Actualmente, 40% de la mercancía que los grandes supermercados venden es importada, debido a que los centros de abasto mexicanos no cumplen con los estándares internacionales y la certificación de inocuidad y calidad de los productos, reconoció Francisco López Tostado, subsecretario de Agricultura de la Sagarpa.
En conferencia de prensa, explicó que los proveedores de alimentos mexicanos se sujetarán a la certificación SQF (Safe Quality Food), que es reconocida por los supermercados internacionales, lo cual asegurará en un futuro disminuir el desplazamiento de los centros de abasto nacionales.
Al año se trasladan del campo y se comercializan a través de las distintas centrales de abasto del país 14 mil millones de toneladas de mercancía.
Sin embargo, a decir de Jaime Cornejo Castillo, presidente de Conacca, el inadecuado manejo de los productos provoca que no se venda de forma fresca y con una buena calidad.
Detalló que esto ha causado un incalculable costo a los proveedores, ya que los grandes consorcios transnacionales como Wal-Mart importan la mayor parte de su mercancía para cumplir con normas internacionales de calidad.
"Buscamos apoyo de las autoridades porque las grandes cadenas comerciales prefieren productos de otras naciones debido a la falta de una certificación de calidad e inocuidad de la mercancía", dijo.
Detalló que el programa será operado con ayuda de las secretarías de Economía y Agricultura y contempla inicialmente el asesoramiento y la aplicación de procesos de certificación de 100 empresas, el cual tendrá un costo aproximado de 2 millones 500 mil pesos, donde el sector privado aportará 50% y la otra mitad el gobierno.
Comentó que presentarán a quien llegue a la Presidencia un Plan Nacional de Abasto.
Por su parte Víctor Sandoval, director de Capacitación e Innovación Tecnológica de la Secretaría de Economía, dijo que la aplicación de la tecnología y la logística es fundamental para bajar los costos, los cuales llegan a representar en la operación más de 20%
Paul Ryan, director ejecutivo del Instituto SQF, firma que aplicará el método y entregará la certificación a las empresas elegidas, mencionó que el distintivo dará mayor confianza a consumidores.
Actualmente, 40% de la mercancía que los grandes supermercados venden es importada, debido a que los centros de abasto mexicanos no cumplen con los estándares internacionales y la certificación de inocuidad y calidad de los productos, reconoció Francisco López Tostado, subsecretario de Agricultura de la Sagarpa.
En conferencia de prensa, explicó que los proveedores de alimentos mexicanos se sujetarán a la certificación SQF (Safe Quality Food), que es reconocida por los supermercados internacionales, lo cual asegurará en un futuro disminuir el desplazamiento de los centros de abasto nacionales.
Al año se trasladan del campo y se comercializan a través de las distintas centrales de abasto del país 14 mil millones de toneladas de mercancía.
Sin embargo, a decir de Jaime Cornejo Castillo, presidente de Conacca, el inadecuado manejo de los productos provoca que no se venda de forma fresca y con una buena calidad.
Detalló que esto ha causado un incalculable costo a los proveedores, ya que los grandes consorcios transnacionales como Wal-Mart importan la mayor parte de su mercancía para cumplir con normas internacionales de calidad.
"Buscamos apoyo de las autoridades porque las grandes cadenas comerciales prefieren productos de otras naciones debido a la falta de una certificación de calidad e inocuidad de la mercancía", dijo.
Detalló que el programa será operado con ayuda de las secretarías de Economía y Agricultura y contempla inicialmente el asesoramiento y la aplicación de procesos de certificación de 100 empresas, el cual tendrá un costo aproximado de 2 millones 500 mil pesos, donde el sector privado aportará 50% y la otra mitad el gobierno.
Comentó que presentarán a quien llegue a la Presidencia un Plan Nacional de Abasto.
Por su parte Víctor Sandoval, director de Capacitación e Innovación Tecnológica de la Secretaría de Economía, dijo que la aplicación de la tecnología y la logística es fundamental para bajar los costos, los cuales llegan a representar en la operación más de 20%
Paul Ryan, director ejecutivo del Instituto SQF, firma que aplicará el método y entregará la certificación a las empresas elegidas, mencionó que el distintivo dará mayor confianza a consumidores.
