regularizar esta actividad.
Armando Soto describió que se espera que al igual que pasó con el decreto de importación del 2005, tendrán que pasar unos meses para que la introducción de automóviles y camiones con más de 10 años de antigüedad sea más activa.
A partir del 2009, en cumplimiento de los plazos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México tiene el compromiso de permitir la importación sin el pago de aranceles a vehículos con 10 o más años de antigüedad provenientes de Estados Unidos y Canadá.
El decreto publicado por la Secretaría de Economía si bien determina que los vehículos que se importen deberán cumplir con las condiciones técnicas del país de procedencia, no especifica la metodología para realizar las revisiones físico mecánicas, amén de que falta infraestructura para efectuar las mismas, consideró Armando Soto, director general de la consultora Kaso & Asociados.
A pesar de que el presidente Felipe Calderón anunció en octubre pasado que a través de una norma técnica o administrativa, se impediría la importación de vehículos que pusieran en riesgo la seguridad o el ambiente en el país, lo cual no se logró del todo, pues el decreto deja huecos que podrían aprovecharse para introducir en el país vehículos "chatarra", como son las unidades siniestradas en donde falta el ordenamiento jurídico o infraestructura para impedirlo, refirió en un comunicado la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En el caso de los vehículos pesados, durante 2008 se manejó la posibilidad de que los camiones que se importen cumplieran con la norma de emisión en motores a diesel vigente desde julio pasado, NOM-044, lo que obligaría que incorporaran motores EPA-04 en vez de EPA-98; sin embargo, esto no ha sido concretado hasta ahora.
De acuerdo con algunos agentes aduanales en la frontera norte de México, también es necesario que se publiquen a la brevedad posible las reglas de operación que acompañan al decreto de importación, que puedan regularizar esta actividad.
Armando Soto describió que se espera que al igual que pasó con el decreto de importación del 2005, tendrán que pasar unos meses para que la introducción de automóviles y camiones con más de 10 años de antigüedad sea más activa.
A partir del 2009, en cumplimiento de los plazos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México tiene el compromiso de permitir la importación sin el pago de aranceles a vehículos con 10 o más años de antigüedad provenientes de Estados Unidos y Canadá.
El decreto publicado por la Secretaría de Economía si bien determina que los vehículos que se importen deberán cumplir con las condiciones técnicas del país de procedencia, no especifica la metodología para realizar las revisiones físico mecánicas, amén de que falta infraestructura para efectuar las mismas, consideró Armando Soto, director general de la consultora Kaso & Asociados.
A pesar de que el presidente Felipe Calderón anunció en octubre pasado que a través de una norma técnica o administrativa, se impediría la importación de vehículos que pusieran en riesgo la seguridad o el ambiente en el país, lo cual no se logró del todo, pues el decreto deja huecos que podrían aprovecharse para introducir en el país vehículos "chatarra", como son las unidades siniestradas en donde falta el ordenamiento jurídico o infraestructura para impedirlo, refirió en un comunicado la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En el caso de los vehículos pesados, durante 2008 se manejó la posibilidad de que los camiones que se importen cumplieran con la norma de emisión en motores a diesel vigente desde julio pasado, NOM-044, lo que obligaría que incorporaran motores EPA-04 en vez de EPA-98; sin embargo, esto no ha sido concretado hasta ahora.
De acuerdo con algunos agentes aduanales en la frontera norte de México, también es necesario que se publiquen a la brevedad posible las reglas de operación que acompañan al decreto de importación, que puedan regularizar esta actividad.
Armando Soto describió que se espera que al igual que pasó con el decreto de importación del 2005, tendrán que pasar unos meses para que la introducción de automóviles y camiones con más de 10 años de antigüedad sea más activa.
A partir del 2009, en cumplimiento de los plazos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México tiene el compromiso de permitir la importación sin el pago de aranceles a vehículos con 10 o más años de antigüedad provenientes de Estados Unidos y Canadá.
El decreto publicado por la Secretaría de Economía si bien determina que los vehículos que se importen deberán cumplir con las condiciones técnicas del país de procedencia, no especifica la metodología para realizar las revisiones físico mecánicas, amén de que falta infraestructura para efectuar las mismas, consideró Armando Soto, director general de la consultora Kaso & Asociados.
