Sao Paulo logró por segundo año consecutivo el primer lugar gracias a "su potencial innovador, su profundo mercado financiero, amplia oferta de servicios y un arraigado y poderoso sector industrial", consignó el análisis de 40 ciudades latinoamericanas.
La ciudad brasileña constituye una verdadera fortaleza si se considera que, sólo en 2005, se registraron en forma oficial mil 997 nuevas patentes industriales, cifra que supera a las registradas en conjunto por Argentina, Chile y Colombia, mil 791, agregó la revista.
Señaló que además de los elementos tradicionales de análisis de ciudades, como competitividad en telecomunicaciones, calidad de vida, seguridad, imagen urbana y evaluación de costos, se sumó el potencial innovador y capacidad para generar nuevos emprendimientos.
Santiago, la capital chilena, aunque continúa como preferida de las grandes transnacionales para instalar sus cuarteles regionales, en la actualidad apuesta por fomentar vínculos entre las pequeñas y medianas empresas de América Latina, indicó la revista de negocios.
De cuerdo con el análisis, la idea es sacar partido de los tratados de libre comercio que Chile ha firmado en los últimos años, con Estados Unidos, Europa, y Corea, y se asocien a otras firmas de la región que poseen tecnología o productos factibles de exportar.
En el tercer puesto está Monterrey, la segunda ciudad mexicana (norte del país) por tamaño de su economía, tercera en población y uno de los más fuertes rivales internos de la capital mexicana (Ciudad de México).
Según la investigación, Monterrey luce un poder de marca tan bueno como Sao Paulo, pero con índices de calidad de vida y seguridad muy superiores.
Agregó que desde 2003 el norteño estado mexicano de Nuevo León, cuya capital es Monterrey, está trabajando en la iniciativa "Monterrey: ciudad internacional del conocimiento".
AméricaEconomía explicó que es un proyecto en el que participan el gobierno local, la comunidad de negocios de la ciudad y las universidades, que se ha propuesto mejorar la competitividad de Monterrey.
La iniciativa, añadió, busca impulsar una reforma en el sistema educativo, levantar centros de investigación de la mano de las tres principales universidades y equipar a esa ciudad mexicana con infraestructura para atraer empresas centradas en nuevas tecnologías.
En la cuarta posición de la lista está la ciudad estadunidense de Miami, cuya competitividad ha sido mermada por el endurecimiento de las políticas migratorias, la polarización política y el levantamiento de restricciones al libre flujo de capitales.
El análisis anotó que Buenos Aires, Argentina, que tenía el deshonroso privilegio de ser una de las tres ciudades a las que los ejecutivos afirmaban en forma expresa no querer ir, sólo por encima de Bogotá (Colombia) y Caracas (Venezuela), llegó al quinto sitio.
Para los especialistas la capital argentina se colocó en ese lugar debido a "condiciones heredadas de su propia historia, y no, como el caso de Santiago, de proyectarse en el marco de un modelo país".
La sexta versión del ranking de ciudades de AméricaEconomía mostró también debuts alentadores como el de las ciudades mexicanas de Querétaro (13 de la lista) y Chihuahua (sitio 20).
De acuerdo al estudio su inclusión y favorable evaluación inicial se deben a que han logrado capitalizar los anhelos de fuga desde la capital mexicana. Aunque son urbes pequeñas,, ambas están en torno a 700 mil habitantes y comienzan a atraer inversiones globales.
Citó como ejemplo de ese crecimiento de atracción, el que la firma canadiense Bombardier, luego de evaluar la infraestructura aeroportuaria y servicios disponibles, eligiera a Querétaro entre 22 competidores para instalar una planta ensambladora de jets.
Entre las caídas el análisis destacó los casos de San Salvador (El Salvador), que cayó del lugar 29 al 35 entre 2005 y 2006, y San Juan de Puerto Rico, que bajó del puesto 17 al 24, por una crisis fiscal que llevó a la declaración de quiebra del gobierno central.