Actualmente, 40% de la mercancía que los grandes supermercados venden es importada, debido a que los centros de abasto mexicanos no cumplen con los estándares internacionales y la certificación de inocuidad y calidad de los productos, reconoció Francisco López Tostado, subsecretario de Agricultura de la Sagarpa.
En conferencia de prensa, explicó que los proveedores de alimentos mexicanos se sujetarán a la certificación SQF (Safe Quality Food), que es reconocida por los supermercados internacionales, lo cual asegurará en un futuro disminuir el desplazamiento de los centros de abasto nacionales.
Al año se trasladan del campo y se comercializan a través de las distintas centrales de abasto del país 14 mil millones de toneladas de mercancía.
Sin embargo, a decir de Jaime Cornejo Castillo, presidente de Conacca, el inadecuado manejo de los productos provoca que no se venda de forma fresca y con una buena calidad.
Detalló que esto ha causado un incalculable costo a los proveedores, ya que los grandes consorcios transnacionales como Wal-Mart importan la mayor parte de su mercancía para cumplir con normas internacionales de calidad.
"Buscamos apoyo de las autoridades porque las grandes cadenas comerciales prefieren productos de otras naciones debido a la falta de una certificación de calidad e inocuidad de la mercancía", dijo.
Detalló que el programa será operado con ayuda de las secretarías de Economía y Agricultura y contempla inicialmente el asesoramiento y la aplicación de procesos de certificación de 100 empresas, el cual tendrá un costo aproximado de 2 millones 500 mil pesos, donde el sector privado aportará 50% y la otra mitad el gobierno.
Comentó que presentarán a quien llegue a la Presidencia un Plan Nacional de Abasto.
Por su parte Víctor Sandoval, director de Capacitación e Innovación Tecnológica de la Secretaría de Economía, dijo que la aplicación de la tecnología y la logística es fundamental para bajar los costos, los cuales llegan a representar en la operación más de 20%
Paul Ryan, director ejecutivo del Instituto SQF, firma que aplicará el método y entregará la certificación a las empresas elegidas, mencionó que el distintivo dará mayor confianza a consumidores.
Actualmente, 40% de la mercancía que los grandes supermercados venden es importada, debido a que los centros de abasto mexicanos no cumplen con los estándares internacionales y la certificación de inocuidad y calidad de los productos, reconoció Francisco López Tostado, subsecretario de Agricultura de la Sagarpa.
En conferencia de prensa, explicó que los proveedores de alimentos mexicanos se sujetarán a la certificación SQF (Safe Quality Food), que es reconocida por los supermercados internacionales, lo cual asegurará en un futuro disminuir el desplazamiento de los centros de abasto nacionales.
Al año se trasladan del campo y se comercializan a través de las distintas centrales de abasto del país 14 mil millones de toneladas de mercancía.
Sin embargo, a decir de Jaime Cornejo Castillo, presidente de Conacca, el inadecuado manejo de los productos provoca que no se venda de forma fresca y con una buena calidad.
Detalló que esto ha causado un incalculable costo a los proveedores, ya que los grandes consorcios transnacionales como Wal-Mart importan la mayor parte de su mercancía para cumplir con normas internacionales de calidad.
"Buscamos apoyo de las autoridades porque las grandes cadenas comerciales prefieren productos de otras naciones debido a la falta de una certificación de calidad e inocuidad de la mercancía", dijo.
Detalló que el programa será operado con ayuda de las secretarías de Economía y Agricultura y contempla inicialmente el asesoramiento y la aplicación de procesos de certificación de 100 empresas, el cual tendrá un costo aproximado de 2 millones 500 mil pesos, donde el sector privado aportará 50% y la otra mitad el gobierno.
Comentó que presentarán a quien llegue a la Presidencia un Plan Nacional de Abasto.
Por su parte Víctor Sandoval, director de Capacitación e Innovación Tecnológica de la Secretaría de Economía, dijo que la aplicación de la tecnología y la logística es fundamental para bajar los costos, los cuales llegan a representar en la operación más de 20%
Paul Ryan, director ejecutivo del Instituto SQF, firma que aplicará el método y entregará la certificación a las empresas elegidas, mencionó que el distintivo dará mayor confianza a consumidores.