A pesar de que el presidente Felipe Calderón anunció en octubre pasado que a través de una norma técnica o administrativa, se impediría la importación de vehículos que pusieran en riesgo la seguridad o el ambiente en el país, lo cual no se logró del todo, pues el decreto deja huecos que podrían aprovecharse para introducir en el país vehículos "chatarra", como son las unidades siniestradas en donde falta el ordenamiento jurídico o infraestructura para impedirlo, refirió en un comunicado la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En el caso de los vehículos pesados, durante 2008 se manejó la posibilidad de que los camiones que se importen cumplieran con la norma de emisión en motores a diesel vigente desde julio pasado, NOM-044, lo que obligaría que incorporaran motores EPA-04 en vez de EPA-98; sin embargo, esto no ha sido concretado hasta ahora.
De acuerdo con algunos agentes aduanales en la frontera norte de México, también es necesario que se publiquen a la brevedad posible las reglas de operación que acompañan al decreto de importación, que puedan regularizar esta actividad.
Armando Soto describió que se espera que al igual que pasó con el decreto de importación del 2005, tendrán que pasar unos meses para que la introducción de automóviles y camiones con más de 10 años de antigüedad sea más activa.
A partir del 2009, en cumplimiento de los plazos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México tiene el compromiso de permitir la importación sin el pago de aranceles a vehículos con 10 o más años de antigüedad provenientes de Estados Unidos y Canadá.
El decreto publicado por la Secretaría de Economía si bien determina que los vehículos que se importen deberán cumplir con las condiciones técnicas del país de procedencia, no especifica la metodología para realizar las revisiones físico mecánicas, amén de que falta infraestructura para efectuar las mismas, consideró Armando Soto, director general de la consultora Kaso & Asociados.
A pesar de que el presidente Felipe Calderón anunció en octubre pasado que a través de una norma técnica o administrativa, se impediría la importación de vehículos que pusieran en riesgo la seguridad o el ambiente en el país, lo cual no se logró del todo, pues el decreto deja huecos que podrían aprovecharse para introducir en el país vehículos "chatarra", como son las unidades siniestradas en donde falta el ordenamiento jurídico o infraestructura para impedirlo, refirió en un comunicado la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En el caso de los vehículos pesados, durante 2008 se manejó la posibilidad de que los camiones que se importen cumplieran con la norma de emisión en motores a diesel vigente desde julio pasado, NOM-044, lo que obligaría que incorporaran motores EPA-04 en vez de EPA-98; sin embargo, esto no ha sido concretado hasta ahora.
De acuerdo con algunos agentes aduanales en la frontera norte de México, también es necesario que se publiquen a la brevedad posible las reglas de operación que acompañan al decreto de importación, que puedan regularizar esta actividad.
Armando Soto describió que se espera que al igual que pasó con el decreto de importación del 2005, tendrán que pasar unos meses para que la introducción de automóviles y camiones con más de 10 años de antigüedad sea más activa.
A partir del 2009, en cumplimiento de los plazos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México tiene el compromiso de permitir la importación sin el pago de aranceles a vehículos con 10 o más años de antigüedad provenientes de Estados Unidos y Canadá.
El decreto publicado por la Secretaría de Economía si bien determina que los vehículos que se importen deberán cumplir con las condiciones técnicas del país de procedencia, no especifica la metodología para realizar las revisiones físico mecánicas, amén de que falta infraestructura para efectuar las mismas, consideró Armando Soto, director general de la consultora Kaso & Asociados.
A pesar de que el presidente Felipe Calderón anunció en octubre pasado que a través de una norma técnica o administrativa, se impediría la importación de vehículos que pusieran en riesgo la seguridad o el ambiente en el país, lo cual no se logró del todo, pues el decreto deja huecos que podrían aprovecharse para introducir en el país vehículos "chatarra", como son las unidades siniestradas en donde falta el ordenamiento jurídico o infraestructura para impedirlo, refirió en un comunicado la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En el caso de los vehículos pesados, durante 2008 se manejó la posibilidad de que los camiones que se importen cumplieran con la norma de emisión en motores a diesel vigente desde julio pasado, NOM-044, lo que obligaría que incorporaran motores EPA-04 en vez de EPA-98; sin embargo, esto no ha sido concretado hasta ahora.