Sao Paulo logró por segundo año consecutivo el primer lugar gracias a "su potencial innovador, su profundo mercado financiero, amplia oferta de servicios y un arraigado y poderoso sector industrial", consignó el análisis de 40 ciudades latinoamericanas.
La ciudad brasileña constituye una verdadera fortaleza si se considera que, sólo en 2005, se registraron en forma oficial mil 997 nuevas patentes industriales, cifra que supera a las registradas en conjunto por Argentina, Chile y Colombia, mil 791, agregó la revista.
Señaló que además de los elementos tradicionales de análisis de ciudades, como competitividad en telecomunicaciones, calidad de vida, seguridad, imagen urbana y evaluación de costos, se sumó el potencial innovador y capacidad para generar nuevos emprendimientos.
Santiago, la capital chilena, aunque continúa como preferida de las grandes transnacionales para instalar sus cuarteles regionales, en la actualidad apuesta por fomentar vínculos entre las pequeñas y medianas empresas de América Latina, indicó la revista de negocios.
De cuerdo con el análisis, la idea es sacar partido de los tratados de libre comercio que Chile ha firmado en los últimos años, con Estados Unidos, Europa, y Corea, y se asocien a otras firmas de la región que poseen tecnología o productos factibles de exportar.
En el tercer puesto está Monterrey, la segunda ciudad mexicana (norte del país) por tamaño de su economía, tercera en población y uno de los más fuertes rivales internos de la capital mexicana (Ciudad de México).
Según la investigación, Monterrey luce un poder de marca tan bueno como Sao Paulo, pero con índices de calidad de vida y seguridad muy superiores.
Agregó que desde 2003 el norteño estado mexicano de Nuevo León, cuya capital es Monterrey, está trabajando en la iniciativa "Monterrey: ciudad internacional del conocimiento".
AméricaEconomía explicó que es un proyecto en el que participan el gobierno local, la comunidad de negocios de la ciudad y las universidades, que se ha propuesto mejorar la competitividad de Monterrey.
La iniciativa, añadió, busca impulsar una reforma en el sistema educativo, levantar centros de investigación de la mano de las tres principales universidades y equipar a esa ciudad mexicana con infraestructura para atraer empresas centradas en nuevas tecnologías.
En la cuarta posición de la lista está la ciudad estadunidense de Miami, cuya competitividad ha sido mermada por el endurecimiento de las políticas migratorias, la polarización política y el levantamiento de restricciones al libre flujo de capitales.
El análisis anotó que Buenos Aires, Argentina, que tenía el deshonroso privilegio de ser una de las tres ciudades a las que los ejecutivos afirmaban en forma expresa no querer ir, sólo por encima de Bogotá (Colombia) y Caracas (Venezuela), llegó al quinto sitio.
Para los especialistas la capital argentina se colocó en ese lugar debido a "condiciones heredadas de su propia historia, y no, como el caso de Santiago, de proyectarse en el marco de un modelo país".
La sexta versión del ranking de ciudades de AméricaEconomía mostró también debuts alentadores como el de las ciudades mexicanas de Querétaro (13 de la lista) y Chihuahua (sitio 20).
De acuerdo al estudio su inclusión y favorable evaluación inicial se deben a que han logrado capitalizar los anhelos de fuga desde la capital mexicana. Aunque son urbes pequeñas,, ambas están en torno a 700 mil habitantes y comienzan a atraer inversiones globales.
Citó como ejemplo de ese crecimiento de atracción, el que la firma canadiense Bombardier, luego de evaluar la infraestructura aeroportuaria y servicios disponibles, eligiera a Querétaro entre 22 competidores para instalar una planta ensambladora de jets.
Entre las caídas el análisis destacó los casos de San Salvador (El Salvador), que cayó del lugar 29 al 35 entre 2005 y 2006, y San Juan de Puerto Rico, que bajó del puesto 17 al 24, por una crisis fiscal que llevó a la declaración de quiebra del gobierno central.