Actualmente, 40% de la mercancía que los grandes supermercados venden es importada, debido a que los centros de abasto mexicanos no cumplen con los estándares internacionales y la certificación de inocuidad y calidad de los productos, reconoció Francisco López Tostado, subsecretario de Agricultura de la Sagarpa.
En conferencia de prensa, explicó que los proveedores de alimentos mexicanos se sujetarán a la certificación SQF (Safe Quality Food), que es reconocida por los supermercados internacionales, lo cual asegurará en un futuro disminuir el desplazamiento de los centros de abasto nacionales.
Al año se trasladan del campo y se comercializan a través de las distintas centrales de abasto del país 14 mil millones de toneladas de mercancía.
Sin embargo, a decir de Jaime Cornejo Castillo, presidente de Conacca, el inadecuado manejo de los productos provoca que no se venda de forma fresca y con una buena calidad.
Detalló que esto ha causado un incalculable costo a los proveedores, ya que los grandes consorcios transnacionales como Wal-Mart importan la mayor parte de su mercancía para cumplir con normas internacionales de calidad.
"Buscamos apoyo de las autoridades porque las grandes cadenas comerciales prefieren productos de otras naciones debido a la falta de una certificación de calidad e inocuidad de la mercancía", dijo.
Detalló que el programa será operado con ayuda de las secretarías de Economía y Agricultura y contempla inicialmente el asesoramiento y la aplicación de procesos de certificación de 100 empresas, el cual tendrá un costo aproximado de 2 millones 500 mil pesos, donde el sector privado aportará 50% y la otra mitad el gobierno.
Comentó que presentarán a quien llegue a la Presidencia un Plan Nacional de Abasto.
Por su parte Víctor Sandoval, director de Capacitación e Innovación Tecnológica de la Secretaría de Economía, dijo que la aplicación de la tecnología y la logística es fundamental para bajar los costos, los cuales llegan a representar en la operación más de 20%
Paul Ryan, director ejecutivo del Instituto SQF, firma que aplicará el método y entregará la certificación a las empresas elegidas, mencionó que el distintivo dará mayor confianza a consumidores.
Actualmente, 40% de la mercancía que los grandes supermercados venden es importada, debido a que los centros de abasto mexicanos no cumplen con los estándares internacionales y la certificación de inocuidad y calidad de los productos, reconoció Francisco López Tostado, subsecretario de Agricultura de la Sagarpa.
En conferencia de prensa, explicó que los proveedores de alimentos mexicanos se sujetarán a la certificación SQF (Safe Quality Food), que es reconocida por los supermercados internacionales, lo cual asegurará en un futuro disminuir el desplazamiento de los centros de abasto nacionales.
Al año se trasladan del campo y se comercializan a través de las distintas centrales de abasto del país 14 mil millones de toneladas de mercancía.
Sin embargo, a decir de Jaime Cornejo Castillo, presidente de Conacca, el inadecuado manejo de los productos provoca que no se venda de forma fresca y con una buena calidad.
Detalló que esto ha causado un incalculable costo a los proveedores, ya que los grandes consorcios transnacionales como Wal-Mart importan la mayor parte de su mercancía para cumplir con normas internacionales de calidad.
"Buscamos apoyo de las autoridades porque las grandes cadenas comerciales prefieren productos de otras naciones debido a la falta de una certificación de calidad e inocuidad de la mercancía", dijo.
Detalló que el programa será operado con ayuda de las secretarías de Economía y Agricultura y contempla inicialmente el asesoramiento y la aplicación de procesos de certificación de 100 empresas, el cual tendrá un costo aproximado de 2 millones 500 mil pesos, donde el sector privado aportará 50% y la otra mitad el gobierno.
Comentó que presentarán a quien llegue a la Presidencia un Plan Nacional de Abasto.
Por su parte Víctor Sandoval, director de Capacitación e Innovación Tecnológica de la Secretaría de Economía, dijo que la aplicación de la tecnología y la logística es fundamental para bajar los costos, los cuales llegan a representar en la operación más de 20%
Paul Ryan, director ejecutivo del Instituto SQF, firma que aplicará el método y entregará la certificación a las empresas elegidas, mencionó que el distintivo dará mayor confianza a consumidores.
