En la realización del “6º Encuentro de Transporte y Logística”, Miguel Ángel Bres, director general de TDR, sentenció que el aumento del diesel ha generado que en la estructura de costos de las empresas este factor haya pasado a representar hasta un 29%, cuando anteriormente era 20%, por lo cual se estima que la empresa que no lo aplique estará destinada a perder.
Por su parte, Raúl Oliver, director comercial de Navistar Financial Corporation, precisó que el CPAC debe ser considerado, ya que después de que desde julio pasado entró en vigor la NOM-044 que permite la incorporación de motores con estándares EPA-04 y EURO IV, motivará que los consumos de diesel sean mayores, lo cual se conjunta con la escalada de precios del combustible.
Bres agregó que si bien su aplicación no puede ser unilateral, debe generarse de una negociación con los usuarios y en donde se haga evidente que el CPAC únicamente representa el trasladar al aumento del diesel en el trayecto utilizado, sobre todo, con aquellos embarcadores que mantengan interés en cuidar a sus proveedores de transporte.
Jesús Santos Núñez, gerente de Transporte y Desarrollo de Negocios de SKF, comentó que si bien la aplicación del CPAC responde a una situación de mercado, es necesario que exista corresponsabilidad entre proveedores y usuarios, y en donde los transportistas se mantengan informados sobre su estructura y su origen para poder plantearlo ante los embarcadores.
El CPAC fue el esquema que al interior de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) se definió para trasladar el incremento constante en el precio del diesel por parte del gobierno federal, esquema que es empleado a nivel mundial bajo la figura del “fuel surcharge”, que se entiende como sobre costos por combustible.