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Hapag-Lloyd y CSAV firmaron un acuerdo de integración de negocios el pasado mes de abril. Su implementación está sujeta a la aprobación de las autoridades reguladoras. Entre otros, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos, la Unión Europea (UE) y Chile ya aprobaron la transacción, sin embargo aún faltan autorizaciones de otras jurisdicciones.
Con esta transacción, Hapag-Lloyd se convertiría en la cuarta naviera portacontenedores más grande del mundo, con 200 embarcaciones y un volumen de transporte anual de 7.5 millones de TEU, informó la naviera en un comunicado.
El volumen de negocios combinado de ambas navieras sería aproximadamente de nueve mil millones de euros.
Esta fusión entre CSAV y Hapag-Lloyd se da luego de que la alemana buscara fusionarse desde finales de 2012, entablando negociaciones con su connacional Hamburg-Süd, con la cual no logró un acuerdo a falta de detalles sobre cómo sería el proceso de reestructuración.
Hapag-Lloyd detuvo dicho proyecto debido a la falta de acuerdos en términos del contrato. Las navieras más grandes de Alemania buscaban establecer un proyecto de fusión que llevaría a ambas empresas a superar la caída en el mercado.
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