De acuerdo con algunos agentes aduanales en la frontera norte de México, también es necesario que se publiquen a la brevedad posible las reglas de operación que acompañan al decreto de importación, que puedan regularizar esta actividad.
Armando Soto describió que se espera que al igual que pasó con el decreto de importación del 2005, tendrán que pasar unos meses para que la introducción de automóviles y camiones con más de 10 años de antigüedad sea más activa.
A partir del 2009, en cumplimiento de los plazos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México tiene el compromiso de permitir la importación sin el pago de aranceles a vehículos con 10 o más años de antigüedad provenientes de Estados Unidos y Canadá.
El decreto publicado por la Secretaría de Economía si bien determina que los vehículos que se importen deberán cumplir con las condiciones técnicas del país de procedencia, no especifica la metodología para realizar las revisiones físico mecánicas, amén de que falta infraestructura para efectuar las mismas, consideró Armando Soto, director general de la consultora Kaso & Asociados.
A pesar de que el presidente Felipe Calderón anunció en octubre pasado que a través de una norma técnica o administrativa, se impediría la importación de vehículos que pusieran en riesgo la seguridad o el ambiente en el país, lo cual no se logró del todo, pues el decreto deja huecos que podrían aprovecharse para introducir en el país vehículos "chatarra", como son las unidades siniestradas en donde falta el ordenamiento jurídico o infraestructura para impedirlo, refirió en un comunicado la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En el caso de los vehículos pesados, durante 2008 se manejó la posibilidad de que los camiones que se importen cumplieran con la norma de emisión en motores a diesel vigente desde julio pasado, NOM-044, lo que obligaría que incorporaran motores EPA-04 en vez de EPA-98; sin embargo, esto no ha sido concretado hasta ahora.
De acuerdo con algunos agentes aduanales en la frontera norte de México, también es necesario que se publiquen a la brevedad posible las reglas de operación que acompañan al decreto de importación, que puedan regularizar esta actividad.
Armando Soto describió que se espera que al igual que pasó con el decreto de importación del 2005, tendrán que pasar unos meses para que la introducción de automóviles y camiones con más de 10 años de antigüedad sea más activa.
A partir del 2009, en cumplimiento de los plazos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México tiene el compromiso de permitir la importación sin el pago de aranceles a vehículos con 10 o más años de antigüedad provenientes de Estados Unidos y Canadá.
El decreto publicado por la Secretaría de Economía si bien determina que los vehículos que se importen deberán cumplir con las condiciones técnicas del país de procedencia, no especifica la metodología para realizar las revisiones físico mecánicas, amén de que falta infraestructura para efectuar las mismas, consideró Armando Soto, director general de la consultora Kaso & Asociados.
A pesar de que el presidente Felipe Calderón anunció en octubre pasado que a través de una norma técnica o administrativa, se impediría la importación de vehículos que pusieran en riesgo la seguridad o el ambiente en el país, lo cual no se logró del todo, pues el decreto deja huecos que podrían aprovecharse para introducir en el país vehículos "chatarra", como son las unidades siniestradas en donde falta el ordenamiento jurídico o infraestructura para impedirlo, refirió en un comunicado la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En el caso de los vehículos pesados, durante 2008 se manejó la posibilidad de que los camiones que se importen cumplieran con la norma de emisión en motores a diesel vigente desde julio pasado, NOM-044, lo que obligaría que incorporaran motores EPA-04 en vez de EPA-98; sin embargo, esto no ha sido concretado hasta ahora.
De acuerdo con algunos agentes aduanales en la frontera norte de México, también es necesario que se publiquen a la brevedad posible las reglas de operación que acompañan al decreto de importación, que puedan regularizar esta actividad.
Armando Soto describió que se espera que al igual que pasó con el decreto de importación del 2005, tendrán que pasar unos meses para que la introducción de automóviles y camiones con más de 10 años de antigüedad sea más activa.
A partir del 2009, en cumplimiento de los plazos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México tiene el compromiso de permitir la importación sin el pago de aranceles a vehículos con 10 o más años de antigüedad provenientes de Estados Unidos y Canadá.