Sao Paulo logró por segundo año consecutivo el primer lugar gracias a "su potencial innovador, su profundo mercado financiero, amplia oferta de servicios y un arraigado y poderoso sector industrial", consignó el análisis de 40 ciudades latinoamericanas.
La ciudad brasileña constituye una verdadera fortaleza si se considera que, sólo en 2005, se registraron en forma oficial mil 997 nuevas patentes industriales, cifra que supera a las registradas en conjunto por Argentina, Chile y Colombia, mil 791, agregó la revista.
Señaló que además de los elementos tradicionales de análisis de ciudades, como competitividad en telecomunicaciones, calidad de vida, seguridad, imagen urbana y evaluación de costos, se sumó el potencial innovador y capacidad para generar nuevos emprendimientos.
Santiago, la capital chilena, aunque continúa como preferida de las grandes transnacionales para instalar sus cuarteles regionales, en la actualidad apuesta por fomentar vínculos entre las pequeñas y medianas empresas de América Latina, indicó la revista de negocios.
De cuerdo con el análisis, la idea es sacar partido de los tratados de libre comercio que Chile ha firmado en los últimos años, con Estados Unidos, Europa, y Corea, y se asocien a otras firmas de la región que poseen tecnología o productos factibles de exportar.
En el tercer puesto está Monterrey, la segunda ciudad mexicana (norte del país) por tamaño de su economía, tercera en población y uno de los más fuertes rivales internos de la capital mexicana (Ciudad de México).
Según la investigación, Monterrey luce un poder de marca tan bueno como Sao Paulo, pero con índices de calidad de vida y seguridad muy superiores.
Agregó que desde 2003 el norteño estado mexicano de Nuevo León, cuya capital es Monterrey, está trabajando en la iniciativa "Monterrey: ciudad internacional del conocimiento".
AméricaEconomía explicó que es un proyecto en el que participan el gobierno local, la comunidad de negocios de la ciudad y las universidades, que se ha propuesto mejorar la competitividad de Monterrey.
La iniciativa, añadió, busca impulsar una reforma en el sistema educativo, levantar centros de investigación de la mano de las tres principales universidades y equipar a esa ciudad mexicana con infraestructura para atraer empresas centradas en nuevas tecnologías.
En la cuarta posición de la lista está la ciudad estadunidense de Miami, cuya competitividad ha sido mermada por el endurecimiento de las políticas migratorias, la polarización política y el levantamiento de restricciones al libre flujo de capitales.
El análisis anotó que Buenos Aires, Argentina, que tenía el deshonroso privilegio de ser una de las tres ciudades a las que los ejecutivos afirmaban en forma expresa no querer ir, sólo por encima de Bogotá (Colombia) y Caracas (Venezuela), llegó al quinto sitio.
Para los especialistas la capital argentina se colocó en ese lugar debido a "condiciones heredadas de su propia historia, y no, como el caso de Santiago, de proyectarse en el marco de un modelo país".
La sexta versión del ranking de ciudades de AméricaEconomía mostró también debuts alentadores como el de las ciudades mexicanas de Querétaro (13 de la lista) y Chihuahua (sitio 20).
De acuerdo al estudio su inclusión y favorable evaluación inicial se deben a que han logrado capitalizar los anhelos de fuga desde la capital mexicana. Aunque son urbes pequeñas,, ambas están en torno a 700 mil habitantes y comienzan a atraer inversiones globales.
Citó como ejemplo de ese crecimiento de atracción, el que la firma canadiense Bombardier, luego de evaluar la infraestructura aeroportuaria y servicios disponibles, eligiera a Querétaro entre 22 competidores para instalar una planta ensambladora de jets.
Entre las caídas el análisis destacó los casos de San Salvador (El Salvador), que cayó del lugar 29 al 35 entre 2005 y 2006, y San Juan de Puerto Rico, que bajó del puesto 17 al 24, por una crisis fiscal que llevó a la declaración de quiebra del gobierno central.
