El pronóstico es del director de la Administración Portuaria Integral, Juan Paratore García, quien recordó que, con todo y que Hutchison Ports perdiera la licitación en 2003, cuando 15 aspirantes pujaron por la operación de la entonces inactiva terminal, ganada finamente por COT, la audacia de la operadora asiática le llevó a proponer una fusión con la parte ganadora, adquiriendo HP 51% de las acciones, pero sabiendo la agresividad financiera de los chinos, seguramente terminarán por adquirir 49% de las acciones en poder de la empresa mexicana, asumió Paratore García.
Hutchison Ports Holding es el mayor grupo portuario mundial, con operaciones en 19 países y 40 terminales, propiedad de Li Ka Shing, el hombre más rico del continente asiático cuyo emporio ha tenido trascendencia en los puertos mexicanos de Veracruz, Manzanillo, Ensenada y Lázaro Cárdenas, con más de 2,000 trabajadores, convirtiéndose en la principal operadora del país.
El empuje de la empresa, cuya sede está en Hong Kong, y la dinámica que ha aportado el puerto michoacano con la puesta en marcha de la autopista y la consolidación de un corredor ferroviario al litoral del Atlántico de Estados Unidos, ha propiciado que los planes de crecimiento e inversión de Hutchison Ports a siete años se reduzca a dos, entre ellos la construcción ya avanzada de la nueva megaterminal de contendores, ante el incremento de carga en cajas, que se estima rebasará los 200,000 en 2006 , pero el objetivo es tener una terminal con capacidad de mover 2 millones de teus al año.
Habría de asegurar que Jorge Lecona, director de Hutchison Ports en México, asume que el puerto michoacano será una de las terminales que desfogará la carga que ya no puede moverse en Long Beach, Estados Unidos, donde al año se mueven de 8 a 9 millones de contenedores y anualmente tiene un incremento de 15% promedio, de tal forma que en un periodo de cinco años ya no habrá más espacio allá.