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En su participación en la Primera Convención Hemisférica sobre Logística y Competitividad Portuaria que se realiza aquí y en la que participan representantes de 30 países, dijo que para su desarrollo, el cabotaje marítimo necesita abrirse a la inversión extranjera, ya que los trabajadores mexicanos son más caros por la carga de impuestos, Infonavit e IMSS, entre otros, en comparación con tripulaciones de otros países que son más competitivas en términos de costos.
“œEse punto de la tripulación es importante, porque puede ayudar mucho”, dijo en relación a los costos de inicio de operación en una nueva ruta que deben de enfrentar las empresas navieras.
Chacón comentó que además de este tema, existen otros problemas normativos que no han permitido una expansión del cabotaje.
Ejemplificó, que recientemente, una empresa mexicana que pretendía hacer un servicio marítimo feeder entre Manzanillo y Ensenada, llevando una mezcla de contenedores nacionales e internacionales, éstos últimos para la naviera Hanjin, que después seguirían en una ruta hacia China; se complicó con la Aduana, porque no existía el procedimiento para distinguir entre el despacho de la carga nacional e
internacional.
Esta era una condición perfecta para desarrollar una ruta de cabotaje, comentó, dado que los tráficos internacionales servirían para generar las economías de escala que le dieran viabilidad a este servicio, en tanto se generaba la masa crítica necesaria. Sin embargo, un tema aduanal imposibilitó que fuera una realidad, lamentó.