Sao Paulo logró por segundo año consecutivo el primer lugar gracias a "su potencial innovador, su profundo mercado financiero, amplia oferta de servicios y un arraigado y poderoso sector industrial", consignó el análisis de 40 ciudades latinoamericanas.
La ciudad brasileña constituye una verdadera fortaleza si se considera que, sólo en 2005, se registraron en forma oficial mil 997 nuevas patentes industriales, cifra que supera a las registradas en conjunto por Argentina, Chile y Colombia, mil 791, agregó la revista.
Señaló que además de los elementos tradicionales de análisis de ciudades, como competitividad en telecomunicaciones, calidad de vida, seguridad, imagen urbana y evaluación de costos, se sumó el potencial innovador y capacidad para generar nuevos emprendimientos.
Santiago, la capital chilena, aunque continúa como preferida de las grandes transnacionales para instalar sus cuarteles regionales, en la actualidad apuesta por fomentar vínculos entre las pequeñas y medianas empresas de América Latina, indicó la revista de negocios.
De cuerdo con el análisis, la idea es sacar partido de los tratados de libre comercio que Chile ha firmado en los últimos años, con Estados Unidos, Europa, y Corea, y se asocien a otras firmas de la región que poseen tecnología o productos factibles de exportar.
En el tercer puesto está Monterrey, la segunda ciudad mexicana (norte del país) por tamaño de su economía, tercera en población y uno de los más fuertes rivales internos de la capital mexicana (Ciudad de México).
Según la investigación, Monterrey luce un poder de marca tan bueno como Sao Paulo, pero con índices de calidad de vida y seguridad muy superiores.
Agregó que desde 2003 el norteño estado mexicano de Nuevo León, cuya capital es Monterrey, está trabajando en la iniciativa "Monterrey: ciudad internacional del conocimiento".
AméricaEconomía explicó que es un proyecto en el que participan el gobierno local, la comunidad de negocios de la ciudad y las universidades, que se ha propuesto mejorar la competitividad de Monterrey.
La iniciativa, añadió, busca impulsar una reforma en el sistema educativo, levantar centros de investigación de la mano de las tres principales universidades y equipar a esa ciudad mexicana con infraestructura para atraer empresas centradas en nuevas tecnologías.
En la cuarta posición de la lista está la ciudad estadunidense de Miami, cuya competitividad ha sido mermada por el endurecimiento de las políticas migratorias, la polarización política y el levantamiento de restricciones al libre flujo de capitales.
El análisis anotó que Buenos Aires, Argentina, que tenía el deshonroso privilegio de ser una de las tres ciudades a las que los ejecutivos afirmaban en forma expresa no querer ir, sólo por encima de Bogotá (Colombia) y Caracas (Venezuela), llegó al quinto sitio.
Para los especialistas la capital argentina se colocó en ese lugar debido a "condiciones heredadas de su propia historia, y no, como el caso de Santiago, de proyectarse en el marco de un modelo país".
La sexta versión del ranking de ciudades de AméricaEconomía mostró también debuts alentadores como el de las ciudades mexicanas de Querétaro (13 de la lista) y Chihuahua (sitio 20).
De acuerdo al estudio su inclusión y favorable evaluación inicial se deben a que han logrado capitalizar los anhelos de fuga desde la capital mexicana. Aunque son urbes pequeñas,, ambas están en torno a 700 mil habitantes y comienzan a atraer inversiones globales.
Citó como ejemplo de ese crecimiento de atracción, el que la firma canadiense Bombardier, luego de evaluar la infraestructura aeroportuaria y servicios disponibles, eligiera a Querétaro entre 22 competidores para instalar una planta ensambladora de jets.
Entre las caídas el análisis destacó los casos de San Salvador (El Salvador), que cayó del lugar 29 al 35 entre 2005 y 2006, y San Juan de Puerto Rico, que bajó del puesto 17 al 24, por una crisis fiscal que llevó a la declaración de quiebra del gobierno central.
