MÉXICO, DF, a 16 de febrero de 2010.- En el estudio, Connecting to Compete 2010: Trade Logistics in the Global Economy (Vincularse para competir 2010: La logística del comercio internacional en la economía mundial), realizado por el Banco Mundial, México ocupa la posición número 50 de entre 155 naciones, mientras que Alemania encabeza la lista, seguido de Singapur, Suecia y Holanda.
En la primera versión de este estudio, el cual sirve como base del Índice de Competitividad en Logística (LPI, por sus siglas en inglés), México obtuvo el lugar 56, mientras que Singapur ocupaba el primer sitio, y le seguían Holanda, Alemania y Suecia.
En esta ocasión, y en cuanto al desempeño de los países en desarrollo por región, Brasil tiene el mejor desempeño, al ubicarse en el lugar 41, seguido por Argentina y Chile. En el cuarto sitio se ubica nuestro país. Cabe destacar que en 2007, Brasil tenía la posición 61.
Dicho documento se basa en una encuesta mundial sobre los aspectos logísticos del comercio, hecha a transportistas internacionales y empresas de transporte para envíos urgentes. El análisis tomó ciertos criterios a considerar como: eficiencia en el proceso de despacho de aduana, calidad del comercio y el transporte relacionados con la infraestructura, facilidad de organizar los traslados a precios competitivos, competencia y calidad de los servicios de logística, capacidad de seguimiento y rastreo de envíos y frecuencia con que los envíos llegan al destinatario en el tiempo programado o previsto.
De acuerdo con estos indicadores, destaca que las economías de ingreso alto registran las mejores clasificaciones en el ámbito logístico, y en la mayoría de los casos ocupan puestos importantes en las cadenas de suministro a nivel local e internacional. En contraste, casi todos los países con las clasificaciones más bajas pertenecen a los grupos de ingreso bajo y muy bajo.
Aunque el estudio permite establecer que existe una marcada “brecha logística” entre los países ricos y la mayoría de los países en desarrollo, se señala que también se observan tendencias positivas en algunas esferas que son fundamentales para el desempeño logístico y el comercio, entre ellas la modernización de las aduanas, el uso de tecnología de la información y el desarrollo de servicios privados de logística.