Lo anterior trascendió luego de que José Luis Fuentes Quiroz Pacheco, director de Recursos Humanos de Mittal Steel, se reuniera ayer por la mañana con Luis Sánchez Zúñiga, secretario de Actas, y Juan Delgado Jaimes, secretario del trabajo de la Sección 271, para ver lo relacionado a la rescisión laboral de todos los obreros sindicalizados de esa empresa, quienes incumplieron el sábado por la tarde el ultimátum dado por la empresa, de regresar a laborar.
Ante la negativa de los directivos de que los sindicalizados de Mittal reanuden labores, Quiroz Pacheco les comunicó la decisión del dueño de la empresa, de cerrar definitivamente la planta el próximo martes, si para entonces los seguidores de Napoleón Gómez Urrutia no regresan a laborar.
De esta forma, se estarían perdiendo en el puerto más de mil fuentes de empleo, tomando en cuenta los sindicalizados, empleados de confianza y eventuales que laboran en Mittal, la empresa mayor productora de acero en el país, con capacidad para más de cuatro millones de toneladas de acero y facturación de más de cinco mil millones de dólares al año, por la venta al extranjero de la mayor parte de su producción, un subproducto conocido como planchón.
Fuentes Quiroz comentó a los directivos de la 271, en la reunión «secreta» que sostuvo con ellos, que ya no había condiciones para que la empresa de capital indio y que tiene su sede en Londres, Inglaterra, siguiera sufriendo pérdidas económicas no sólo por la falta de producción, sino porque no estaba entregando a tiempo los pedidos internaciones de planchón que tiene con diferentes clientes, que le estaban provocando también diversas penalizaciones de gran sangría económica para el consorcio, por lo que no les quedaba más que cerrar la planta.
Los dirigentes de la 271 en todo momento se mostraron renuentes para convencer a sus compañeros de levantar el paro, pues éste afirmaron, terminará en el momento mismo en que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del gobierno federal, otorgue la Toma de Nota a Napoleón Gómez Urrutia, para que siga siendo él y no Elías Morales Hernández, el líder nacional minero reconocido oficialmente por la autoridad laboral.
Son ya millonarias las pérdidas económicas que ha arrojado, no sólo a los dueños de las empresas acereras del puerto, el paro de labores iniciado el 2 de abril por obreros sindicalizados afiliados a la sección 271, y el 4 de abril los que pertenecen a la sección 273 de mineros, pues otros de los afectados son los grandes y pequeños proveedores de insumos a esas industrias y el Seguro Social.
En los primeros ocho días de paro en Sicartsa y Mittal Steel, se han dejado de producir unas 80 mil toneladas de acero líquido, que representan alrededor de 50 millones de dólares en pérdidas económicas para ambas empresas. En tanto que en Viga Trefilados, los daños causados por el movimiento de sus sindicalizados en los primeros seis días de paro, asciende a 30 millones de pesos, esto es, a razón de cinco millones de pesos por cada día de inactividad laboral.
De acuerdo a datos proporcionados por Raúl Martínez Villegas, superintendente de distribución de la Comisión Federal de Electricidad en esta región, mensualmente se factura un promedio de 250 millones de pesos en forma conjunta a Sicartsa y Mittal Steel, por consumo de energía eléctrica, por lo que estimó que las pérdidas para CFE por este conflicto, ascienden a unos 8.5 millones de pesos por cada día que dure el paro de labores, pues no le están consumiendo nada de electricidad.
También se encuentra en esa misma situación Petróleos Mexicanos, que dejará de comercializar una importante cantidad de toneladas de combustóleo, además de los embarques de importación de chatarra, pellet, carbón mineral y, desde luego, el movimiento en los muelles para la carga de producto terminado con destino a varios países.
Por lo que hace el Seguro Social, se conoció que las empresas paralizadas por los obreros afiliados al sindicato minero, estudiaban la posibilidad de suspender el pago de cuotas obrero-patronales por el tiempo que dure el conflicto, o bien, demandar del instituto plazos más largos para enterar esas cuotas.
Similar situación se pretende hacer con la Secretaría de Hacienda en relación a los impuestos que la actividad industrial genera y que por el momento, se dijo, no están dispuestos a cumplir por el conflicto que afrontan, el cual les está representando grandes pérdidas económicas.
Por lo que toca al comercio de la región, el de ayer fue el primer fin de semana que comenzó a resentir los estragos del conflicto, pues no sólo fueron los aproximadamente tres mil obreros sindicalizados los que no pudieron cobrar su salario semanal por el paro que provocaron en las empresas acereras, sino varios miles de trabajadores más con categoría de confianza, eventuales y contratistas, cuyas familias también se han quedado sin el sustento económico para hacer frente a sus necesidades. La Canaco aun no ha dado a conocer en qué porcentaje bajaron las ventas en el comercio organizado el fin de semana.
Asimismo, empleados de confianza de las empresas acereras, sobre todo de Mittal, han mostrado su preocupación por el destino final que vayan a tener, «pues tenemos informes de que los dueños de las fábricas han comenzado a desconectar todo el equipo de radio comunicación y bajado todos los switches, ya no se está consumiendo nada de energía eléctrica, en una palabra sólo están dejando un foco encendido, como cuando uno sale de vacaciones y deja prendido un foco en la casa, para que los ladrones sepan que alguien se quedó a cuidar la casa», fue el comentario de algunos trabajadores de confianza de las acereras.
Esta situación les preocupa demasiado a este tipo de trabajadores acereros, pues temen que, de continuar más días el conflicto, tanto el Grupo Villacero como Mittal Steel, decidan cerrar las plantas para llevarse su infraestructura a otros puntos del país o del extranjero donde no tengan tanto conflicto por parte de obreros sindicalizados, cancelando así miles de fuentes de empleo en la región.
