Pese a la desaceleración estadounidense, la economía mexicana podría crecer hasta 4% durante el año que inicia, gracias al dinamismo del consumo interno, de acuerdo con el consenso de analistas encuestados por EL UNIVERSAL.
Alfredo Coutiño, economista senior para América Latina de Moody’s, explicó que aunque el país sí resentirá el efecto de la desaceleración estadounidense, por el lado del sector manufacturero y el monto de remesas que recibirá el país, el motor de crecimiento seguirá siendo la demanda al interior del país.
“Un mercado interno fortalecido, la inversión pública en infraestructura anunciada, la flexibilidad y mejores condiciones en el costo de los créditos bancarios, son los elementos que apoyarán el crecimiento de la economía de México en 2008”, dijo.
Además, el impulso que recibirá el sector de la construcción, el cual es altamente intensivo en mano de obra, continuará y se expandirá en el año, lo que apoyará el empleo con mejores ingresos en el país, expresó. En consecuencia, el escenario es en general positivo, pues la absorción interna permitirá compensar el efecto negativo del exterior.
Las autoridades finalmente están usando la política económica de forma contracíclica, indicó Coutiño.
En lo que respecta a la inflación en México, la consultoría Merrill Lynch pronostica que, si bien los altos precios de las mercancías se mantienen cerca del techo de la meta, de 4%, la tendencia será de reducción gradual de las presiones en los precios en 2008.
A este respecto, el promedio estimado en la encuesta de EL UNIVERSAL indica que la inflación ascenderá a 3.8% al cierre de 2008, en tanto que el indicador subyacente será de 3.6%.
En este sentido, Luis A. Flores Sánchez, analista senior de IXE Casa de Bolsa, destacó que el Banco de México (Banxico) previsiblemente no realizaría modificaciones en la política monetaria interna en 2008, debido a que el instituto central amplió el rango de fluctuación de la inflación para establecerlo entre 4.0% y 4.5%.
Aunque destacó que hay dos elementos que podrían motivar a un mayor endurecimiento de la política monetaria: que la expectativa de inflación de 2008 supere 4% y que los salarios se sitúen encima de 5%.
Por su parte, Gerardo Cruz, presidente de estudios económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo que en 2008 la tasa de interés doméstica no presentará grandes cambios, es decir, el fondeo diario se mantendría sobre 7.50%. Sin embargo, en el primer semestre de 2008 podría existir un repunte por la expectativa de fuertes presiones inflacionarias, derivadas de las alzas esperadas en la gasolina, salarios y transporte público.
Agregó que el tipo de cambio peso-dólar mostrará cotizaciones estables, por lo que se esperaría un precio promedio de alrededor de 11.15 pesos, no obstante la perspectiva de un menor crecimiento económico de Estados Unidos, cuyo crecimiento se pronostica en 1.5%.
Según los analistas económicos, los retos que México enfrenta son: generar más de un millón de empleos por año, por lo que se requerirá continuar con el proceso de reformas como la que permita una mayor participación de las empresas en el sector energético nacional.
“Se busca que el estado no pierda la rectoría, pero que permita acelerar la reinversión y modernizar a Pemex, de tal forma que los costos de producción se reduzcan” expuso.
Urgió a seguir con la desregulación y atraer inversiones.
Pese a la desaceleración estadounidense, la economía mexicana podría crecer hasta 4% durante el año que inicia, gracias al dinamismo del consumo interno, de acuerdo con el consenso de analistas encuestados por EL UNIVERSAL.
Alfredo Coutiño, economista senior para América Latina de Moody’s, explicó que aunque el país sí resentirá el efecto de la desaceleración estadounidense, por el lado del sector manufacturero y el monto de remesas que recibirá el país, el motor de crecimiento seguirá siendo la demanda al interior del país.
“Un mercado interno fortalecido, la inversión pública en infraestructura anunciada, la flexibilidad y mejores condiciones en el costo de los créditos bancarios, son los elementos que apoyarán el crecimiento de la economía de México en 2008”, dijo.
Además, el impulso que recibirá el sector de la construcción, el cual es altamente intensivo en mano de obra, continuará y se expandirá en el año, lo que apoyará el empleo con mejores ingresos en el país, expresó. En consecuencia, el escenario es en general positivo, pues la absorción interna permitirá compensar el efecto negativo del exterior.
