Ante la incertidumbre de lo que sucederá en 2026 en la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), algunos especialistas afirman que esta será crucial para la continuidad de esta, ante algunos puntos importantes que se han dado desde su inicio en 2018, como el capítulo laboral o las reglas de origen.
El Instituro Mexicano de Ejecutivos en Comercio Exterior (IMECE) reunió a ex negociadores del T-MEC, quienes aseguraron que México debe contar con un buen equipo negociador que sepan qué aspectos del tratado se deben revisar.
Fernando Mayer, del capítulo de Servicios Financieros, por ejemplo, indicó que se debe hacer eco en la parte del equipo negociador, “con el nombramiento del secretario Marcelo Ebrard hay una persona con mucha experiencia que puede llevar esta negociación, veamos quien queda como subsecretario de Comercio Exterior”, aseguró.
Ante este panorama, señaló que los lideres de la revisión tendrán temas innovadores que pueden tocar en esta negociación.
En este sentido, Samantha Atayde, responsable de la negociación del capitulo de Institucionales y Anticorrupción, aseguró que los equipos, primeramente, deben saber lo que contiene la cláusula de revisión.
“Hay que ir sentando el tono y saber qué contiene y qué no contiene para saber cómo irnos moviendo”, aseguró.
Atayde indicó que esta cláusula indica que el T-MEC va a tener una vigencia de 16 años prorrogable por periodos iguales, sujeto a que los tres jefes de estado confirmen por escrito su deseo de continuar el tratado, y seguir un proceso de revisión, indicó.
Uno de estos procesos es que al menos con un mes de anticipación cada parte va a someter a la Comisión de Libre Comercio sus especificaciones sobre lo que se debe revisar del tratado, para lo qur cada país debe tener un proceso, el cual ya comenzó Canadá.
Por su parte, en Estados Unidos será con 270 días de anticipación, ya que debe llevar un procedimiento, ya que este documento será público; mientras que en México “esperaríamos que emitan ciertos lineamientos y parámetros para saber cómo se va a canalizar, va a constituir grupos a doc para que bajen a nivel técnico esas recomendaciones o cómo va a funcionar”, señaló Samantha Atayde.
Asimismo, indicó que México debe tener transparencia en el proceso, por lo que debe señalar cómo se va a informar a los stakeholders, ONGs, público en general, sociedad civil y cómo se le va a dar participación en este proceso.
Sin embargo, la especialista aseguró que es un proceso de revisión del funcionamiento del tratado de temas que impacten a la competitividad regional a la que las tres partes aspiran, y no una renegociación.
Por su parte, Moises Zavaleya, de Acceso a Mercados indicó que en esta revisión se hará mucho énfasis en la parte de vehículos y autopartes, sobre todo porque es una de las industrias a las que se les está poniendo mayor lupa en las reglas de origen.
Cabe recordar que este tema es controversial entre México y Estados Unidos, llegado a un panel de discusión el año pasado, específicamente por las reglas de origen, ya que Estados Unidos lo consideraba una amenaza a la seguridad nacional.
“Desde que entró en vigor una de las prioridades en materia de comercio exterior es una correcta implementación y que los países estuvieran cumpliendo. El proceso de revisión va a tener esta característica todas las disposiciones se estén cumpliendo de manera adecuada y ver en donde y en qué momento se podrían hacer determinadas mejoras”, aseguró.
El elefante blanco en la habitación
Como lo mencionaron los exnegociadores, el elefante blanco en la habitación será China, sobre todo porque Estados Unidos tiene una tensa relación con ese país, razón por la que muchas empresas de origen chino están llegando a invertir al país para poder acceder al mercado estadounidense.
“Tenemos una cláusula de -si vas a negocia con China me debes informar y si vas a firmar un tratado yo tengo derecho a renunciar y terminar el T-MEC- eso está poniendo el tono en la conversación sobre China, no estoy diciendo que esto lo estén negociando, pero creo que las acciones que ha tomado a México se acercan a eso”, aseguró Samantha Atayde.
Miroslava Pérez, jefa de la mesa de negociación de reglas de origen, señaló que durante las negociaciones del tratado enfatizaron en contar con un marco normativo que definiera los requisitos bajo cuáles requisitos se considera un producto se define originario y definir los procesos productivos.
Se debe recordar que, además de la industria automotriz, la industria acerera también ha sido tema de discusión, por sospechas de que este material pero de origen asiático quiere llegar al mercado estadounidense, sin embargo, México cuenta con una industria acerera sólida.
Por ello, Miroslava Pérez indicó que hay dos palabras claves para la revisión del tratado: implementación y operación.
“No es una negociación, es una revisión. Los temas primordiales en reglas de origen es revisar la plena implementación del tratado. No tiene que ir más allá de modificar las reglas del tratado, es decir, que se implemente de forma adecuada y ese tiene que ser una línea estratégica”, dijo.
Por ello, Samantha Atayde indicó que la línea de la revisión también dependerá de las elecciones de Estados Unidos, ya que si queda el partido Demócrata, el tema laboral les seguirá preocupando; mientras que el partido Republicano se va a centrarse en el tema de acero, en el tema automóviles y China.
La especialista indicó que, por su parte, Canadá ya dijo que es una especie de check point o una revisión sobre asegurar que el tratado siga siendo relevante para las partes y que continúe fortaleciendo la competitividad regional.
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