Lo anterior trascendió luego de que José Luis Fuentes Quiroz Pacheco, director de Recursos Humanos de Mittal Steel, se reuniera ayer por la mañana con Luis Sánchez Zúñiga, secretario de Actas, y Juan Delgado Jaimes, secretario del trabajo de la Sección 271, para ver lo relacionado a la rescisión laboral de todos los obreros sindicalizados de esa empresa, quienes incumplieron el sábado por la tarde el ultimátum dado por la empresa, de regresar a laborar.
Ante la negativa de los directivos de que los sindicalizados de Mittal reanuden labores, Quiroz Pacheco les comunicó la decisión del dueño de la empresa, de cerrar definitivamente la planta el próximo martes, si para entonces los seguidores de Napoleón Gómez Urrutia no regresan a laborar.
De esta forma, se estarían perdiendo en el puerto más de mil fuentes de empleo, tomando en cuenta los sindicalizados, empleados de confianza y eventuales que laboran en Mittal, la empresa mayor productora de acero en el país, con capacidad para más de cuatro millones de toneladas de acero y facturación de más de cinco mil millones de dólares al año, por la venta al extranjero de la mayor parte de su producción, un subproducto conocido como planchón.
Fuentes Quiroz comentó a los directivos de la 271, en la reunión «secreta» que sostuvo con ellos, que ya no había condiciones para que la empresa de capital indio y que tiene su sede en Londres, Inglaterra, siguiera sufriendo pérdidas económicas no sólo por la falta de producción, sino porque no estaba entregando a tiempo los pedidos internaciones de planchón que tiene con diferentes clientes, que le estaban provocando también diversas penalizaciones de gran sangría económica para el consorcio, por lo que no les quedaba más que cerrar la planta.
Los dirigentes de la 271 en todo momento se mostraron renuentes para convencer a sus compañeros de levantar el paro, pues éste afirmaron, terminará en el momento mismo en que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del gobierno federal, otorgue la Toma de Nota a Napoleón Gómez Urrutia, para que siga siendo él y no Elías Morales Hernández, el líder nacional minero reconocido oficialmente por la autoridad laboral.
Son ya millonarias las pérdidas económicas que ha arrojado, no sólo a los dueños de las empresas acereras del puerto, el paro de labores iniciado el 2 de abril por obreros sindicalizados afiliados a la sección 271, y el 4 de abril los que pertenecen a la sección 273 de mineros, pues otros de los afectados son los grandes y pequeños proveedores de insumos a esas industrias y el Seguro Social.
En los primeros ocho días de paro en Sicartsa y Mittal Steel, se han dejado de producir unas 80 mil toneladas de acero líquido, que representan alrededor de 50 millones de dólares en pérdidas económicas para ambas empresas. En tanto que en Viga Trefilados, los daños causados por el movimiento de sus sindicalizados en los primeros seis días de paro, asciende a 30 millones de pesos, esto es, a razón de cinco millones de pesos por cada día de inactividad laboral.
De acuerdo a datos proporcionados por Raúl Martínez Villegas, superintendente de distribución de la Comisión Federal de Electricidad en esta región, mensualmente se factura un promedio de 250 millones de pesos en forma conjunta a Sicartsa y Mittal Steel, por consumo de energía eléctrica, por lo que estimó que las pérdidas para CFE por este conflicto, ascienden a unos 8.5 millones de pesos por cada día que dure el paro de labores, pues no le están consumiendo nada de electricidad.
También se encuentra en esa misma situación Petróleos Mexicanos, que dejará de comercializar una importante cantidad de toneladas de combustóleo, además de los embarques de importación de chatarra, pellet, carbón mineral y, desde luego, el movimiento en los muelles para la carga de producto terminado con destino a varios países.
Por lo que hace el Seguro Social, se conoció que las empresas paralizadas por los obreros afiliados al sindicato minero, estudiaban la posibilidad de suspender el pago de cuotas obrero-patronales por el tiempo que dure el conflicto, o bien, demandar del instituto plazos más largos para enterar esas cuotas.
Similar situación se pretende hacer con la Secretaría de Hacienda en relación a los impuestos que la actividad industrial genera y que por el momento, se dijo, no están dispuestos a cumplir por el conflicto que afrontan, el cual les está representando grandes pérdidas económicas.
Por lo que toca al comercio de la región, el de ayer fue el primer fin de semana que comenzó a resentir los estragos del conflicto, pues no sólo fueron los aproximadamente tres mil obreros sindicalizados los que no pudieron cobrar su salario semanal por el paro que provocaron en las empresas acereras, sino varios miles de trabajadores más con categoría de confianza, eventuales y contratistas, cuyas familias también se han quedado sin el sustento económico para hacer frente a sus necesidades. La Canaco aun no ha dado a conocer en qué porcentaje bajaron las ventas en el comercio organizado el fin de semana.
Asimismo, empleados de confianza de las empresas acereras, sobre todo de Mittal, han mostrado su preocupación por el destino final que vayan a tener, «pues tenemos informes de que los dueños de las fábricas han comenzado a desconectar todo el equipo de radio comunicación y bajado todos los switches, ya no se está consumiendo nada de energía eléctrica, en una palabra sólo están dejando un foco encendido, como cuando uno sale de vacaciones y deja prendido un foco en la casa, para que los ladrones sepan que alguien se quedó a cuidar la casa», fue el comentario de algunos trabajadores de confianza de las acereras.
Esta situación les preocupa demasiado a este tipo de trabajadores acereros, pues temen que, de continuar más días el conflicto, tanto el Grupo Villacero como Mittal Steel, decidan cerrar las plantas para llevarse su infraestructura a otros puntos del país o del extranjero donde no tengan tanto conflicto por parte de obreros sindicalizados, cancelando así miles de fuentes de empleo en la región.