Sao Paulo logró por segundo año consecutivo el primer lugar gracias a "su potencial innovador, su profundo mercado financiero, amplia oferta de servicios y un arraigado y poderoso sector industrial", consignó el análisis de 40 ciudades latinoamericanas.
La ciudad brasileña constituye una verdadera fortaleza si se considera que, sólo en 2005, se registraron en forma oficial mil 997 nuevas patentes industriales, cifra que supera a las registradas en conjunto por Argentina, Chile y Colombia, mil 791, agregó la revista.
Señaló que además de los elementos tradicionales de análisis de ciudades, como competitividad en telecomunicaciones, calidad de vida, seguridad, imagen urbana y evaluación de costos, se sumó el potencial innovador y capacidad para generar nuevos emprendimientos.
Santiago, la capital chilena, aunque continúa como preferida de las grandes transnacionales para instalar sus cuarteles regionales, en la actualidad apuesta por fomentar vínculos entre las pequeñas y medianas empresas de América Latina, indicó la revista de negocios.
De cuerdo con el análisis, la idea es sacar partido de los tratados de libre comercio que Chile ha firmado en los últimos años, con Estados Unidos, Europa, y Corea, y se asocien a otras firmas de la región que poseen tecnología o productos factibles de exportar.
En el tercer puesto está Monterrey, la segunda ciudad mexicana (norte del país) por tamaño de su economía, tercera en población y uno de los más fuertes rivales internos de la capital mexicana (Ciudad de México).
Según la investigación, Monterrey luce un poder de marca tan bueno como Sao Paulo, pero con índices de calidad de vida y seguridad muy superiores.
Agregó que desde 2003 el norteño estado mexicano de Nuevo León, cuya capital es Monterrey, está trabajando en la iniciativa "Monterrey: ciudad internacional del conocimiento".
AméricaEconomía explicó que es un proyecto en el que participan el gobierno local, la comunidad de negocios de la ciudad y las universidades, que se ha propuesto mejorar la competitividad de Monterrey.
La iniciativa, añadió, busca impulsar una reforma en el sistema educativo, levantar centros de investigación de la mano de las tres principales universidades y equipar a esa ciudad mexicana con infraestructura para atraer empresas centradas en nuevas tecnologías.
En la cuarta posición de la lista está la ciudad estadunidense de Miami, cuya competitividad ha sido mermada por el endurecimiento de las políticas migratorias, la polarización política y el levantamiento de restricciones al libre flujo de capitales.
El análisis anotó que Buenos Aires, Argentina, que tenía el deshonroso privilegio de ser una de las tres ciudades a las que los ejecutivos afirmaban en forma expresa no querer ir, sólo por encima de Bogotá (Colombia) y Caracas (Venezuela), llegó al quinto sitio.
Para los especialistas la capital argentina se colocó en ese lugar debido a "condiciones heredadas de su propia historia, y no, como el caso de Santiago, de proyectarse en el marco de un modelo país".
La sexta versión del ranking de ciudades de AméricaEconomía mostró también debuts alentadores como el de las ciudades mexicanas de Querétaro (13 de la lista) y Chihuahua (sitio 20).
De acuerdo al estudio su inclusión y favorable evaluación inicial se deben a que han logrado capitalizar los anhelos de fuga desde la capital mexicana. Aunque son urbes pequeñas,, ambas están en torno a 700 mil habitantes y comienzan a atraer inversiones globales.
Citó como ejemplo de ese crecimiento de atracción, el que la firma canadiense Bombardier, luego de evaluar la infraestructura aeroportuaria y servicios disponibles, eligiera a Querétaro entre 22 competidores para instalar una planta ensambladora de jets.
Entre las caídas el análisis destacó los casos de San Salvador (El Salvador), que cayó del lugar 29 al 35 entre 2005 y 2006, y San Juan de Puerto Rico, que bajó del puesto 17 al 24, por una crisis fiscal que llevó a la declaración de quiebra del gobierno central.