Las autoridades finalmente están usando la política económica de forma contracíclica, indicó Coutiño.
En lo que respecta a la inflación en México, la consultoría Merrill Lynch pronostica que, si bien los altos precios de las mercancías se mantienen cerca del techo de la meta, de 4%, la tendencia será de reducción gradual de las presiones en los precios en 2008.
A este respecto, el promedio estimado en la encuesta de EL UNIVERSAL indica que la inflación ascenderá a 3.8% al cierre de 2008, en tanto que el indicador subyacente será de 3.6%.
En este sentido, Luis A. Flores Sánchez, analista senior de IXE Casa de Bolsa, destacó que el Banco de México (Banxico) previsiblemente no realizaría modificaciones en la política monetaria interna en 2008, debido a que el instituto central amplió el rango de fluctuación de la inflación para establecerlo entre 4.0% y 4.5%.
Aunque destacó que hay dos elementos que podrían motivar a un mayor endurecimiento de la política monetaria: que la expectativa de inflación de 2008 supere 4% y que los salarios se sitúen encima de 5%.
Por su parte, Gerardo Cruz, presidente de estudios económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo que en 2008 la tasa de interés doméstica no presentará grandes cambios, es decir, el fondeo diario se mantendría sobre 7.50%. Sin embargo, en el primer semestre de 2008 podría existir un repunte por la expectativa de fuertes presiones inflacionarias, derivadas de las alzas esperadas en la gasolina, salarios y transporte público.
Agregó que el tipo de cambio peso-dólar mostrará cotizaciones estables, por lo que se esperaría un precio promedio de alrededor de 11.15 pesos, no obstante la perspectiva de un menor crecimiento económico de Estados Unidos, cuyo crecimiento se pronostica en 1.5%.
Según los analistas económicos, los retos que México enfrenta son: generar más de un millón de empleos por año, por lo que se requerirá continuar con el proceso de reformas como la que permita una mayor participación de las empresas en el sector energético nacional.
“Se busca que el estado no pierda la rectoría, pero que permita acelerar la reinversión y modernizar a Pemex, de tal forma que los costos de producción se reduzcan” expuso.
Urgió a seguir con la desregulación y atraer inversiones.
Pese a la desaceleración estadounidense, la economía mexicana podría crecer hasta 4% durante el año que inicia, gracias al dinamismo del consumo interno, de acuerdo con el consenso de analistas encuestados por EL UNIVERSAL.
Alfredo Coutiño, economista senior para América Latina de Moody’s, explicó que aunque el país sí resentirá el efecto de la desaceleración estadounidense, por el lado del sector manufacturero y el monto de remesas que recibirá el país, el motor de crecimiento seguirá siendo la demanda al interior del país.
“Un mercado interno fortalecido, la inversión pública en infraestructura anunciada, la flexibilidad y mejores condiciones en el costo de los créditos bancarios, son los elementos que apoyarán el crecimiento de la economía de México en 2008”, dijo.
Además, el impulso que recibirá el sector de la construcción, el cual es altamente intensivo en mano de obra, continuará y se expandirá en el año, lo que apoyará el empleo con mejores ingresos en el país, expresó. En consecuencia, el escenario es en general positivo, pues la absorción interna permitirá compensar el efecto negativo del exterior.
Las autoridades finalmente están usando la política económica de forma contracíclica, indicó Coutiño.
En lo que respecta a la inflación en México, la consultoría Merrill Lynch pronostica que, si bien los altos precios de las mercancías se mantienen cerca del techo de la meta, de 4%, la tendencia será de reducción gradual de las presiones en los precios en 2008.
A este respecto, el promedio estimado en la encuesta de EL UNIVERSAL indica que la inflación ascenderá a 3.8% al cierre de 2008, en tanto que el indicador subyacente será de 3.6%.
En este sentido, Luis A. Flores Sánchez, analista senior de IXE Casa de Bolsa, destacó que el Banco de México (Banxico) previsiblemente no realizaría modificaciones en la política monetaria interna en 2008, debido a que el instituto central amplió el rango de fluctuación de la inflación para establecerlo entre 4.0% y 4.5%.
Aunque destacó que hay dos elementos que podrían motivar a un mayor endurecimiento de la política monetaria: que la expectativa de inflación de 2008 supere 4% y que los salarios se sitúen encima de 5%.