Lo anterior trascendió luego de que José Luis Fuentes Quiroz Pacheco, director de Recursos Humanos de Mittal Steel, se reuniera ayer por la mañana con Luis Sánchez Zúñiga, secretario de Actas, y Juan Delgado Jaimes, secretario del trabajo de la Sección 271, para ver lo relacionado a la rescisión laboral de todos los obreros sindicalizados de esa empresa, quienes incumplieron el sábado por la tarde el ultimátum dado por la empresa, de regresar a laborar.
Ante la negativa de los directivos de que los sindicalizados de Mittal reanuden labores, Quiroz Pacheco les comunicó la decisión del dueño de la empresa, de cerrar definitivamente la planta el próximo martes, si para entonces los seguidores de Napoleón Gómez Urrutia no regresan a laborar.
De esta forma, se estarían perdiendo en el puerto más de mil fuentes de empleo, tomando en cuenta los sindicalizados, empleados de confianza y eventuales que laboran en Mittal, la empresa mayor productora de acero en el país, con capacidad para más de cuatro millones de toneladas de acero y facturación de más de cinco mil millones de dólares al año, por la venta al extranjero de la mayor parte de su producción, un subproducto conocido como planchón.
Fuentes Quiroz comentó a los directivos de la 271, en la reunión «secreta» que sostuvo con ellos, que ya no había condiciones para que la empresa de capital indio y que tiene su sede en Londres, Inglaterra, siguiera sufriendo pérdidas económicas no sólo por la falta de producción, sino porque no estaba entregando a tiempo los pedidos internaciones de planchón que tiene con diferentes clientes, que le estaban provocando también diversas penalizaciones de gran sangría económica para el consorcio, por lo que no les quedaba más que cerrar la planta.
Los dirigentes de la 271 en todo momento se mostraron renuentes para convencer a sus compañeros de levantar el paro, pues éste afirmaron, terminará en el momento mismo en que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del gobierno federal, otorgue la Toma de Nota a Napoleón Gómez Urrutia, para que siga siendo él y no Elías Morales Hernández, el líder nacional minero reconocido oficialmente por la autoridad laboral.
Son ya millonarias las pérdidas económicas que ha arrojado, no sólo a los dueños de las empresas acereras del puerto, el paro de labores iniciado el 2 de abril por obreros sindicalizados afiliados a la sección 271, y el 4 de abril los que pertenecen a la sección 273 de mineros, pues otros de los afectados son los grandes y pequeños proveedores de insumos a esas industrias y el Seguro Social.
En los primeros ocho días de paro en Sicartsa y Mittal Steel, se han dejado de producir unas 80 mil toneladas de acero líquido, que representan alrededor de 50 millones de dólares en pérdidas económicas para ambas empresas. En tanto que en Viga Trefilados, los daños causados por el movimiento de sus sindicalizados en los primeros seis días de paro, asciende a 30 millones de pesos, esto es, a razón de cinco millones de pesos por cada día de inactividad laboral.
De acuerdo a datos proporcionados por Raúl Martínez Villegas, superintendente de distribución de la Comisión Federal de Electricidad en esta región, mensualmente se factura un promedio de 250 millones de pesos en forma conjunta a Sicartsa y Mittal Steel, por consumo de energía eléctrica, por lo que estimó que las pérdidas para CFE por este conflicto, ascienden a unos 8.5 millones de pesos por cada día que dure el paro de labores, pues no le están consumiendo nada de electricidad.
También se encuentra en esa misma situación Petróleos Mexicanos, que dejará de comercializar una importante cantidad de toneladas de combustóleo, además de los embarques de importación de chatarra, pellet, carbón mineral y, desde luego, el movimiento en los muelles para la carga de producto terminado con destino a varios países.
Por lo que hace el Seguro Social, se conoció que las empresas paralizadas por los obreros afiliados al sindicato minero, estudiaban la posibilidad de suspender el pago de cuotas obrero-patronales por el tiempo que dure el conflicto, o bien, demandar del instituto plazos más largos para enterar esas cuotas.
Similar situación se pretende hacer con la Secretaría de Hacienda en relación a los impuestos que la actividad industrial genera y que por el momento, se dijo, no están dispuestos a cumplir por el conflicto que afrontan, el cual les está representando grandes pérdidas económicas.
Por lo que toca al comercio de la región, el de ayer fue el primer fin de semana que comenzó a resentir los estragos del conflicto, pues no sólo fueron los aproximadamente tres mil obreros sindicalizados los que no pudieron cobrar su salario semanal por el paro que provocaron en las empresas acereras, sino varios miles de trabajadores más con categoría de confianza, eventuales y contratistas, cuyas familias también se han quedado sin el sustento económico para hacer frente a sus necesidades. La Canaco aun no ha dado a conocer en qué porcentaje bajaron las ventas en el comercio organizado el fin de semana.
Asimismo, empleados de confianza de las empresas acereras, sobre todo de Mittal, han mostrado su preocupación por el destino final que vayan a tener, «pues tenemos informes de que los dueños de las fábricas han comenzado a desconectar todo el equipo de radio comunicación y bajado todos los switches, ya no se está consumiendo nada de energía eléctrica, en una palabra sólo están dejando un foco encendido, como cuando uno sale de vacaciones y deja prendido un foco en la casa, para que los ladrones sepan que alguien se quedó a cuidar la casa», fue el comentario de algunos trabajadores de confianza de las acereras.
Esta situación les preocupa demasiado a este tipo de trabajadores acereros, pues temen que, de continuar más días el conflicto, tanto el Grupo Villacero como Mittal Steel, decidan cerrar las plantas para llevarse su infraestructura a otros puntos del país o del extranjero donde no tengan tanto conflicto por parte de obreros sindicalizados, cancelando así miles de fuentes de empleo en la región.