Sao Paulo logró por segundo año consecutivo el primer lugar gracias a "su potencial innovador, su profundo mercado financiero, amplia oferta de servicios y un arraigado y poderoso sector industrial", consignó el análisis de 40 ciudades latinoamericanas.
La ciudad brasileña constituye una verdadera fortaleza si se considera que, sólo en 2005, se registraron en forma oficial mil 997 nuevas patentes industriales, cifra que supera a las registradas en conjunto por Argentina, Chile y Colombia, mil 791, agregó la revista.
Señaló que además de los elementos tradicionales de análisis de ciudades, como competitividad en telecomunicaciones, calidad de vida, seguridad, imagen urbana y evaluación de costos, se sumó el potencial innovador y capacidad para generar nuevos emprendimientos.
Santiago, la capital chilena, aunque continúa como preferida de las grandes transnacionales para instalar sus cuarteles regionales, en la actualidad apuesta por fomentar vínculos entre las pequeñas y medianas empresas de América Latina, indicó la revista de negocios.
De cuerdo con el análisis, la idea es sacar partido de los tratados de libre comercio que Chile ha firmado en los últimos años, con Estados Unidos, Europa, y Corea, y se asocien a otras firmas de la región que poseen tecnología o productos factibles de exportar.
En el tercer puesto está Monterrey, la segunda ciudad mexicana (norte del país) por tamaño de su economía, tercera en población y uno de los más fuertes rivales internos de la capital mexicana (Ciudad de México).
Según la investigación, Monterrey luce un poder de marca tan bueno como Sao Paulo, pero con índices de calidad de vida y seguridad muy superiores.
Agregó que desde 2003 el norteño estado mexicano de Nuevo León, cuya capital es Monterrey, está trabajando en la iniciativa "Monterrey: ciudad internacional del conocimiento".
AméricaEconomía explicó que es un proyecto en el que participan el gobierno local, la comunidad de negocios de la ciudad y las universidades, que se ha propuesto mejorar la competitividad de Monterrey.
La iniciativa, añadió, busca impulsar una reforma en el sistema educativo, levantar centros de investigación de la mano de las tres principales universidades y equipar a esa ciudad mexicana con infraestructura para atraer empresas centradas en nuevas tecnologías.
En la cuarta posición de la lista está la ciudad estadunidense de Miami, cuya competitividad ha sido mermada por el endurecimiento de las políticas migratorias, la polarización política y el levantamiento de restricciones al libre flujo de capitales.
El análisis anotó que Buenos Aires, Argentina, que tenía el deshonroso privilegio de ser una de las tres ciudades a las que los ejecutivos afirmaban en forma expresa no querer ir, sólo por encima de Bogotá (Colombia) y Caracas (Venezuela), llegó al quinto sitio.
Para los especialistas la capital argentina se colocó en ese lugar debido a "condiciones heredadas de su propia historia, y no, como el caso de Santiago, de proyectarse en el marco de un modelo país".
La sexta versión del ranking de ciudades de AméricaEconomía mostró también debuts alentadores como el de las ciudades mexicanas de Querétaro (13 de la lista) y Chihuahua (sitio 20).
De acuerdo al estudio su inclusión y favorable evaluación inicial se deben a que han logrado capitalizar los anhelos de fuga desde la capital mexicana. Aunque son urbes pequeñas,, ambas están en torno a 700 mil habitantes y comienzan a atraer inversiones globales.
Citó como ejemplo de ese crecimiento de atracción, el que la firma canadiense Bombardier, luego de evaluar la infraestructura aeroportuaria y servicios disponibles, eligiera a Querétaro entre 22 competidores para instalar una planta ensambladora de jets.
Entre las caídas el análisis destacó los casos de San Salvador (El Salvador), que cayó del lugar 29 al 35 entre 2005 y 2006, y San Juan de Puerto Rico, que bajó del puesto 17 al 24, por una crisis fiscal que llevó a la declaración de quiebra del gobierno central.
