México se ha beneficiado de las inversiones que hacen las compañías para relocalizar sus líneas de producción, así como las que buscan expandirse en el país, sobre todo por su posición geográfica, mano de obra y capacidad logística, entre otros factores.
Datos de un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) señalan que el nearshoring podría aumentar 78 mil millones de dólares (mdd) anuales en exportaciones adicionales de América Latina y el Caribe en el corto y mediano plazo.
En esta misma línea, CIAL Dun & Bradstreet resaltó que México es actualmente un gran exportador de manufacturas, lo que podría impulsarse gracias a esta tendencia, ya que su comercio exterior podría elevarse hasta 96% hacia el año 2030, de acuerdo con datos del monitor económico de CIAL Insights.
La importancia del sector manufacturero se refleja en que representa el 89.2% (484 mil 850.9 mdd) de las exportaciones totales (543 mil 762.1 mdd) en el periodo de enero a noviembre de 2023, según el último reporte de la balanza comercial de mercancías de México del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En este sentido, la firma señaló como un reto importante que el sector manufacturero mexicano presenta una barrera crediticia importante, ya que datos exclusivos de los clientes de CIAL Dun & Bradstreet arrojan que alrededor de 50% de las empresas tarda más de 15 días para cumplir con su fecha de pago y únicamente 7% de ellas presenta resultados positivos en sus evaluaciones de pago.
Por otro lado, además de retos como costos laborales, infraestructura y capacitación, CIAL Dun & Bradstreet señaló que el nearshoring trae consigo riesgos en el rubro comercial con Estados Unidos, relación que puede verse afectada por cambios en políticas y acuerdos comerciales; así como la inseguridad de la que es blanco el país y la volatilidad en los tipos de cambio.
Por otro lado, la compañía puntualizó que el sector manufacturero ha experimentado crecimiento y el nearshoring ha impulsado la demanda de servicios relacionados con la producción, como la logística y el transporte.
En sí, la cadena de suministro se ha visto beneficiada por esta tendencia, ya que la mayoría de las empresas han optado por regionalizar sus cadenas por diversas cuestiones como la cercanía y el impacto en el medio ambiente.
De acuerdo con el reporte Trade in Transition 2023, el 35% de los organismos norteamericanos implementa la regionalización; esto confirma que el ecosistema empresarial se incorpora cada vez más a la reubicación de los centros productivos.
Esto también lo señaló CIAL Dun & Bradstreet como una ventaja del nearshoring aplicado a manufactura, que vislumbra una mayor flexibilidad en la cadena de suministro, ya que las empresas pueden adaptarse rápidamente a cambios en la demanda y ajustar sus operaciones de acuerdo con las necesidades del mercado, acortando distancias, lo que también reduce riesgos de interrupciones en la producción.
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