Lo anterior trascendió luego de que José Luis Fuentes Quiroz Pacheco, director de Recursos Humanos de Mittal Steel, se reuniera ayer por la mañana con Luis Sánchez Zúñiga, secretario de Actas, y Juan Delgado Jaimes, secretario del trabajo de la Sección 271, para ver lo relacionado a la rescisión laboral de todos los obreros sindicalizados de esa empresa, quienes incumplieron el sábado por la tarde el ultimátum dado por la empresa, de regresar a laborar.
Ante la negativa de los directivos de que los sindicalizados de Mittal reanuden labores, Quiroz Pacheco les comunicó la decisión del dueño de la empresa, de cerrar definitivamente la planta el próximo martes, si para entonces los seguidores de Napoleón Gómez Urrutia no regresan a laborar.
De esta forma, se estarían perdiendo en el puerto más de mil fuentes de empleo, tomando en cuenta los sindicalizados, empleados de confianza y eventuales que laboran en Mittal, la empresa mayor productora de acero en el país, con capacidad para más de cuatro millones de toneladas de acero y facturación de más de cinco mil millones de dólares al año, por la venta al extranjero de la mayor parte de su producción, un subproducto conocido como planchón.
Fuentes Quiroz comentó a los directivos de la 271, en la reunión «secreta» que sostuvo con ellos, que ya no había condiciones para que la empresa de capital indio y que tiene su sede en Londres, Inglaterra, siguiera sufriendo pérdidas económicas no sólo por la falta de producción, sino porque no estaba entregando a tiempo los pedidos internaciones de planchón que tiene con diferentes clientes, que le estaban provocando también diversas penalizaciones de gran sangría económica para el consorcio, por lo que no les quedaba más que cerrar la planta.
Los dirigentes de la 271 en todo momento se mostraron renuentes para convencer a sus compañeros de levantar el paro, pues éste afirmaron, terminará en el momento mismo en que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del gobierno federal, otorgue la Toma de Nota a Napoleón Gómez Urrutia, para que siga siendo él y no Elías Morales Hernández, el líder nacional minero reconocido oficialmente por la autoridad laboral.
Son ya millonarias las pérdidas económicas que ha arrojado, no sólo a los dueños de las empresas acereras del puerto, el paro de labores iniciado el 2 de abril por obreros sindicalizados afiliados a la sección 271, y el 4 de abril los que pertenecen a la sección 273 de mineros, pues otros de los afectados son los grandes y pequeños proveedores de insumos a esas industrias y el Seguro Social.
En los primeros ocho días de paro en Sicartsa y Mittal Steel, se han dejado de producir unas 80 mil toneladas de acero líquido, que representan alrededor de 50 millones de dólares en pérdidas económicas para ambas empresas. En tanto que en Viga Trefilados, los daños causados por el movimiento de sus sindicalizados en los primeros seis días de paro, asciende a 30 millones de pesos, esto es, a razón de cinco millones de pesos por cada día de inactividad laboral.
De acuerdo a datos proporcionados por Raúl Martínez Villegas, superintendente de distribución de la Comisión Federal de Electricidad en esta región, mensualmente se factura un promedio de 250 millones de pesos en forma conjunta a Sicartsa y Mittal Steel, por consumo de energía eléctrica, por lo que estimó que las pérdidas para CFE por este conflicto, ascienden a unos 8.5 millones de pesos por cada día que dure el paro de labores, pues no le están consumiendo nada de electricidad.
También se encuentra en esa misma situación Petróleos Mexicanos, que dejará de comercializar una importante cantidad de toneladas de combustóleo, además de los embarques de importación de chatarra, pellet, carbón mineral y, desde luego, el movimiento en los muelles para la carga de producto terminado con destino a varios países.
Por lo que hace el Seguro Social, se conoció que las empresas paralizadas por los obreros afiliados al sindicato minero, estudiaban la posibilidad de suspender el pago de cuotas obrero-patronales por el tiempo que dure el conflicto, o bien, demandar del instituto plazos más largos para enterar esas cuotas.
Similar situación se pretende hacer con la Secretaría de Hacienda en relación a los impuestos que la actividad industrial genera y que por el momento, se dijo, no están dispuestos a cumplir por el conflicto que afrontan, el cual les está representando grandes pérdidas económicas.
Por lo que toca al comercio de la región, el de ayer fue el primer fin de semana que comenzó a resentir los estragos del conflicto, pues no sólo fueron los aproximadamente tres mil obreros sindicalizados los que no pudieron cobrar su salario semanal por el paro que provocaron en las empresas acereras, sino varios miles de trabajadores más con categoría de confianza, eventuales y contratistas, cuyas familias también se han quedado sin el sustento económico para hacer frente a sus necesidades. La Canaco aun no ha dado a conocer en qué porcentaje bajaron las ventas en el comercio organizado el fin de semana.
Asimismo, empleados de confianza de las empresas acereras, sobre todo de Mittal, han mostrado su preocupación por el destino final que vayan a tener, «pues tenemos informes de que los dueños de las fábricas han comenzado a desconectar todo el equipo de radio comunicación y bajado todos los switches, ya no se está consumiendo nada de energía eléctrica, en una palabra sólo están dejando un foco encendido, como cuando uno sale de vacaciones y deja prendido un foco en la casa, para que los ladrones sepan que alguien se quedó a cuidar la casa», fue el comentario de algunos trabajadores de confianza de las acereras.
Esta situación les preocupa demasiado a este tipo de trabajadores acereros, pues temen que, de continuar más días el conflicto, tanto el Grupo Villacero como Mittal Steel, decidan cerrar las plantas para llevarse su infraestructura a otros puntos del país o del extranjero donde no tengan tanto conflicto por parte de obreros sindicalizados, cancelando así miles de fuentes de empleo en la región.
