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Maersk Line, división de barcos de contenedores de A.P. Moller-Maersk, registró ganancias en el segundo trimestre, pero enfrenta una estrategia con menores tarifas en el sector de transporte y con una superabundancia de embarcaciones, una tendencia que va a continuar, dijo la firma.
Un cambio en la estrategia generaría “importantes” inversiones en áreas como la exploración petrolera, dijo el grupo, tras abrir sus puertas por primera vez en sus 108 años de historia a analistas, inversionistas y medios de comunicación.
Los otros tres principales negocios del grupo –Maersk Oil, APM Terminals y Maersk Drilling– se beneficiarán en el futuro de un 50% de la inversión total del grupo desde el actual 34%, anunció empresa.
Su unidad Maersk Oil, particularmente, recibirá una inversión considerable, “el grupo se enfrenta a importantes inversiones para hacer crecer nuestro negocio y tiene líneas de crédito no utilizadas por 10,000 millones de dólares”, informó el presidente financiero de la compañía, Trond Westlie.
En tanto, la inversión en Maersk Line se reducirá entre un 25 y un 30 por ciento desde su 38 por ciento actual.
“Apuntaremos a resultados más estables”, dijo el presidente ejecutivo, Nils Smedegaard Andersen, quien señaló además que Maersk Line “seguirá siendo un negocio volátil”.
Vamos a seguir viendo una sobrecapacidad de buques durante algunos años.
Se espera que APM Terminals y Maersk Drilling contribuyan cada uno con 1,000 millones de dólares a los resultados del grupo en cinco años, agregó la compañía.
Estas unidades contribuyeron con 600 y 500 millones de dólares, respectivamente, de los 3,400 millones de dólares de beneficios que registró el grupo el año pasado, mientras que Maersk Line registró pérdidas por 600 millones de dólares y Maersk Oil ganancias por 2,100 millones.