Fuente: Excélsior
MÉXICO, DF, 28 de abril, 2008. – De aprobarse la fusión entre las aeolíneas Delta y Northwest, conformarían en 2009 la compañía más grande del mundo.
El anuncio del acuerdo entre ambas líneas aéreas estadunidenses se da en un contexto en el cual el alto costo de la turbosina ha puesto en entre dicho no sólo su subsistencia, sino la de todas sus competidoras a escala internacional y local.
El director comercial de Delta Air Lines para México, Alberto Porragas, confirma si la intención de obtener más mercado con los planes que se esperan estén concretados antes de que finalice 2008.
“El objetivo (de la fusión) es ganar en competitividad y reducir el efecto negativo de los elevados costes del combustible. La fusión nos ayudará a enfrentar la adversidad producida por la turbosina en los cielos”, dijo.
En entrevista con Excélsior, el ejecutivo afirma que Delta no es la única aerolínea perjudicada por el alto costo del combustible.
“La industria está siendo impactada como nunca antes por un nivel histórico en el precio del petróleo, que ha llegado hasta los 120 dólares por barril, es decir, que del verano del año pasado hasta la fecha se ha incrementado en más de 70%”, comentó.
Y es que en el caso específico de Delta Air Lines, los costos por turbosina se elevaron de tal manera que la empresa reportó una pérdida por 585 millones de dólares en el primer trimestre de 2008.
Ante ello, hace unas semanas la que actualmente es la tercer aerolínea más grande de Estados Unidos anunció un programa de retiro voluntario para sus empleados en aquel país, con el fin de recortar costos administrativos.
“De esta manera se tiene calculado reducir unos dos mil trabajadores, pero sólo allá. En México no tenemos planes de reducción de personal”, asegura Porragas.
Delta, a decir del director comercial, se ha esforzado por ser más eficiente en cada una de sus operaciones para disminuir los costos de las mismas, sin sacrificar el servicio que ofrece a sus clientes a bordo de sus aeronaves.
“Por ejemplo, una de las acciones que hemos implementado para gastar menos es pintar los aviones con sólo dos colores, lo que nos ayuda a ahorrar pintura e incluso hace que el avión se haga menos pesado y consuma menos combustible. Esto no impacta la calidad del servicio pero hace que cada uno de los aviones nos produzca un ahorro. Tenemos que seguir siendo creativos para no perder”, comenta el representante de Delta.
No obstante, Alberto Porragas dice que los ejecutivos de Delta y Northwest “confiamos en que esta fusión creará una aerolínea fuerte con el tamaño, escala y presencia mundial que le permitirá competir y ganar en el mercado global”.
Uno los beneficios inmediatos que traería consigo dicha unión será la oferta de vuelos desde y hacia todo el mundo manejados por una sola aerolínea, ya que Northwest tiene un liderazgo en operaciones desde Estados Unidos hacia Canadá y Asia, mientras que Delta Airlines impera en los mercados de Europa, Latinoamérica, el Caribe y África.
“Nos complementaremos para ofrecer la mejor conectividad a nuestros clientes (…) Serviremos a más comunidades pequeñas en Estados Unidos que ninguna otra aerolínea, y los conectaremos a más destinos internacionales”, recalca Alberto Porrogas.
El mismo beneficio aplicará para los clientes de Delta en México, ya que a través de los aeropuertos estadunidenses donde mantiene operaciones, podrá conectarlos con los destinos que actualmente ofrecen Delta y Northwest.
Asimismo, “la combinación entre la eficiencia de Northwest en el manejo del equipaje y el récord de puntualidad de Delta Airlines traerá consigo más ventajas para los usuarios en comparación con el resto de las aerolíneas”, sentencia el directivo.
De ser aceptada la fusión, la nueva aerolínea conservaría el nombre de Delta y tendría sus oficinas generales en Atlanta.
Su presidente seguiría siendo Richard Anderson. Además, operaría en 390 destinos en todo el mundo a través de 800 aviones y daría empleo a más de 75 mil personas con la fusión.
Mientras tanto, se sabe que ambas aerolíneas anotaron pérdidas combinadas de más de 10 mil millones de dólares durante el primer trimestre, debido a cargos extraordinarios y al elevado coste de la energía. Según el director comercial de la firma en México, además de más mercado buscarán frenar gastos extraordinarios.