Lo anterior trascendió luego de que José Luis Fuentes Quiroz Pacheco, director de Recursos Humanos de Mittal Steel, se reuniera ayer por la mañana con Luis Sánchez Zúñiga, secretario de Actas, y Juan Delgado Jaimes, secretario del trabajo de la Sección 271, para ver lo relacionado a la rescisión laboral de todos los obreros sindicalizados de esa empresa, quienes incumplieron el sábado por la tarde el ultimátum dado por la empresa, de regresar a laborar.
Ante la negativa de los directivos de que los sindicalizados de Mittal reanuden labores, Quiroz Pacheco les comunicó la decisión del dueño de la empresa, de cerrar definitivamente la planta el próximo martes, si para entonces los seguidores de Napoleón Gómez Urrutia no regresan a laborar.
De esta forma, se estarían perdiendo en el puerto más de mil fuentes de empleo, tomando en cuenta los sindicalizados, empleados de confianza y eventuales que laboran en Mittal, la empresa mayor productora de acero en el país, con capacidad para más de cuatro millones de toneladas de acero y facturación de más de cinco mil millones de dólares al año, por la venta al extranjero de la mayor parte de su producción, un subproducto conocido como planchón.
Fuentes Quiroz comentó a los directivos de la 271, en la reunión «secreta» que sostuvo con ellos, que ya no había condiciones para que la empresa de capital indio y que tiene su sede en Londres, Inglaterra, siguiera sufriendo pérdidas económicas no sólo por la falta de producción, sino porque no estaba entregando a tiempo los pedidos internaciones de planchón que tiene con diferentes clientes, que le estaban provocando también diversas penalizaciones de gran sangría económica para el consorcio, por lo que no les quedaba más que cerrar la planta.
Los dirigentes de la 271 en todo momento se mostraron renuentes para convencer a sus compañeros de levantar el paro, pues éste afirmaron, terminará en el momento mismo en que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del gobierno federal, otorgue la Toma de Nota a Napoleón Gómez Urrutia, para que siga siendo él y no Elías Morales Hernández, el líder nacional minero reconocido oficialmente por la autoridad laboral.
Son ya millonarias las pérdidas económicas que ha arrojado, no sólo a los dueños de las empresas acereras del puerto, el paro de labores iniciado el 2 de abril por obreros sindicalizados afiliados a la sección 271, y el 4 de abril los que pertenecen a la sección 273 de mineros, pues otros de los afectados son los grandes y pequeños proveedores de insumos a esas industrias y el Seguro Social.
En los primeros ocho días de paro en Sicartsa y Mittal Steel, se han dejado de producir unas 80 mil toneladas de acero líquido, que representan alrededor de 50 millones de dólares en pérdidas económicas para ambas empresas. En tanto que en Viga Trefilados, los daños causados por el movimiento de sus sindicalizados en los primeros seis días de paro, asciende a 30 millones de pesos, esto es, a razón de cinco millones de pesos por cada día de inactividad laboral.
De acuerdo a datos proporcionados por Raúl Martínez Villegas, superintendente de distribución de la Comisión Federal de Electricidad en esta región, mensualmente se factura un promedio de 250 millones de pesos en forma conjunta a Sicartsa y Mittal Steel, por consumo de energía eléctrica, por lo que estimó que las pérdidas para CFE por este conflicto, ascienden a unos 8.5 millones de pesos por cada día que dure el paro de labores, pues no le están consumiendo nada de electricidad.
También se encuentra en esa misma situación Petróleos Mexicanos, que dejará de comercializar una importante cantidad de toneladas de combustóleo, además de los embarques de importación de chatarra, pellet, carbón mineral y, desde luego, el movimiento en los muelles para la carga de producto terminado con destino a varios países.
Por lo que hace el Seguro Social, se conoció que las empresas paralizadas por los obreros afiliados al sindicato minero, estudiaban la posibilidad de suspender el pago de cuotas obrero-patronales por el tiempo que dure el conflicto, o bien, demandar del instituto plazos más largos para enterar esas cuotas.
Similar situación se pretende hacer con la Secretaría de Hacienda en relación a los impuestos que la actividad industrial genera y que por el momento, se dijo, no están dispuestos a cumplir por el conflicto que afrontan, el cual les está representando grandes pérdidas económicas.
Por lo que toca al comercio de la región, el de ayer fue el primer fin de semana que comenzó a resentir los estragos del conflicto, pues no sólo fueron los aproximadamente tres mil obreros sindicalizados los que no pudieron cobrar su salario semanal por el paro que provocaron en las empresas acereras, sino varios miles de trabajadores más con categoría de confianza, eventuales y contratistas, cuyas familias también se han quedado sin el sustento económico para hacer frente a sus necesidades. La Canaco aun no ha dado a conocer en qué porcentaje bajaron las ventas en el comercio organizado el fin de semana.
Asimismo, empleados de confianza de las empresas acereras, sobre todo de Mittal, han mostrado su preocupación por el destino final que vayan a tener, «pues tenemos informes de que los dueños de las fábricas han comenzado a desconectar todo el equipo de radio comunicación y bajado todos los switches, ya no se está consumiendo nada de energía eléctrica, en una palabra sólo están dejando un foco encendido, como cuando uno sale de vacaciones y deja prendido un foco en la casa, para que los ladrones sepan que alguien se quedó a cuidar la casa», fue el comentario de algunos trabajadores de confianza de las acereras.
Esta situación les preocupa demasiado a este tipo de trabajadores acereros, pues temen que, de continuar más días el conflicto, tanto el Grupo Villacero como Mittal Steel, decidan cerrar las plantas para llevarse su infraestructura a otros puntos del país o del extranjero donde no tengan tanto conflicto por parte de obreros sindicalizados, cancelando así miles de fuentes de empleo en la región.
