Este bajo índice comparado con el nivel de producción nacional se deriva principalmente de la falta de cultura en el país para separar los residuos y también por problemas de los clientes de la industria, pues muchas veces se mezclan materias primas que son difíciles de descomponer de manera económica para su reciclaje, explicó del Cueto.
Por ello, como primer paso, es necesario desarrollar campañas a nivel nacional para la separación y manejo de residuos a través de medios de comunicación y en colaboración con las autoridades pertinentes, señaló.
Otro factor determinante es “convencer a los fabricantes de envases de nuestros clientes para que diseñen productos que sean fáciles de reciclar después de ser utilizados. Por ejemplo, para obtener que los alimentos tengan mayor vida en el anaquel, los empaques son fabricados con diferentes plásticos y en ocasiones no son compatibles entre sí, pues tienen diferentes puntos para ser fundidos, lo que impide su reciclaje de manera homogénea”.
Adicional a esta situación, el cobro de impuestos por comprar envases recolectados o separados por pepenadores o en pequeños comercios también inhibe las inversiones en materia de reciclaje, lo que se ve reflejado en el número de empresas dedicadas a estos procesos, pues apenas son 150 las que existen en el país, las cuales podrían duplicarse de contar con una mayor certeza para la compra de materiales ya utilizados.
Precisamente con el objetivo de intercambiar puntos de vista y fomentar los hábitos y procesos a favor del reciclado de productos de plástico, esta semana del 12 al 15 de marzo se celebrará la Exposición Intenacional “Plast Imagen” en el Centro Banamex, donde se realizarán más de 37 conferencias y tres mesas de análisis.