El gobernador de Texas, Rick Perry, ya ha declarado el Estado como área de desastre y las autoridades de las ciudades de Galveston y Houston ya han ordenado evacuaciones obligatorias en algunas zonas.
En Galveston está vigente la evacuación de los lugares más vulnerables, como los hospitales o las residencias de ancianos.
En Houston, su alcalde, Bill White, ordenó la evacuación obligatoria de algunas zonas del condado de Harris donde se ubica la ciudad, y para todos los que viven en casas móviles a partir de mañana, jueves.
“Pedimos a todos los residentes del área de Houston que empiecen a hacer planes de evacuación”, dijo White en rueda de prensa en la que solicitó la salida voluntaria de la población de las zonas más bajas y más propensas a inundaciones.
En Houston, en cuya área metropolitana residen cerca de 4 millones de personas, las autoridades han recomendado el cierre de colegios y empresas mañana, jueves, y el viernes.
Según el boletín de las 15.00 GMT del Centro Nacional de Huracanes (CNH), con sede en Miami, el ojo del ciclón se encontraba cerca de la latitud 24,3 norte y longitud 85,9 oeste, a 418 kilómetros al oeste de Cayo Hueso, en Florida, y a 1,215 kilómetros al este-sureste de Corpus Christi, Texas.
“Rita es un huracán extremadamente peligroso de categoría 4 en la escala de intensidad Saffir-Simpson (de un máximo de cinco). Se espera un fortalecimiento adicional y podría alcanzar la categoría 5 en el centro del Golfo de México”, alertó el CNH.