Por su parte, Gerardo Cruz, presidente de estudios económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo que en 2008 la tasa de interés doméstica no presentará grandes cambios, es decir, el fondeo diario se mantendría sobre 7.50%. Sin embargo, en el primer semestre de 2008 podría existir un repunte por la expectativa de fuertes presiones inflacionarias, derivadas de las alzas esperadas en la gasolina, salarios y transporte público.
Agregó que el tipo de cambio peso-dólar mostrará cotizaciones estables, por lo que se esperaría un precio promedio de alrededor de 11.15 pesos, no obstante la perspectiva de un menor crecimiento económico de Estados Unidos, cuyo crecimiento se pronostica en 1.5%.
Según los analistas económicos, los retos que México enfrenta son: generar más de un millón de empleos por año, por lo que se requerirá continuar con el proceso de reformas como la que permita una mayor participación de las empresas en el sector energético nacional.
“Se busca que el estado no pierda la rectoría, pero que permita acelerar la reinversión y modernizar a Pemex, de tal forma que los costos de producción se reduzcan” expuso.
Urgió a seguir con la desregulación y atraer inversiones.
Pese a la desaceleración estadounidense, la economía mexicana podría crecer hasta 4% durante el año que inicia, gracias al dinamismo del consumo interno, de acuerdo con el consenso de analistas encuestados por EL UNIVERSAL.
Alfredo Coutiño, economista senior para América Latina de Moody’s, explicó que aunque el país sí resentirá el efecto de la desaceleración estadounidense, por el lado del sector manufacturero y el monto de remesas que recibirá el país, el motor de crecimiento seguirá siendo la demanda al interior del país.
“Un mercado interno fortalecido, la inversión pública en infraestructura anunciada, la flexibilidad y mejores condiciones en el costo de los créditos bancarios, son los elementos que apoyarán el crecimiento de la economía de México en 2008”, dijo.
Además, el impulso que recibirá el sector de la construcción, el cual es altamente intensivo en mano de obra, continuará y se expandirá en el año, lo que apoyará el empleo con mejores ingresos en el país, expresó. En consecuencia, el escenario es en general positivo, pues la absorción interna permitirá compensar el efecto negativo del exterior.
Las autoridades finalmente están usando la política económica de forma contracíclica, indicó Coutiño.
En lo que respecta a la inflación en México, la consultoría Merrill Lynch pronostica que, si bien los altos precios de las mercancías se mantienen cerca del techo de la meta, de 4%, la tendencia será de reducción gradual de las presiones en los precios en 2008.
A este respecto, el promedio estimado en la encuesta de EL UNIVERSAL indica que la inflación ascenderá a 3.8% al cierre de 2008, en tanto que el indicador subyacente será de 3.6%.
En este sentido, Luis A. Flores Sánchez, analista senior de IXE Casa de Bolsa, destacó que el Banco de México (Banxico) previsiblemente no realizaría modificaciones en la política monetaria interna en 2008, debido a que el instituto central amplió el rango de fluctuación de la inflación para establecerlo entre 4.0% y 4.5%.
Aunque destacó que hay dos elementos que podrían motivar a un mayor endurecimiento de la política monetaria: que la expectativa de inflación de 2008 supere 4% y que los salarios se sitúen encima de 5%.
Por su parte, Gerardo Cruz, presidente de estudios económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo que en 2008 la tasa de interés doméstica no presentará grandes cambios, es decir, el fondeo diario se mantendría sobre 7.50%. Sin embargo, en el primer semestre de 2008 podría existir un repunte por la expectativa de fuertes presiones inflacionarias, derivadas de las alzas esperadas en la gasolina, salarios y transporte público.
Agregó que el tipo de cambio peso-dólar mostrará cotizaciones estables, por lo que se esperaría un precio promedio de alrededor de 11.15 pesos, no obstante la perspectiva de un menor crecimiento económico de Estados Unidos, cuyo crecimiento se pronostica en 1.5%.
Según los analistas económicos, los retos que México enfrenta son: generar más de un millón de empleos por año, por lo que se requerirá continuar con el proceso de reformas como la que permita una mayor participación de las empresas en el sector energético nacional.
“Se busca que el estado no pierda la rectoría, pero que permita acelerar la reinversión y modernizar a Pemex, de tal forma que los costos de producción se reduzcan” expuso.
Urgió a seguir con la desregulación y atraer inversiones.