Lo anterior trascendió luego de que José Luis Fuentes Quiroz Pacheco, director de Recursos Humanos de Mittal Steel, se reuniera ayer por la mañana con Luis Sánchez Zúñiga, secretario de Actas, y Juan Delgado Jaimes, secretario del trabajo de la Sección 271, para ver lo relacionado a la rescisión laboral de todos los obreros sindicalizados de esa empresa, quienes incumplieron el sábado por la tarde el ultimátum dado por la empresa, de regresar a laborar.
Ante la negativa de los directivos de que los sindicalizados de Mittal reanuden labores, Quiroz Pacheco les comunicó la decisión del dueño de la empresa, de cerrar definitivamente la planta el próximo martes, si para entonces los seguidores de Napoleón Gómez Urrutia no regresan a laborar.
De esta forma, se estarían perdiendo en el puerto más de mil fuentes de empleo, tomando en cuenta los sindicalizados, empleados de confianza y eventuales que laboran en Mittal, la empresa mayor productora de acero en el país, con capacidad para más de cuatro millones de toneladas de acero y facturación de más de cinco mil millones de dólares al año, por la venta al extranjero de la mayor parte de su producción, un subproducto conocido como planchón.
Fuentes Quiroz comentó a los directivos de la 271, en la reunión «secreta» que sostuvo con ellos, que ya no había condiciones para que la empresa de capital indio y que tiene su sede en Londres, Inglaterra, siguiera sufriendo pérdidas económicas no sólo por la falta de producción, sino porque no estaba entregando a tiempo los pedidos internaciones de planchón que tiene con diferentes clientes, que le estaban provocando también diversas penalizaciones de gran sangría económica para el consorcio, por lo que no les quedaba más que cerrar la planta.
Los dirigentes de la 271 en todo momento se mostraron renuentes para convencer a sus compañeros de levantar el paro, pues éste afirmaron, terminará en el momento mismo en que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del gobierno federal, otorgue la Toma de Nota a Napoleón Gómez Urrutia, para que siga siendo él y no Elías Morales Hernández, el líder nacional minero reconocido oficialmente por la autoridad laboral.
Son ya millonarias las pérdidas económicas que ha arrojado, no sólo a los dueños de las empresas acereras del puerto, el paro de labores iniciado el 2 de abril por obreros sindicalizados afiliados a la sección 271, y el 4 de abril los que pertenecen a la sección 273 de mineros, pues otros de los afectados son los grandes y pequeños proveedores de insumos a esas industrias y el Seguro Social.
En los primeros ocho días de paro en Sicartsa y Mittal Steel, se han dejado de producir unas 80 mil toneladas de acero líquido, que representan alrededor de 50 millones de dólares en pérdidas económicas para ambas empresas. En tanto que en Viga Trefilados, los daños causados por el movimiento de sus sindicalizados en los primeros seis días de paro, asciende a 30 millones de pesos, esto es, a razón de cinco millones de pesos por cada día de inactividad laboral.
De acuerdo a datos proporcionados por Raúl Martínez Villegas, superintendente de distribución de la Comisión Federal de Electricidad en esta región, mensualmente se factura un promedio de 250 millones de pesos en forma conjunta a Sicartsa y Mittal Steel, por consumo de energía eléctrica, por lo que estimó que las pérdidas para CFE por este conflicto, ascienden a unos 8.5 millones de pesos por cada día que dure el paro de labores, pues no le están consumiendo nada de electricidad.
También se encuentra en esa misma situación Petróleos Mexicanos, que dejará de comercializar una importante cantidad de toneladas de combustóleo, además de los embarques de importación de chatarra, pellet, carbón mineral y, desde luego, el movimiento en los muelles para la carga de producto terminado con destino a varios países.
Por lo que hace el Seguro Social, se conoció que las empresas paralizadas por los obreros afiliados al sindicato minero, estudiaban la posibilidad de suspender el pago de cuotas obrero-patronales por el tiempo que dure el conflicto, o bien, demandar del instituto plazos más largos para enterar esas cuotas.
Similar situación se pretende hacer con la Secretaría de Hacienda en relación a los impuestos que la actividad industrial genera y que por el momento, se dijo, no están dispuestos a cumplir por el conflicto que afrontan, el cual les está representando grandes pérdidas económicas.
Por lo que toca al comercio de la región, el de ayer fue el primer fin de semana que comenzó a resentir los estragos del conflicto, pues no sólo fueron los aproximadamente tres mil obreros sindicalizados los que no pudieron cobrar su salario semanal por el paro que provocaron en las empresas acereras, sino varios miles de trabajadores más con categoría de confianza, eventuales y contratistas, cuyas familias también se han quedado sin el sustento económico para hacer frente a sus necesidades. La Canaco aun no ha dado a conocer en qué porcentaje bajaron las ventas en el comercio organizado el fin de semana.
Asimismo, empleados de confianza de las empresas acereras, sobre todo de Mittal, han mostrado su preocupación por el destino final que vayan a tener, «pues tenemos informes de que los dueños de las fábricas han comenzado a desconectar todo el equipo de radio comunicación y bajado todos los switches, ya no se está consumiendo nada de energía eléctrica, en una palabra sólo están dejando un foco encendido, como cuando uno sale de vacaciones y deja prendido un foco en la casa, para que los ladrones sepan que alguien se quedó a cuidar la casa», fue el comentario de algunos trabajadores de confianza de las acereras.
Esta situación les preocupa demasiado a este tipo de trabajadores acereros, pues temen que, de continuar más días el conflicto, tanto el Grupo Villacero como Mittal Steel, decidan cerrar las plantas para llevarse su infraestructura a otros puntos del país o del extranjero donde no tengan tanto conflicto por parte de obreros sindicalizados, cancelando así miles de fuentes de empleo en la región.