Actualmente, 40% de la mercancía que los grandes supermercados venden es importada, debido a que los centros de abasto mexicanos no cumplen con los estándares internacionales y la certificación de inocuidad y calidad de los productos, reconoció Francisco López Tostado, subsecretario de Agricultura de la Sagarpa.
En conferencia de prensa, explicó que los proveedores de alimentos mexicanos se sujetarán a la certificación SQF (Safe Quality Food), que es reconocida por los supermercados internacionales, lo cual asegurará en un futuro disminuir el desplazamiento de los centros de abasto nacionales.
Al año se trasladan del campo y se comercializan a través de las distintas centrales de abasto del país 14 mil millones de toneladas de mercancía.
Sin embargo, a decir de Jaime Cornejo Castillo, presidente de Conacca, el inadecuado manejo de los productos provoca que no se venda de forma fresca y con una buena calidad.
Detalló que esto ha causado un incalculable costo a los proveedores, ya que los grandes consorcios transnacionales como Wal-Mart importan la mayor parte de su mercancía para cumplir con normas internacionales de calidad.
"Buscamos apoyo de las autoridades porque las grandes cadenas comerciales prefieren productos de otras naciones debido a la falta de una certificación de calidad e inocuidad de la mercancía", dijo.
Detalló que el programa será operado con ayuda de las secretarías de Economía y Agricultura y contempla inicialmente el asesoramiento y la aplicación de procesos de certificación de 100 empresas, el cual tendrá un costo aproximado de 2 millones 500 mil pesos, donde el sector privado aportará 50% y la otra mitad el gobierno.
Comentó que presentarán a quien llegue a la Presidencia un Plan Nacional de Abasto.
Por su parte Víctor Sandoval, director de Capacitación e Innovación Tecnológica de la Secretaría de Economía, dijo que la aplicación de la tecnología y la logística es fundamental para bajar los costos, los cuales llegan a representar en la operación más de 20%
Paul Ryan, director ejecutivo del Instituto SQF, firma que aplicará el método y entregará la certificación a las empresas elegidas, mencionó que el distintivo dará mayor confianza a consumidores.
Actualmente, 40% de la mercancía que los grandes supermercados venden es importada, debido a que los centros de abasto mexicanos no cumplen con los estándares internacionales y la certificación de inocuidad y calidad de los productos, reconoció Francisco López Tostado, subsecretario de Agricultura de la Sagarpa.
En conferencia de prensa, explicó que los proveedores de alimentos mexicanos se sujetarán a la certificación SQF (Safe Quality Food), que es reconocida por los supermercados internacionales, lo cual asegurará en un futuro disminuir el desplazamiento de los centros de abasto nacionales.
Al año se trasladan del campo y se comercializan a través de las distintas centrales de abasto del país 14 mil millones de toneladas de mercancía.
Sin embargo, a decir de Jaime Cornejo Castillo, presidente de Conacca, el inadecuado manejo de los productos provoca que no se venda de forma fresca y con una buena calidad.
Detalló que esto ha causado un incalculable costo a los proveedores, ya que los grandes consorcios transnacionales como Wal-Mart importan la mayor parte de su mercancía para cumplir con normas internacionales de calidad.
"Buscamos apoyo de las autoridades porque las grandes cadenas comerciales prefieren productos de otras naciones debido a la falta de una certificación de calidad e inocuidad de la mercancía", dijo.
Detalló que el programa será operado con ayuda de las secretarías de Economía y Agricultura y contempla inicialmente el asesoramiento y la aplicación de procesos de certificación de 100 empresas, el cual tendrá un costo aproximado de 2 millones 500 mil pesos, donde el sector privado aportará 50% y la otra mitad el gobierno.
Comentó que presentarán a quien llegue a la Presidencia un Plan Nacional de Abasto.
Por su parte Víctor Sandoval, director de Capacitación e Innovación Tecnológica de la Secretaría de Economía, dijo que la aplicación de la tecnología y la logística es fundamental para bajar los costos, los cuales llegan a representar en la operación más de 20%
Paul Ryan, director ejecutivo del Instituto SQF, firma que aplicará el método y entregará la certificación a las empresas elegidas, mencionó que el distintivo dará mayor confianza a consumidores.