Aeroméxico Cargo solicitó a la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) la certificación CEIV Pharma ante la demanda de productos farmacéuticos que se ha registrado en los últimos meses.
“Hay una alta demanda asociada a productos farmacéuticos principalmente a medicamentos que requieren control de temperatura. Es un producto que siempre ha estado ahí, es un producto que se ha ofrecido pero que en estos meses ha repuntado”, dijo Alejandro Méndez González, vicepresidente senior de la compañía.
Por ello, explicó que en diciembre del año pasado comenzaron el proceso ante dicho organismo y esperan obtener la certificación a más tardar en el tercer trimestre de 2021.
El CEIV Pharma (Centro de Excelencia para Validadores Independientes en Logística Farmacéutica) es un esfuerzo que inició IATA desde 2014 para garantizar que las instalaciones, el equipo, las operaciones y el personal cumplan con todas las normas, reglamentos y directrices aplicables que se esperan de los fabricantes farmacéuticos.
En entrevista con T21, comentó que la certificación brindará a sus clientes la tranquilidad de que la aerolínea cuenta con el personal, procesos e infraestructura que garantizarán la cadena de frío para el movimiento de dichos productos.
Detalló que actualmente Aeroméxico Cargo cuenta con instalaciones adecuadas como almacenes con cámara fría, además 40 empleados se encuentran capacitándose y lleva a cabo otras acciones, aunque en el proceso ante la IATA se pueden identificar mejoras.
“Tenemos un almacén fiscalizado renovado, cámaras frías en México y en muchas estaciones. Esperamos que sí haya observaciones, pero por el lado de la infraestructura estamos relativamente positivos en que no tendremos que invertir mucho para cumplir con los requerimientos de la certificación CEIV. Creemos que nuestra participación dentro del producto pharma se incrementará significativamente con esta certificación”, sostuvo.
Cabe mencionar que en febrero pasado, Aeroméxico transportó la sustancia activa que ayudará a la fabricación de vacunas contra el COVID-19 a través de un Boeing 787, tres contenedores tipo Va-Q-Tainers con peso total de 2.4 toneladas, que cuentan con un estricto control de temperatura de alto desempeño. La tecnología utiliza hielo seco para mantener su interior en un rango de -70°C hasta +25°C.
Durante 2020, la división de carga de Grupo Aeroméxico enfrentó varios retos derivado de la pandemia por la COVID-19 y la baja de capacidad, por ello comenzaron con vuelos chárter exclusivo de carga a través de sus aviones Dreamliner 787-8 y 787-9, los cuales, hasta el momento suman más de 300 operaciones.
“El primer vuelo a Frankfurt fue el inicio de lo que hoy son más de 326 vuelos chárter. Prácticamente todos con origen en Asia, principalmente China, la mayor parte en los meses pico de la pandemia tuvo como destino final México y América Latina, en países como Brasil, Colombia, Perú, Centroamérica fue todo un reto”, recordó Méndez González.
Al igual que otras aerolíneas, la compañía habilitó las cabinas de pasajeros de sus aviones para subir carga, todo bajo revisión del fabricante Boeing y de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC).
El 90% de los vuelos, dijo, se transportaron equipo de protección personal como caretas, guantes, batas, goggles, cubrebocas. Además, productos generados por el comercio electrónico.
Tan solo en 2019, la división de carga representó el 6.0% de los ingresos de Grupo Aeroméxico, mientras que para 2020 fue el 16 por ciento. En el cuarto trimestre del año pasado se ubicaron en 1,321 millones de pesos, un incremento de 55.3% en comparación con el tercer trimestre y un incremento de 22.6% respecto al mismo periodo del año anterior, a pesar de la disminución en capacidad de 47.6 por ciento.
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