Lo anterior trascendió luego de que José Luis Fuentes Quiroz Pacheco, director de Recursos Humanos de Mittal Steel, se reuniera ayer por la mañana con Luis Sánchez Zúñiga, secretario de Actas, y Juan Delgado Jaimes, secretario del trabajo de la Sección 271, para ver lo relacionado a la rescisión laboral de todos los obreros sindicalizados de esa empresa, quienes incumplieron el sábado por la tarde el ultimátum dado por la empresa, de regresar a laborar.
Ante la negativa de los directivos de que los sindicalizados de Mittal reanuden labores, Quiroz Pacheco les comunicó la decisión del dueño de la empresa, de cerrar definitivamente la planta el próximo martes, si para entonces los seguidores de Napoleón Gómez Urrutia no regresan a laborar.
De esta forma, se estarían perdiendo en el puerto más de mil fuentes de empleo, tomando en cuenta los sindicalizados, empleados de confianza y eventuales que laboran en Mittal, la empresa mayor productora de acero en el país, con capacidad para más de cuatro millones de toneladas de acero y facturación de más de cinco mil millones de dólares al año, por la venta al extranjero de la mayor parte de su producción, un subproducto conocido como planchón.
Fuentes Quiroz comentó a los directivos de la 271, en la reunión «secreta» que sostuvo con ellos, que ya no había condiciones para que la empresa de capital indio y que tiene su sede en Londres, Inglaterra, siguiera sufriendo pérdidas económicas no sólo por la falta de producción, sino porque no estaba entregando a tiempo los pedidos internaciones de planchón que tiene con diferentes clientes, que le estaban provocando también diversas penalizaciones de gran sangría económica para el consorcio, por lo que no les quedaba más que cerrar la planta.
Los dirigentes de la 271 en todo momento se mostraron renuentes para convencer a sus compañeros de levantar el paro, pues éste afirmaron, terminará en el momento mismo en que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del gobierno federal, otorgue la Toma de Nota a Napoleón Gómez Urrutia, para que siga siendo él y no Elías Morales Hernández, el líder nacional minero reconocido oficialmente por la autoridad laboral.
Son ya millonarias las pérdidas económicas que ha arrojado, no sólo a los dueños de las empresas acereras del puerto, el paro de labores iniciado el 2 de abril por obreros sindicalizados afiliados a la sección 271, y el 4 de abril los que pertenecen a la sección 273 de mineros, pues otros de los afectados son los grandes y pequeños proveedores de insumos a esas industrias y el Seguro Social.
En los primeros ocho días de paro en Sicartsa y Mittal Steel, se han dejado de producir unas 80 mil toneladas de acero líquido, que representan alrededor de 50 millones de dólares en pérdidas económicas para ambas empresas. En tanto que en Viga Trefilados, los daños causados por el movimiento de sus sindicalizados en los primeros seis días de paro, asciende a 30 millones de pesos, esto es, a razón de cinco millones de pesos por cada día de inactividad laboral.
De acuerdo a datos proporcionados por Raúl Martínez Villegas, superintendente de distribución de la Comisión Federal de Electricidad en esta región, mensualmente se factura un promedio de 250 millones de pesos en forma conjunta a Sicartsa y Mittal Steel, por consumo de energía eléctrica, por lo que estimó que las pérdidas para CFE por este conflicto, ascienden a unos 8.5 millones de pesos por cada día que dure el paro de labores, pues no le están consumiendo nada de electricidad.
También se encuentra en esa misma situación Petróleos Mexicanos, que dejará de comercializar una importante cantidad de toneladas de combustóleo, además de los embarques de importación de chatarra, pellet, carbón mineral y, desde luego, el movimiento en los muelles para la carga de producto terminado con destino a varios países.
Por lo que hace el Seguro Social, se conoció que las empresas paralizadas por los obreros afiliados al sindicato minero, estudiaban la posibilidad de suspender el pago de cuotas obrero-patronales por el tiempo que dure el conflicto, o bien, demandar del instituto plazos más largos para enterar esas cuotas.
Similar situación se pretende hacer con la Secretaría de Hacienda en relación a los impuestos que la actividad industrial genera y que por el momento, se dijo, no están dispuestos a cumplir por el conflicto que afrontan, el cual les está representando grandes pérdidas económicas.
Por lo que toca al comercio de la región, el de ayer fue el primer fin de semana que comenzó a resentir los estragos del conflicto, pues no sólo fueron los aproximadamente tres mil obreros sindicalizados los que no pudieron cobrar su salario semanal por el paro que provocaron en las empresas acereras, sino varios miles de trabajadores más con categoría de confianza, eventuales y contratistas, cuyas familias también se han quedado sin el sustento económico para hacer frente a sus necesidades. La Canaco aun no ha dado a conocer en qué porcentaje bajaron las ventas en el comercio organizado el fin de semana.
Asimismo, empleados de confianza de las empresas acereras, sobre todo de Mittal, han mostrado su preocupación por el destino final que vayan a tener, «pues tenemos informes de que los dueños de las fábricas han comenzado a desconectar todo el equipo de radio comunicación y bajado todos los switches, ya no se está consumiendo nada de energía eléctrica, en una palabra sólo están dejando un foco encendido, como cuando uno sale de vacaciones y deja prendido un foco en la casa, para que los ladrones sepan que alguien se quedó a cuidar la casa», fue el comentario de algunos trabajadores de confianza de las acereras.
Esta situación les preocupa demasiado a este tipo de trabajadores acereros, pues temen que, de continuar más días el conflicto, tanto el Grupo Villacero como Mittal Steel, decidan cerrar las plantas para llevarse su infraestructura a otros puntos del país o del extranjero donde no tengan tanto conflicto por parte de obreros sindicalizados, cancelando así miles de fuentes de empleo en la región.