Pese a la desaceleración estadounidense, la economía mexicana podría crecer hasta 4% durante el año que inicia, gracias al dinamismo del consumo interno, de acuerdo con el consenso de analistas encuestados por EL UNIVERSAL.
Alfredo Coutiño, economista senior para América Latina de Moody’s, explicó que aunque el país sí resentirá el efecto de la desaceleración estadounidense, por el lado del sector manufacturero y el monto de remesas que recibirá el país, el motor de crecimiento seguirá siendo la demanda al interior del país.
“Un mercado interno fortalecido, la inversión pública en infraestructura anunciada, la flexibilidad y mejores condiciones en el costo de los créditos bancarios, son los elementos que apoyarán el crecimiento de la economía de México en 2008”, dijo.
Además, el impulso que recibirá el sector de la construcción, el cual es altamente intensivo en mano de obra, continuará y se expandirá en el año, lo que apoyará el empleo con mejores ingresos en el país, expresó. En consecuencia, el escenario es en general positivo, pues la absorción interna permitirá compensar el efecto negativo del exterior.
Las autoridades finalmente están usando la política económica de forma contracíclica, indicó Coutiño.
En lo que respecta a la inflación en México, la consultoría Merrill Lynch pronostica que, si bien los altos precios de las mercancías se mantienen cerca del techo de la meta, de 4%, la tendencia será de reducción gradual de las presiones en los precios en 2008.
A este respecto, el promedio estimado en la encuesta de EL UNIVERSAL indica que la inflación ascenderá a 3.8% al cierre de 2008, en tanto que el indicador subyacente será de 3.6%.
En este sentido, Luis A. Flores Sánchez, analista senior de IXE Casa de Bolsa, destacó que el Banco de México (Banxico) previsiblemente no realizaría modificaciones en la política monetaria interna en 2008, debido a que el instituto central amplió el rango de fluctuación de la inflación para establecerlo entre 4.0% y 4.5%.
Aunque destacó que hay dos elementos que podrían motivar a un mayor endurecimiento de la política monetaria: que la expectativa de inflación de 2008 supere 4% y que los salarios se sitúen encima de 5%.
Por su parte, Gerardo Cruz, presidente de estudios económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo que en 2008 la tasa de interés doméstica no presentará grandes cambios, es decir, el fondeo diario se mantendría sobre 7.50%. Sin embargo, en el primer semestre de 2008 podría existir un repunte por la expectativa de fuertes presiones inflacionarias, derivadas de las alzas esperadas en la gasolina, salarios y transporte público.
Agregó que el tipo de cambio peso-dólar mostrará cotizaciones estables, por lo que se esperaría un precio promedio de alrededor de 11.15 pesos, no obstante la perspectiva de un menor crecimiento económico de Estados Unidos, cuyo crecimiento se pronostica en 1.5%.
Según los analistas económicos, los retos que México enfrenta son: generar más de un millón de empleos por año, por lo que se requerirá continuar con el proceso de reformas como la que permita una mayor participación de las empresas en el sector energético nacional.
“Se busca que el estado no pierda la rectoría, pero que permita acelerar la reinversión y modernizar a Pemex, de tal forma que los costos de producción se reduzcan” expuso.
Urgió a seguir con la desregulación y atraer inversiones.
Pese a la desaceleración estadounidense, la economía mexicana podría crecer hasta 4% durante el año que inicia, gracias al dinamismo del consumo interno, de acuerdo con el consenso de analistas encuestados por EL UNIVERSAL.
Alfredo Coutiño, economista senior para América Latina de Moody’s, explicó que aunque el país sí resentirá el efecto de la desaceleración estadounidense, por el lado del sector manufacturero y el monto de remesas que recibirá el país, el motor de crecimiento seguirá siendo la demanda al interior del país.
“Un mercado interno fortalecido, la inversión pública en infraestructura anunciada, la flexibilidad y mejores condiciones en el costo de los créditos bancarios, son los elementos que apoyarán el crecimiento de la economía de México en 2008”, dijo.
Además, el impulso que recibirá el sector de la construcción, el cual es altamente intensivo en mano de obra, continuará y se expandirá en el año, lo que apoyará el empleo con mejores ingresos en el país, expresó. En consecuencia, el escenario es en general positivo, pues la absorción interna permitirá compensar el efecto negativo del exterior.
