Por Antonio Arranz*
En este 2024 se ha comenzado a vislumbrar un panorama dinámico y transformador para la industria logística y de mensajería en México. Desde el impacto del nearshoring, que no sólo impulsa a grandes empresas, sino que también cataliza el surgimiento de numerosas pequeñas y medianas empresas (pymes) locales, hasta la consolidación de eventos comerciales que estimulan el consumo y optimizan los procesos logísticos.
En este contexto, la relevancia de la infraestructura se hace patente, con inversiones estratégicas que apuntan a transformar las actividades logísticas en la región. Además, la industria se embarca en la adopción de criterios ESG, reflejando una conciencia creciente sobre la sostenibilidad y la responsabilidad social.
Se trata de las tendencias que han comenzado sobresalir en un año de desafíos y oportunidades, y que le darán aún más dinamismo al sector y definirán el rumbo que tomará en los años por venir. Repasemos cada una de ellas.
Nearshoring: una oportunidad de impacto
La relocalización de cadenas productivas ha abierto la puerta a una oportunidad significativa en México. El nearshoring no sólo impulsa el establecimiento de grandes empresas en el país, sino que también conlleva la creación de hasta 100 pymes locales que se convierten en proveedores de productos y materiales.
Según el Banco de México (Banxico), las ciudades más atractivas para las empresas que buscan sumarse al nearshoring son Saltillo, Monterrey, Ciudad Juárez y Tijuana. Además, de acuerdo con el Reporte sobre las Economías Regionales de Abril-Junio de 2023, Ciudad de México, San Luis Potosí y Querétaro también destacan como centros de interés para este fenómeno.
La dinámica generada por el nearshoring no se limitará únicamente a la creación de empleo directo en las ciudades, sino que también impulsará una derrama económica significativa. Este impacto se extendería a otras ciudades a través de compras locales, incluyendo servicios de mensajería. Al mismo tiempo, se observará una competencia intensa por la mano de obra en estas localidades.
Este fenómeno también generará una demanda interna de productos en México, donde los servicios de mensajería jugarán un papel crucial. Ayudarán a las pequeñas y medianas empresas no sólo a satisfacer las necesidades del mercado local, sino también a expandirse hacia el mercado global.
Estímulos al consumo: Hot Sale y Buen Fin
En el mercado mexicano, dos eventos comerciales se erigen como catalizadores clave para fomentar el crecimiento del consumo y, por ende, activar la economía de manera significativa: el Hot Sale y el Buen Fin. Año tras año, los consumidores aguardan con expectación estos eventos que les brindan la oportunidad de realizar compras masivas y de alto valor.
La edición del Hot Sale en 2023 registró 29 mil millones de pesos. Por su parte, el Buen Fin también celebró su mejor edición el mismo año, con una suma de 141 mil millones de pesos en ventas.
Para este año se vislumbra una mayor consolidación para estos eventos comerciales. Se anticipa un aumento significativo en la participación de minoristas, con la incorporación de canales adicionales, tanto físicos como virtuales, que promoverán y ofrecerán sus servicios y productos. Además, se proyecta la creación de un ecosistema integral alrededor de estos eventos, potenciando aún más su impacto en el panorama comercial.
Tanto el Hot Sale, que tiene lugar en mayo, como el Buen Fin, celebrado en noviembre, no solo impulsan el consumo, sino que también desencadenan un eficiente mecanismo logístico para llevar las mercancías directamente a los hogares de los consumidores. Este componente logístico no solo mejora la experiencia de compra, sino que también añade uno estratégico a la ejecución de estas iniciativas comerciales.
Comercio electrónico, democratización comercial
El comercio electrónico ha emergido como el gran igualador para las pymes, permitiéndoles llevar sus productos a todos los rincones del mundo y romper las barreras geográficas que antes limitaban su alcance a una región específica. Este mecanismo ha transformado radicalmente la experiencia comercial, democratizando el acceso al mercado global.
En este nuevo paradigma, la competencia deja de ser simplemente local para adquirir una dimensión global. En el transcurso del 2024, las empresas en crecimiento están cada vez más conscientes de esta nueva realidad competitiva. Buscan activamente alianzas estratégicas con empresas que puedan facilitar el transporte de sus mercancías a cualquier lugar del planeta, permitiéndoles competir en igualdad de condiciones con sus contrapartes de otras regiones.
Infraestructura: la piedra angular para el futuro
En el contexto del nearshoring, la infraestructura emerge como un factor crítico para capitalizar las oportunidades. Por lo tanto, es imperativo que los gobiernos locales y nacionales tracen planes estratégicos para el desarrollo de infraestructuras en los próximos años.
La falta de inversión en elementos clave como aduanas, puentes, carreteras y centros de conexión (hubs) podría traducirse en la pérdida de valiosas oportunidades para atraer nuevas empresas a México. En este contexto, las contribuciones significativas por parte de empresas privadas desempeñarán un papel esencial en el impulso de este desarrollo crucial.
Combate al cambio climático y adopción de ESG
El mundo está teniendo un cambio climático tremendamente fuerte y las compañías de logística están preocupadas por hacer que la cadena de suministro sea resiliente, considerando habrá sucesos generados por dicho cambio.
Es imperativo que las empresas busquen dónde ubicarse para tener un menor impacto ambiental, dediquen esfuerzos a proteger a las comunidades donde operan reduciendo emisiones de carbono, para tener una mejor reputación en el mercado.
La adopción de los criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG, por sus siglas en inglés) en la industria logística refleja una creciente conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad y la responsabilidad social en el mundo empresarial. De ahí la importancia de poner énfasis en la eficiencia energética y la reducción de emisiones mediante el uso de vehículos sostenibles y la optimización de rutas.
Asimismo, seguirá siendo fundamental la transparencia y responsabilidad corporativa con la publicación de informes de sostenibilidad en el que definan sus estrategias de ESG, así como la promoción de prácticas comerciales éticas, incluida la gestión responsable de la cadena de suministro.
La adopción de criterios ESG en la industria logística no sólo responderá a una creciente demanda social y regulatoria, sino que también ofrecerá oportunidades para mejorar la eficiencia operativa, reducir costos y construir relaciones sólidas con clientes y socios comerciales comprometidos con la sostenibilidad.
Te invito a leer mi columna anterior: Cadenas de suministro resilientes, sustentables y listas para el futuro
*Antonio Arranz actualmente es CEO de DHL Express México.
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