Sao Paulo logró por segundo año consecutivo el primer lugar gracias a "su potencial innovador, su profundo mercado financiero, amplia oferta de servicios y un arraigado y poderoso sector industrial", consignó el análisis de 40 ciudades latinoamericanas.
La ciudad brasileña constituye una verdadera fortaleza si se considera que, sólo en 2005, se registraron en forma oficial mil 997 nuevas patentes industriales, cifra que supera a las registradas en conjunto por Argentina, Chile y Colombia, mil 791, agregó la revista.
Señaló que además de los elementos tradicionales de análisis de ciudades, como competitividad en telecomunicaciones, calidad de vida, seguridad, imagen urbana y evaluación de costos, se sumó el potencial innovador y capacidad para generar nuevos emprendimientos.
Santiago, la capital chilena, aunque continúa como preferida de las grandes transnacionales para instalar sus cuarteles regionales, en la actualidad apuesta por fomentar vínculos entre las pequeñas y medianas empresas de América Latina, indicó la revista de negocios.
De cuerdo con el análisis, la idea es sacar partido de los tratados de libre comercio que Chile ha firmado en los últimos años, con Estados Unidos, Europa, y Corea, y se asocien a otras firmas de la región que poseen tecnología o productos factibles de exportar.
En el tercer puesto está Monterrey, la segunda ciudad mexicana (norte del país) por tamaño de su economía, tercera en población y uno de los más fuertes rivales internos de la capital mexicana (Ciudad de México).
Según la investigación, Monterrey luce un poder de marca tan bueno como Sao Paulo, pero con índices de calidad de vida y seguridad muy superiores.
Agregó que desde 2003 el norteño estado mexicano de Nuevo León, cuya capital es Monterrey, está trabajando en la iniciativa "Monterrey: ciudad internacional del conocimiento".
AméricaEconomía explicó que es un proyecto en el que participan el gobierno local, la comunidad de negocios de la ciudad y las universidades, que se ha propuesto mejorar la competitividad de Monterrey.
La iniciativa, añadió, busca impulsar una reforma en el sistema educativo, levantar centros de investigación de la mano de las tres principales universidades y equipar a esa ciudad mexicana con infraestructura para atraer empresas centradas en nuevas tecnologías.
En la cuarta posición de la lista está la ciudad estadunidense de Miami, cuya competitividad ha sido mermada por el endurecimiento de las políticas migratorias, la polarización política y el levantamiento de restricciones al libre flujo de capitales.
El análisis anotó que Buenos Aires, Argentina, que tenía el deshonroso privilegio de ser una de las tres ciudades a las que los ejecutivos afirmaban en forma expresa no querer ir, sólo por encima de Bogotá (Colombia) y Caracas (Venezuela), llegó al quinto sitio.
Para los especialistas la capital argentina se colocó en ese lugar debido a "condiciones heredadas de su propia historia, y no, como el caso de Santiago, de proyectarse en el marco de un modelo país".
La sexta versión del ranking de ciudades de AméricaEconomía mostró también debuts alentadores como el de las ciudades mexicanas de Querétaro (13 de la lista) y Chihuahua (sitio 20).
De acuerdo al estudio su inclusión y favorable evaluación inicial se deben a que han logrado capitalizar los anhelos de fuga desde la capital mexicana. Aunque son urbes pequeñas,, ambas están en torno a 700 mil habitantes y comienzan a atraer inversiones globales.
Citó como ejemplo de ese crecimiento de atracción, el que la firma canadiense Bombardier, luego de evaluar la infraestructura aeroportuaria y servicios disponibles, eligiera a Querétaro entre 22 competidores para instalar una planta ensambladora de jets.
Entre las caídas el análisis destacó los casos de San Salvador (El Salvador), que cayó del lugar 29 al 35 entre 2005 y 2006, y San Juan de Puerto Rico, que bajó del puesto 17 al 24, por una crisis fiscal que llevó a la declaración de quiebra del gobierno central.
