El contrato cubre la adquisición de 10 Airbus A318, 10 A320, siete A319 y tres A321, que comenzarán a ser entregados a partir del segundo semestre de 2006. Los aviones, cuya capacidad oscila entre las 120 y 200 plazas según el modelo, serán propulsados con motores CFM56-5B de CFM International, compañía propiedad de Snecma y General Electric. El pedido de los motores se eleva a US $360 millones a precio de catálogo.
Los aviones sustituidos por este pedido serán los A320 más antiguos de la flota, así como aviones MD-87, MD-88 y los siete aviones B-757. La sustitución de los MD y los B757 supone la salida definitiva de aviones Boeing de la flota de Iberia, después de que en 2003 optara por los Airbus A340 para sustituir los Boeing B747 de la flota de largo recorrido.
De hecho, Iberia se convertirá en la única gran compañía de red europea con una flota de corto, medio y largo radio compuesta por aviones de un sólo fabricante, una homogeneidad que supone importantes ahorros en términos de eficiencia, formación de tripulaciones y mantenimiento de aeronaves. La compañía ha cuantificado en US $150 millones los ahorros que le reportará esta renovación de flota en los próximos tres años por su menor consumo de combustible.
"Con esta compra, Iberia da otro importante paso hacia el futuro, asegurando la máxima eficiencia y flexibilidad respecto a su flota y sus costes operativos", declaró el presidente de Iberia, Fernando Conte, en un comunicado remitido por Airbus.
"Esto permite a Iberia competir tanto en costes como en calidad y mantener su posición como una de las compañías líder del mundo", añadió.