Lo anterior trascendió luego de que José Luis Fuentes Quiroz Pacheco, director de Recursos Humanos de Mittal Steel, se reuniera ayer por la mañana con Luis Sánchez Zúñiga, secretario de Actas, y Juan Delgado Jaimes, secretario del trabajo de la Sección 271, para ver lo relacionado a la rescisión laboral de todos los obreros sindicalizados de esa empresa, quienes incumplieron el sábado por la tarde el ultimátum dado por la empresa, de regresar a laborar.
Ante la negativa de los directivos de que los sindicalizados de Mittal reanuden labores, Quiroz Pacheco les comunicó la decisión del dueño de la empresa, de cerrar definitivamente la planta el próximo martes, si para entonces los seguidores de Napoleón Gómez Urrutia no regresan a laborar.
De esta forma, se estarían perdiendo en el puerto más de mil fuentes de empleo, tomando en cuenta los sindicalizados, empleados de confianza y eventuales que laboran en Mittal, la empresa mayor productora de acero en el país, con capacidad para más de cuatro millones de toneladas de acero y facturación de más de cinco mil millones de dólares al año, por la venta al extranjero de la mayor parte de su producción, un subproducto conocido como planchón.
Fuentes Quiroz comentó a los directivos de la 271, en la reunión «secreta» que sostuvo con ellos, que ya no había condiciones para que la empresa de capital indio y que tiene su sede en Londres, Inglaterra, siguiera sufriendo pérdidas económicas no sólo por la falta de producción, sino porque no estaba entregando a tiempo los pedidos internaciones de planchón que tiene con diferentes clientes, que le estaban provocando también diversas penalizaciones de gran sangría económica para el consorcio, por lo que no les quedaba más que cerrar la planta.
Los dirigentes de la 271 en todo momento se mostraron renuentes para convencer a sus compañeros de levantar el paro, pues éste afirmaron, terminará en el momento mismo en que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del gobierno federal, otorgue la Toma de Nota a Napoleón Gómez Urrutia, para que siga siendo él y no Elías Morales Hernández, el líder nacional minero reconocido oficialmente por la autoridad laboral.
Son ya millonarias las pérdidas económicas que ha arrojado, no sólo a los dueños de las empresas acereras del puerto, el paro de labores iniciado el 2 de abril por obreros sindicalizados afiliados a la sección 271, y el 4 de abril los que pertenecen a la sección 273 de mineros, pues otros de los afectados son los grandes y pequeños proveedores de insumos a esas industrias y el Seguro Social.
En los primeros ocho días de paro en Sicartsa y Mittal Steel, se han dejado de producir unas 80 mil toneladas de acero líquido, que representan alrededor de 50 millones de dólares en pérdidas económicas para ambas empresas. En tanto que en Viga Trefilados, los daños causados por el movimiento de sus sindicalizados en los primeros seis días de paro, asciende a 30 millones de pesos, esto es, a razón de cinco millones de pesos por cada día de inactividad laboral.
De acuerdo a datos proporcionados por Raúl Martínez Villegas, superintendente de distribución de la Comisión Federal de Electricidad en esta región, mensualmente se factura un promedio de 250 millones de pesos en forma conjunta a Sicartsa y Mittal Steel, por consumo de energía eléctrica, por lo que estimó que las pérdidas para CFE por este conflicto, ascienden a unos 8.5 millones de pesos por cada día que dure el paro de labores, pues no le están consumiendo nada de electricidad.
También se encuentra en esa misma situación Petróleos Mexicanos, que dejará de comercializar una importante cantidad de toneladas de combustóleo, además de los embarques de importación de chatarra, pellet, carbón mineral y, desde luego, el movimiento en los muelles para la carga de producto terminado con destino a varios países.
Por lo que hace el Seguro Social, se conoció que las empresas paralizadas por los obreros afiliados al sindicato minero, estudiaban la posibilidad de suspender el pago de cuotas obrero-patronales por el tiempo que dure el conflicto, o bien, demandar del instituto plazos más largos para enterar esas cuotas.
Similar situación se pretende hacer con la Secretaría de Hacienda en relación a los impuestos que la actividad industrial genera y que por el momento, se dijo, no están dispuestos a cumplir por el conflicto que afrontan, el cual les está representando grandes pérdidas económicas.
Por lo que toca al comercio de la región, el de ayer fue el primer fin de semana que comenzó a resentir los estragos del conflicto, pues no sólo fueron los aproximadamente tres mil obreros sindicalizados los que no pudieron cobrar su salario semanal por el paro que provocaron en las empresas acereras, sino varios miles de trabajadores más con categoría de confianza, eventuales y contratistas, cuyas familias también se han quedado sin el sustento económico para hacer frente a sus necesidades. La Canaco aun no ha dado a conocer en qué porcentaje bajaron las ventas en el comercio organizado el fin de semana.
Asimismo, empleados de confianza de las empresas acereras, sobre todo de Mittal, han mostrado su preocupación por el destino final que vayan a tener, «pues tenemos informes de que los dueños de las fábricas han comenzado a desconectar todo el equipo de radio comunicación y bajado todos los switches, ya no se está consumiendo nada de energía eléctrica, en una palabra sólo están dejando un foco encendido, como cuando uno sale de vacaciones y deja prendido un foco en la casa, para que los ladrones sepan que alguien se quedó a cuidar la casa», fue el comentario de algunos trabajadores de confianza de las acereras.
Esta situación les preocupa demasiado a este tipo de trabajadores acereros, pues temen que, de continuar más días el conflicto, tanto el Grupo Villacero como Mittal Steel, decidan cerrar las plantas para llevarse su infraestructura a otros puntos del país o del extranjero donde no tengan tanto conflicto por parte de obreros sindicalizados, cancelando así miles de fuentes de empleo en la región.