Sao Paulo logró por segundo año consecutivo el primer lugar gracias a "su potencial innovador, su profundo mercado financiero, amplia oferta de servicios y un arraigado y poderoso sector industrial", consignó el análisis de 40 ciudades latinoamericanas.
La ciudad brasileña constituye una verdadera fortaleza si se considera que, sólo en 2005, se registraron en forma oficial mil 997 nuevas patentes industriales, cifra que supera a las registradas en conjunto por Argentina, Chile y Colombia, mil 791, agregó la revista.
Señaló que además de los elementos tradicionales de análisis de ciudades, como competitividad en telecomunicaciones, calidad de vida, seguridad, imagen urbana y evaluación de costos, se sumó el potencial innovador y capacidad para generar nuevos emprendimientos.
Santiago, la capital chilena, aunque continúa como preferida de las grandes transnacionales para instalar sus cuarteles regionales, en la actualidad apuesta por fomentar vínculos entre las pequeñas y medianas empresas de América Latina, indicó la revista de negocios.
De cuerdo con el análisis, la idea es sacar partido de los tratados de libre comercio que Chile ha firmado en los últimos años, con Estados Unidos, Europa, y Corea, y se asocien a otras firmas de la región que poseen tecnología o productos factibles de exportar.
En el tercer puesto está Monterrey, la segunda ciudad mexicana (norte del país) por tamaño de su economía, tercera en población y uno de los más fuertes rivales internos de la capital mexicana (Ciudad de México).
Según la investigación, Monterrey luce un poder de marca tan bueno como Sao Paulo, pero con índices de calidad de vida y seguridad muy superiores.
Agregó que desde 2003 el norteño estado mexicano de Nuevo León, cuya capital es Monterrey, está trabajando en la iniciativa "Monterrey: ciudad internacional del conocimiento".
AméricaEconomía explicó que es un proyecto en el que participan el gobierno local, la comunidad de negocios de la ciudad y las universidades, que se ha propuesto mejorar la competitividad de Monterrey.
La iniciativa, añadió, busca impulsar una reforma en el sistema educativo, levantar centros de investigación de la mano de las tres principales universidades y equipar a esa ciudad mexicana con infraestructura para atraer empresas centradas en nuevas tecnologías.
En la cuarta posición de la lista está la ciudad estadunidense de Miami, cuya competitividad ha sido mermada por el endurecimiento de las políticas migratorias, la polarización política y el levantamiento de restricciones al libre flujo de capitales.
El análisis anotó que Buenos Aires, Argentina, que tenía el deshonroso privilegio de ser una de las tres ciudades a las que los ejecutivos afirmaban en forma expresa no querer ir, sólo por encima de Bogotá (Colombia) y Caracas (Venezuela), llegó al quinto sitio.
Para los especialistas la capital argentina se colocó en ese lugar debido a "condiciones heredadas de su propia historia, y no, como el caso de Santiago, de proyectarse en el marco de un modelo país".
La sexta versión del ranking de ciudades de AméricaEconomía mostró también debuts alentadores como el de las ciudades mexicanas de Querétaro (13 de la lista) y Chihuahua (sitio 20).
De acuerdo al estudio su inclusión y favorable evaluación inicial se deben a que han logrado capitalizar los anhelos de fuga desde la capital mexicana. Aunque son urbes pequeñas,, ambas están en torno a 700 mil habitantes y comienzan a atraer inversiones globales.
Citó como ejemplo de ese crecimiento de atracción, el que la firma canadiense Bombardier, luego de evaluar la infraestructura aeroportuaria y servicios disponibles, eligiera a Querétaro entre 22 competidores para instalar una planta ensambladora de jets.
Entre las caídas el análisis destacó los casos de San Salvador (El Salvador), que cayó del lugar 29 al 35 entre 2005 y 2006, y San Juan de Puerto Rico, que bajó del puesto 17 al 24, por una crisis fiscal que llevó a la declaración de quiebra del gobierno central.