Al hablar con T21, el consultor en materia portuaria consideró que profesionalizar las APIs implica la integración de gente capacitada y con formación académica para que administre la operación de un recinto portuario.
Indicó que las autoridades siempre deben velar por el interés público y que los bienes, como es el caso de los puertos, se utilicen en beneficio de la comunidad, por lo que la privatización de las APIs contraviene el espíritu de la Ley en materia portuaria.
El término profesionalizar las APIs sería lo correcto porque hasta la fecha muchos de los administradores o directores de dicha instancia son personas que, si bien pueden haberse formado dentro de la estructura administrativa y después haber ascendido por méritos propios, hay muchos otros que llegan por un premio de consolación política.
López Gutiérrez declaró que la privatización de las APIs sería la transferencia de bienes del dominio público al sector privado, en cambio con la profesionalización se estaría eliminando la posibilidad de que llegue un particular a administrar un puerto, “sin saber cómo hacerlo”.
Para ello, concluyó, la siguiente etapa para la reforma portuaria, incluyendo su profesionalización, sería la modificación a la Ley de Puertos que estaría por cumplir 20 años desde su promulgación en 1993, “porque los cambios que se le hicieron el año pasado fueron menores y no significativos”.