Las autoridades finalmente están usando la política económica de forma contracíclica, indicó Coutiño.
En lo que respecta a la inflación en México, la consultoría Merrill Lynch pronostica que, si bien los altos precios de las mercancías se mantienen cerca del techo de la meta, de 4%, la tendencia será de reducción gradual de las presiones en los precios en 2008.
A este respecto, el promedio estimado en la encuesta de EL UNIVERSAL indica que la inflación ascenderá a 3.8% al cierre de 2008, en tanto que el indicador subyacente será de 3.6%.
En este sentido, Luis A. Flores Sánchez, analista senior de IXE Casa de Bolsa, destacó que el Banco de México (Banxico) previsiblemente no realizaría modificaciones en la política monetaria interna en 2008, debido a que el instituto central amplió el rango de fluctuación de la inflación para establecerlo entre 4.0% y 4.5%.
Aunque destacó que hay dos elementos que podrían motivar a un mayor endurecimiento de la política monetaria: que la expectativa de inflación de 2008 supere 4% y que los salarios se sitúen encima de 5%.
Por su parte, Gerardo Cruz, presidente de estudios económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo que en 2008 la tasa de interés doméstica no presentará grandes cambios, es decir, el fondeo diario se mantendría sobre 7.50%. Sin embargo, en el primer semestre de 2008 podría existir un repunte por la expectativa de fuertes presiones inflacionarias, derivadas de las alzas esperadas en la gasolina, salarios y transporte público.
Agregó que el tipo de cambio peso-dólar mostrará cotizaciones estables, por lo que se esperaría un precio promedio de alrededor de 11.15 pesos, no obstante la perspectiva de un menor crecimiento económico de Estados Unidos, cuyo crecimiento se pronostica en 1.5%.
Según los analistas económicos, los retos que México enfrenta son: generar más de un millón de empleos por año, por lo que se requerirá continuar con el proceso de reformas como la que permita una mayor participación de las empresas en el sector energético nacional.
“Se busca que el estado no pierda la rectoría, pero que permita acelerar la reinversión y modernizar a Pemex, de tal forma que los costos de producción se reduzcan” expuso.
Urgió a seguir con la desregulación y atraer inversiones.
Pese a la desaceleración estadounidense, la economía mexicana podría crecer hasta 4% durante el año que inicia, gracias al dinamismo del consumo interno, de acuerdo con el consenso de analistas encuestados por EL UNIVERSAL.
Alfredo Coutiño, economista senior para América Latina de Moody’s, explicó que aunque el país sí resentirá el efecto de la desaceleración estadounidense, por el lado del sector manufacturero y el monto de remesas que recibirá el país, el motor de crecimiento seguirá siendo la demanda al interior del país.
“Un mercado interno fortalecido, la inversión pública en infraestructura anunciada, la flexibilidad y mejores condiciones en el costo de los créditos bancarios, son los elementos que apoyarán el crecimiento de la economía de México en 2008”, dijo.
Además, el impulso que recibirá el sector de la construcción, el cual es altamente intensivo en mano de obra, continuará y se expandirá en el año, lo que apoyará el empleo con mejores ingresos en el país, expresó. En consecuencia, el escenario es en general positivo, pues la absorción interna permitirá compensar el efecto negativo del exterior.
Las autoridades finalmente están usando la política económica de forma contracíclica, indicó Coutiño.
En lo que respecta a la inflación en México, la consultoría Merrill Lynch pronostica que, si bien los altos precios de las mercancías se mantienen cerca del techo de la meta, de 4%, la tendencia será de reducción gradual de las presiones en los precios en 2008.
A este respecto, el promedio estimado en la encuesta de EL UNIVERSAL indica que la inflación ascenderá a 3.8% al cierre de 2008, en tanto que el indicador subyacente será de 3.6%.
En este sentido, Luis A. Flores Sánchez, analista senior de IXE Casa de Bolsa, destacó que el Banco de México (Banxico) previsiblemente no realizaría modificaciones en la política monetaria interna en 2008, debido a que el instituto central amplió el rango de fluctuación de la inflación para establecerlo entre 4.0% y 4.5%.
Aunque destacó que hay dos elementos que podrían motivar a un mayor endurecimiento de la política monetaria: que la expectativa de inflación de 2008 supere 4% y que los salarios se sitúen encima de 5%.
Por su parte, Gerardo Cruz, presidente de estudios económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo que en 2008 la tasa de interés doméstica no presentará grandes cambios, es decir, el fondeo diario se mantendría sobre 7.50%. Sin embargo, en el primer semestre de 2008 podría existir un repunte por la expectativa de fuertes presiones inflacionarias, derivadas de las alzas esperadas en la gasolina, salarios y transporte público.
Agregó que el tipo de cambio peso-dólar mostrará cotizaciones estables, por lo que se esperaría un precio promedio de alrededor de 11.15 pesos, no obstante la perspectiva de un menor crecimiento económico de Estados Unidos, cuyo crecimiento se pronostica en 1.5%.
Según los analistas económicos, los retos que México enfrenta son: generar más de un millón de empleos por año, por lo que se requerirá continuar con el proceso de reformas como la que permita una mayor participación de las empresas en el sector energético nacional.
“Se busca que el estado no pierda la rectoría, pero que permita acelerar la reinversión y modernizar a Pemex, de tal forma que los costos de producción se reduzcan” expuso.
Urgió a seguir con la desregulación y atraer inversiones.
Pese a la desaceleración estadounidense, la economía mexicana podría crecer hasta 4% durante el año que inicia, gracias al dinamismo del consumo interno, de acuerdo con el consenso de analistas encuestados por EL UNIVERSAL.
Alfredo Coutiño, economista senior para América Latina de Moody’s, explicó que aunque el país sí resentirá el efecto de la desaceleración estadounidense, por el lado del sector manufacturero y el monto de remesas que recibirá el país, el motor de crecimiento seguirá siendo la demanda al interior del país.
“Un mercado interno fortalecido, la inversión pública en infraestructura anunciada, la flexibilidad y mejores condiciones en el costo de los créditos bancarios, son los elementos que apoyarán el crecimiento de la economía de México en 2008”, dijo.
Además, el impulso que recibirá el sector de la construcción, el cual es altamente intensivo en mano de obra, continuará y se expandirá en el año, lo que apoyará el empleo con mejores ingresos en el país, expresó. En consecuencia, el escenario es en general positivo, pues la absorción interna permitirá compensar el efecto negativo del exterior.
Las autoridades finalmente están usando la política económica de forma contracíclica, indicó Coutiño.
En lo que respecta a la inflación en México, la consultoría Merrill Lynch pronostica que, si bien los altos precios de las mercancías se mantienen cerca del techo de la meta, de 4%, la tendencia será de reducción gradual de las presiones en los precios en 2008.
A este respecto, el promedio estimado en la encuesta de EL UNIVERSAL indica que la inflación ascenderá a 3.8% al cierre de 2008, en tanto que el indicador subyacente será de 3.6%.
En este sentido, Luis A. Flores Sánchez, analista senior de IXE Casa de Bolsa, destacó que el Banco de México (Banxico) previsiblemente no realizaría modificaciones en la política monetaria interna en 2008, debido a que el instituto central amplió el rango de fluctuación de la inflación para establecerlo entre 4.0% y 4.5%.
Aunque destacó que hay dos elementos que podrían motivar a un mayor endurecimiento de la política monetaria: que la expectativa de inflación de 2008 supere 4% y que los salarios se sitúen encima de 5%.
Por su parte, Gerardo Cruz, presidente de estudios económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), dijo que en 2008 la tasa de interés doméstica no presentará grandes cambios, es decir, el fondeo diario se mantendría sobre 7.50%. Sin embargo, en el primer semestre de 2008 podría existir un repunte por la expectativa de fuertes presiones inflacionarias, derivadas de las alzas esperadas en la gasolina, salarios y transporte público.
Agregó que el tipo de cambio peso-dólar mostrará cotizaciones estables, por lo que se esperaría un precio promedio de alrededor de 11.15 pesos, no obstante la perspectiva de un menor crecimiento económico de Estados Unidos, cuyo crecimiento se pronostica en 1.5%.
Según los analistas económicos, los retos que México enfrenta son: generar más de un millón de empleos por año, por lo que se requerirá continuar con el proceso de reformas como la que permita una mayor participación de las empresas en el sector energético nacional.
“Se busca que el estado no pierda la rectoría, pero que permita acelerar la reinversión y modernizar a Pemex, de tal forma que los costos de producción se reduzcan” expuso.
Urgió a seguir con la desregulación y atraer inversiones.